—Damon estaba conduciendo hacia Darkbourne mientras intentaba localizar a Talia y con cada minuto que pasaba, su ansiedad iba en aumento. ¿Por qué se fue caminando sin decir nada?
Esa mañana, después de que Talia dejó el estudio, Damon terminó de trabajar y se fue al comedor justo a tiempo para el desayuno. Saludó a los invitados, pero no pudo comer.
Anoche, Talia no se unió a ellos para la cena, y cuando la vio la próxima vez, estaba en el club nocturno Shifters con dos chicos pegados a ella. Esta vez, Talia no iba a desayunar, y Damon tenía mal presentimiento al respecto.
Claro, Damon sabía que Talia probablemente se dirigiría al festival, e instruyó a Maya para que estuviera con ella, pero Maya estaba en la mesa, masticando una quiche, mientras que Talia no estaba por ningún lado.
—¿Dónde está Talia? —Damon preguntó a Maya a través del enlace mental.
—¿Por qué tendría yo que saberlo? —Maya respondió con una pregunta.
—Te pedí que la llevaras al festival.