—Yo lo haré —se ofreció Evanora.
—¿Estás segura? —preguntó Talia.
Evanora miró a Edgar. —Me reuní con mi alma gemela después de mucho tiempo. Esta es la casa de Edgar y vigilaremos este lugar mientras recuperamos el tiempo perdido. Ese... —Evanora señaló a Declyn—. O nos ayuda o que se largue. Eso se aplicará a todos los Guardianes.
—Esto queda lejos de casa —dijo Feya con voz débil, y Serena asintió en acuerdo con las palabras de Feya.
—No será por mucho tiempo —respondió Evanora—. Por lo que he oído, Amelia y Cornelia están cerca de abrir un portal. Podemos abrir uno aquí que conecte con nuestro Aquelarre.