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Anhelos de libertad.
Bella nieve descuidada,
flotando en el vasto océano
sin pesca, siempre envidiada.
Alzo la vista y ahí está,
jactando su libertad.
"Mírate, la pubertad
dejaste atrás sin ventura
alguna. Has ansiado altura,
mas tu límite aquí está."
Burlándose, esta siguió
su camino al horizonte.
Nada, fuera valle o monte,
la paraba, ella avanzó.
Pero, ¿era realmente libre?
Su camino por el viento
es dictado. Movimiento
sin dirección ni descanso,
viviendo en un cielo manso.
Tras pensarlo, esto no es libre.
Burlándome, yo seguí
mi camino hacia el entierro.
Pues estamos en encierro,
sin delirio proseguí.
Tú, nube despreocupada,
atada por el océano
sin pesca, siempre engañada.
Yo, ya no te envidio más,
pues ambos somos iguales.
Sin control, cual animales.
Con gozo, no te vi más.
— Társalo
Tras leer por última vez el poema, mi fatigada vista se volvió borrosa, solo quedaban mis pensamientos.
Társalo, hijo… Escribiste una gran cantidad de poemas… En algunos de ellos muestras claramente como fueron tus días.
«Anhelos de libertad»… Lo escribiste hace un año, ¿verdad? En muchos poemas anteriores muestras tácitamente o incluso de forma explícita tu dolor… Ha sido un golpe duro, ¿verdad, hijo…?
Siempre con expectativas altas, queriendo alcanzar la cima del mundo… Mas la realidad fue otra… Envidiaste a todas las demás aves a las que no les cortaron las alas, ya que al contrario que tú, ellas sí que podían volar a libertad de su corazón y deseos…
Sentiste que la naturaleza misma se burlaba de ti, pues en cada lugar al que mirabas había nubes flotando, personas libres, dejándote observar esa belleza que ansiabas sin poder probarla… Hasta que te diste cuenta de que la envidia es inútil, lograste ver que todos estamos atados de alguna forma.
Demostraste ser alguien sabio, hijo… A tan temprana edad lograste poner en práctica el sentir gozo, el poder estar satisfecho y feliz con todo lo que tengas… Incluso en tus últimos momentos te mostraste satisfecho… Quizá tu vida, que otros ven como un fracaso, fue un completo éxito…
Társalo… Cuanto lo lamento… He fallado como padre y, aun así, incluso tras la muerte, tú aún me das un cálido abrazo con palabras… Cada vez que leo uno de estos poemas, es como si volvieras a mi lado, Társalo…
Mis párpados comenzaron a cerrarse lentamente. Mi corazón, aunque dolorido y tiritante, se aferró a tu calidez para poder descansar finalmente…
…
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¡¿Otro fallo?! ¡¿Qué puede ser ahora?!
Mi sangre estaba hirviendo, sentí un gran impulso de golpear algo.
¡Épsilon-82 ha sido un completo fracaso! ¡Y ni hablar de los demás!
¡Siempre igual! ¡Siempre igual! ¡Fallo tras fallo, error tras error!
¡¿Por qué no logro hacer nada bien?! ¡¿Soy tan incompetente?!
Mi cuerpo temblaba violentamente, quería vomitar a pesar de tener el estómago vacío y tener un nudo en la garganta. Además, sentía una gran presión en mi estómago y pecho.
Comencé a sollozar mientras lágrimas caían, no pude contenerme más.
"¡H-Hijo, hi-hija…! ¡Soy tan inútil que no pude salvaros! ¡Estúpida! ¡Inútil! ¡¡Inútil!! ¡¡Inútil!!" – Mis lamentos eran casi incomprensibles, las palabras a duras penas salían de mis labios, ahogados por las lágrimas y quejidos.
"¡¿Por qué no soy capaz de salvaros?! ¡D-Di todo de mí y más! ¡¿Pero no soy suficiente?!" – Continúe sollozando, mis piernas finalmente cedieron, cayendo de rodillas en el suelo, otra vez había dejado a un lado la experimentación.
"¡N-Ni siquiera soy capaz de crear una solución tras vuestra muerte…! ¡Ni siquiera sé por dónde empezar contigo, hija! ¡No merezco ser madre! ¡N-No soy capaz ni de decir vuestros nombres…!"
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Ah… Vamos, continúa…
El dolor de cabeza no es nada, ten tu mirada en los animales, ¡esta vez la teoría es muy prometedora…!
Seguí usando mi fuerza de voluntad y dolor para forzarme a seguir observando, no sabía cuánto tiempo llevo despierta, ni me importaba, ¿acaso me rendiría solo por mero sueño? ¡¿Acaso mis hijos no eran más importantes?!
Apretando los puños, mis nudillos se volvieron blancos y mis uñas se clavaron en las palmas de mis manos.
El constante ruido de los artefactos a mi alrededor solo acentuaba el dolor de cabeza, esto es lo que pasaba cuando se llevaban al límite, se sobrecargan y pueden romperse tras un tiempo. Si se rompen, solo tengo que reemplazarlos, no hay ningún problema…
Dejé de prestar atención a los ruidos y solo observé. Mis capacidades mentales se habían reducido en gran medida, solo podía centrarme en el experimento con gran dificultad.
Pasaba el tiempo, noté los cambios que les ocurrían a los distintos animales, ratas, monos, aves, etc., e intentaba teorizar, usándolo como base, pero mi mente no daba para más.
Repentinamente, sentí un gran frío en mi cuello, seguido por calor.
¿Uh…? ¿Q-Qué…?
Instintivamente, activé un hechizo defensivo, una capa de fuego rodeó todo mi cuerpo.
¡¿Qué ha ocurrido?! ¡¿Es un fallo con alguno de los artefactos?! ¡¿Algo en el experimento falló?!
¡No, imposible!
¿Un ataque? ¡Imposible! ¡Nadie puede entrar sin que suene la alarma! ¡Me hubiera dado cuenta al instante!
De repente, sentí mi interior ardiendo. Parecía que algo estaba avanzando en mi interior, quemando todo por donde pasaba.
¡Agh…! ¡¡Joder!! ¡¿Qué es esta cosa?!
Solo habían pasado unos instantes desde que todo esto comenzó. Antes de que pudiera hacer algo y poco después de que el dolor apareciera, mi hechizo defensivo se volvió errático, perdí control sobre él y rápidamente se desvaneció.
Mis pupilas se contrajeron, sabiendo lo que esto significaba.
El dolor en mi interior se incrementó en gran medida, estaba sufriendo el retroceso del hechizo.
Mi cara se puso pálida, mi cuerpo se debilitó.
Desesperadamente, traté de usar un hechizo curativo, pero por algún motivo no podía movilizar mi maná.
Traté una y otra vez, pero nada sucedió.
Cuando mi vista se aclaró, ya estaba tirada en el suelo, mi cuerpo completo se sentía frío, mis pensamientos eran aún más lentos que antes.
Mi rostro parecía estar sobre un charco… ¿Qué es esto…?
Intenté forzar mi vista, pero no logré ver nada.
Mi cuerpo se volvía cada vez más entumecido, pero el dolor en mi interior solo se intensificaba.
Entonces, mi vista finalmente se desvaneció…
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El cuerpo de Hyprónesis se quedó inerte, un charco de sangre se había formado, expandiéndose desde el corte en su cuello. Sus ojos habían perdido toda vida, mientras que su bello rostro se había quedado marcado con una expresión de confusión.
El veneno ha surtido efecto.
Miré al otro lado de la habitación, donde un hombre canoso, aún con aspecto imponente, se encontraba tirado sobre una mesa, cualquiera pensaría que estaba dormido si no fuera por la sangre que fluía desde su espalda. Su corazón había sido perforado desde un corte en el hombro.
Este era el cadáver de Kháris, el rey.
Sin perder el tiempo, dejé caer sobre el suelo otro cuerpo más.
Un joven pelinegro de piel bronceada, su cuerpo era musculoso, mientras que su rostro aún parecía mostrar rastros de ira, un profundo corte se encontraba entre su clavícula izquierda y pecho. Este cadáver…
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(Tiempo atrás)
Adaphia y Társalo han muerto finalmente… Sus Mortalidades son mías, esta nueva vida está siendo un éxito.
Estaba concentrado en mi circuito mágico, una gran cantidad de espeso maná azul oscuro estaba dentro de él. Este era maná de segundo nivel, también conocido como maná marino debido a su coloración. Este era mucho más oscuro y espeso debido a su densidad, una clara diferencia con el maná aguamarina, el cual es bastante parecido a la piedra preciosa.
En algún punto de este circuito, el maná era falso, pues eran las Mortalidades Soma y Goetia, las cuales estaban contenidas en dos pequeñas partes de mi maná.
Ni siquiera yo conozco la localización exacta de las Mortalidades, al fin y al cabo, ni siquiera puedo fiarme de mí mismo. Los grandes hechizos y artefactos de este mundo pueden llegar a tener propiedades impensables después de todo.
Dejé de centrarme en mi interior, actualmente me encontraba en mi laboratorio personal, un lugar donde invertía mucho tiempo desde hace meses.
Con un movimiento de mi mano derecha, el anillo en mi dedo índice brilló suavemente, este era un artefacto Tópos, específicamente un anillo de almacenamiento.
El espacio sobre el anillo se distorsionó, todo parecía curvarse y volverse borroso al mirar a través de este. Tras un instante, varias hojas, raíces, lingotes, minerales, carnes, pieles, entre muchos otros, cayeron sobre la mesa.
Inmediatamente todo se volvió colorido, algunos materiales brillaban intensamente, otros pasaban desapercibido, otros comenzaron a mover el maná circundante, y demás diferentes efectos.
Desde que me convertí en un mago de rango 1, comencé a hacer una gran cantidad de experimentos, cosa común entre los magos.
Mediante las grandes compras de materiales e ingredientes mágicos, comencé a añadir recursos necesarios para mis siguientes pasos, después de todo, tenía tiempo suficiente para ser discreto.
Sin demora alguna, comencé el procesado de materiales.
Con un mortero de vidrio, comencé a moler algunas hojas, raíces y minerales, dejando los polvos producidos en contenedores.
Posteriormente, comencé a cortar por piezas algunos de los trozos de carne y piel, para después trocear otras plantas.
Quité las impurezas de muchos materiales, utilizando procesos de filtración, destilación, entre otros.
Agarré el polvo de la corteza de un gran pino medicinal junto a dos plumas procesadas de un fénix joven y las metí directamente en el fuego del horno.
Una gran reacción ocurrió, pues las llamas sobrepasaron mi altura por unos instantes antes de volver a un tamaño similar al anterior, ahora que ambos ingredientes se habían mezclado con las llamas, estas se habían vuelto de un intenso color verde.
Durante todo el proceso, mi mano había estado dentro de la llama, pero ningún daño se había producido. De hecho, sentía una calidez agradable que me llenaba de vitalidad. Este era un fuego con propiedades curativas.
Asentí levemente mientras aparté mi mano del fuego y comencé a esperar por unos segundos.
Cuando vi que era el momento adecuado, metí tres lingotes de icor de enredaderas constrictor, un tipo de planta usualmente de rango 3. Al contrario que muchas otras, esta no posee savia, sino sangre y vasos sanguíneos. Estos lingotes se obtienen fundiendo el mineral en su sangre.
El metal grisáceo se derritió en un líquido incandescente. Inmediatamente, comencé a controlar el fuego con mi maná, moldeando la forma del metal a voluntad.
Mientras tanto, mis manos seguían añadiendo varios ingredientes al fuego cuando era necesario, este tipo de multitarea con movimientos precisos y fluidos era algo que solo la experiencia otorgaba.
Sin más, continúe con la creación del artefacto…
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Seguí tallando las runas del artefacto en proceso. Líneas y líneas aparecían constantemente, apenas visibles entre el brillante fuego verde.
Estas runas permitirán el flujo de maná en el artefacto, después de todo, las runas no son más que un circuito mágico artificial.
Cada vez que el hueso que usaba como cincel tallaba alguna parte de las runas y yo inyectaba mi maná en ellas mediante este, las llamas limpiaban la superficie, borrando los hermosos patrones sin dejar rastro. Por supuesto que esto solo era de forma visual, en realidad, toda runa seguía grabada.
Finalmente, di las últimas cinceladas, agarré el artefacto con unas pinzas y lo sumergí en aceite de hierba gélida. Esto eliminaría cualquier residuo del elemento Pyros resultante del uso de fuego durante el proceso de creación.
Tras un minuto de burbujeo, saqué el producto final, poniéndolo al lado de otros dos artefactos.
Uno de los artefactos, la espada corta, era un artefacto de rango 3 el cual modifiqué para mejorar su eficiencia, específicamente para atravesar armaduras.
Usualmente, es difícil alterar artefactos de alto nivel, pues estos se encuentran en el límite de lo que pueden alcanzar, modificar uno de esos artefactos es similar a crear otro desde cero e incluso suele ser más difícil.
Sin embargo, este era un simple artefacto de rango 3. Con mis conocimientos y experiencias, era un trabajo sencillo, pues estaba lleno de lagunas fácilmente rellenables y fallas reversibles. Aunque, al fin y al cabo, sigue siendo un mero artefacto de rango 3. Para subirlo de rango harían falta muchos más materiales de rango 4.
El otro artefacto era una poción. Este era un veneno basado en una creación ocurrida en mi vida pasada, se volvió popular en este continente debido a sus potentes efectos. Este tenía una gran eficiencia en destruir el circuito mágico de cualquier ser vivo, una vez hacía efecto, imposibilitaba el uso del propio maná. Sin embargo, era muy fácil de bloquear en una batalla, además de que se crearon muchas contramedidas ante este.
El creador de este veneno fue asesinado pocos años después de que se popularizara.
Sin embargo, en esta vida aún no se ha creado ningún tipo de antídoto ni método de defensa… Si se usa correctamente, puede matar con facilidad. Aunque esta versión es solo de rango 3, algo más baja que la original, sigue siendo muy útil.
Por último, mi reciente creación, un artefacto Bios con forma de daga. Este, aunque del mismo rango que los demás, era capaz de cambiar permanentemente la apariencia de una persona, además de "juntar los restos que queden".
Con esto finalmente podría comenzar mi viaje…
Mi mano agarró firmemente la daga y la levanté levemente, pasando mi maná por el circuito artificial de esta.
Con todo preparado, la punta de la daga tocó mi brazo izquierdo, comenzando a desollarlo por completo.
Con movimientos eficientes, tiras de piel comenzaron a caer en el suelo, algunas gotas de sangre las siguieron, pero, gracias a los efectos de la daga, el sangrado no tuvo importancia mayor.
A pesar de que la mayoría de receptores de dolor habían sido cortados, el dolor permanecía e incluso se intensificaba, debido al mismo efecto del artefacto.
Apreté los dientes y mantuve mi respiración estable, mis fríos ojos y mi agarre se mantuvieron tan firmes como siempre. El dolor no se podía ignorar, pues el cuerpo de mi joven yo no estaba adaptado a este en lo más mínimo, pero mi mente curtida se mantuvo imperturbable.
Tras la piel, trozos de músculo comenzaron a caer al suelo, comencé a moldear y esculpir mi propio cuerpo.
Con cortes fríos e indiferentes, pieles y carnes cayeron.
El olor a sangre comenzó a llenar la sala cuando terminé con mis dos brazos, pero mi mano, ahora deformada y desollada, siguió con mis piernas.
Posteriormente abdomen, espalda y cara.
Mi propio cabello y rostro estaban ahora en el suelo, pero esto era solo el principio.
Podía sentir como mi cuerpo entero temblaba, este físico estaba llegando al límite de dolor que podía soportar.
Aun así, no había terminado.
Aunque con respiración agitada, mis ojos, lo único que se podía ver claramente en mi rostro, brillaron con crueldad.
La daga descendió hacia mi cuerpo inferior, al siguiente momento, un apéndice cayó al suelo con un sonido amortiguado.
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(Actualidad)
Mi antiguo cuerpo quedó en el suelo junto al de Hyprónesis y Kháris, la daga que los había asesinado estaba en su mano.
Esa daga estaba llena de mis anteriores huellas dactilares debido al proceso de creación, pero ningún rastro de mi nueva identad, pues con este nuevo cuerpo siempre he usado guantes.
Intencionalmente, chamusqué parte del cuerpo con un hechizo Pyros tras matar a los dos reyes. Además, había dejado un corte profundo en el "cadáver". De esta forma, parecería que tras un breve combate, o el retroceso de una explosión provocada por algún hechizo, fue herido con su propia arma, siendo afectado por su propio veneno.
Después de todo, el único fallo de este falso cadáver es la inexistencia de un circuito mágico. Pero, ahora que el de los reyes también ha sido destruido, todo apuntará a que es obra del veneno y no a que es un cuerpo falso.
A cambio, perdería uso de este veneno, pues con sus rastros muchos magos crearían métodos protectores ante este. Sin embargo, es un buen intercambio, después de todo este veneno no es algo demasiado importante y perdería su valor cuando consiga el suficiente poder.
Tras haber preparado la escena del crimen, me moví rápidamente a varios puntos de la sala, quitando con cuidado varios artefactos de vigilancia.
Conocía los métodos de desactivación y la posición de estos, después de todo vine aquí personalmente más de una vez para ayudar a los dos reyes.
Cada vez que desmantelaba uno de los artefactos, me aseguraba de romperlo haciéndolo parecer daño colateral, de esta forma no se quedaría ningún registro guardado de mi nueva identidad ni nada que me apuntase.
Cuando finalicé con los ocho artefactos, eché un último vistazo al laboratorio, grandes partes estaban destruidas como si una batalla hubiera ocurrido.
Mi anterior identidad cargaría con la culpa de haber asesinado a sus padres, sin embargo, esto no me importaba en absoluto.
Sus muertes solo me traían beneficios, mientras que admitir la culpa con mi identidad original me libraría de problemas… ¿Por qué debería de acobardarme ante la idea de abandonar mi identidad o vida? Mientras me haga llegar a mis metas, sacrificaré cada pieza de mi cuerpo si es necesario.
Asintiendo ligeramente, me di la vuelta y caminé hacia la puerta, la cual se abrió lentamente.
La entrada funcionaba con un reconocimiento de maná, pues este era un sistema avanzado, superior al reconocimiento facial, dactilar y otros, pues para estos magos de bajo rango es imposible hacer algo como cambiar tu propio circuito mágico.
En este laboratorio, solo está permitida la entrada de las personas con mayor confianza, cinco personas, de las cuales solo quedaban tres y, ahora, solo una.
Cuando las puertas se abrieron, los pasillos iluminados por la noche me saludaron.
Mis pasos no se escuchaban en lo más mínimo, mientras que la puerta se cerró como si nada hubiera pasado, como si todo hubiera sido solo un sueño.
Indolente, yo seguí
mi camino hacia el entierro.
Pues, aunque estando en encierro,
imparable yo existí.
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…
3.007 palabras.
¡Hola a todos! Soy el autor de esta historia una vez más.
Como habréis notado, he cambiado la forma en que la narración cambia de perspectiva, ya que muchas personas (todas) se quejaron de que era muy confuso.
Ahora, me gustaría darle un gran saludo y agradecimiento a Azaroth_7160, un gran fan que ha mandado sus power stones a esta novela cada día!
Hacer esta historia va a ser algo difícil, ya que a partir de ahora tengo que escribir los capítulos y traducirlos al inglés, ya que mi amigo que traducía la historia no puede hacerlo actualmente (los capítulos de la versión inglesa son todos traducidos por mí, pues los anteriores los borré debido a algunos cambios), ¡pero ciertamente no la voy a dejar! Disfruto mucho escribiéndola y, ciertamente, disfruto aún más que vosotros lo leáis.
Como siempre, sed libres de comentad cualquier duda, cosa extraña o simplemente remarcar algo, ¡eso es lo que hace que una comunidad sea entretenida y alegra mi trabajo como autor!
¡¡Espero que sigáis disfrutando de la novela!!