Mientras se servía la tarta a los invitados, la gente empezó a mezclarse.
Damon y Talia se encontraron con Maddox, Tatiana, Tony y Kalina. Ninguno de ellos notó nada fuera de lo ordinario. Parecía una fiesta de cumpleaños como cualquier otra.
La gente se movía en sus grupos habituales. Luna Layla hacía de buena anfitriona, tejiendo entre los invitados y preguntando si se lo estaban pasando bien, la música sonaba y la gente charlaba sobre comida y bebidas.
Jorge encontró la oportunidad de unirse a Dawn, Zina y Owen.
—No veo una mosca molestando más —dijo Dawn a Jorge.
Jorge sonrió, sabiendo que la mosca en cuestión era Penélope. —Creo que encontró otra víctima. Penélope ya no estaba a la vista, y tampoco lo estaba el Alfa Guillermo.
—¿Crees? —preguntó Zina. —Parecía bastante persistente. Mujeres como esas no se rinden.
—¡Shush! —exclamó Dawn—. Muerde tu lengua, para que no lo gafes.