Las palabras de Elías causaron una conmoción en ambos bandos. La inesperada renuncia del Héroe nunca había sucedido en toda la historia de la nueva Era. Y aunque las razas estaban contentas por que Noah tomaría el lugar que le correspondía, el ejercito de los demonios estaban muy confundidos, perdidos y sin saber que hacer.
Algunos de los mas impactados en el tema eran los compañeros del Héroe. Ellos deducían que su renuncia esta relacionado a la poca capacidad que mostro a lo largo del viaje y su indecisión de ser digno del titulo. También, el hecho que nadie lo respetaba en la actualidad, demostraba que no era merecedor de ser Héroe.
La mas impactada por la acción del Héroe fue la misma Reina Demonio. Ella retrocedió unos pasos incredulidad y busco indicios de una estrategia o mentira. No podía ser cierto que halla desidia abandonar su papel en el momento mas importante de esta época. Pero mientras mas inspeccionaba, mas llegaba la resolución que decía la pura verdad. Eso la aterraba de sobremanera.
—¡...Espera un momento!¡¿Puedes repetirlo?!No escuche bien—rio incrédula. Debía ser la emoción de la batalla y la verdad que obtuvo la que jugo con su mente.—Ya sabes, la emoción de la batalla.
—Esta bien. Dije: Renuncio.
La Reina Demonio dejo su aura divina para sujetar de la camisa al Héroe y acercar su rostro. Lo miro con una sonrisa muy fría y libero un poco de su aura. Tenia que resolver este problema antes que creciera a una escala irreversible.
—Mira, Héroe, tu tienes que pelear conmigo. Tú, y solo tu, eres el Héroe. No hay otro como tu. ¿O acaso crees que esta posición la puede tener otro. ¡Deja de fantasear, ¿quieres?!
—Siento que te moleste, pero no soy el Héroe. Como voy a ser uno, si no soy considerado uno. Si bien agradezco que pienses bien de mi, la decisión esta tomada—hablo. Separo las manos de la Reina sorprendida y comento:—No tienes que molestarte por la batalla, hay alguien que es considerado un Héroe entre las razas. Él puede convertirse en tu rival.
—¡Que dices, Elías¡¿No te entiendo?—grito Noah. Su amigo era de las personas que nunca se rendían ante nada. Si pudo avanzar al perder a su abuelo, la figura mas importante en su vida, algo como esto no era nada.—¿Es esta una extraña broma enfermiza?
—¡Se que estas nervioso, pero esta no es la forma de expresarlo!—dijo Aurora.—¿Que diría Dasha si te escuchara?
—Actúas fuera de lo normal. Se que estas resentido por no compartir el poder mis ancestros. Lo siento, no tuviste el permiso de mis padres. Eso no significa que puedas pronunciar tales palabras—menciono Olivia.
—También me disculpo por la prohibición del clan para que no visitaras el estaque de espíritus. Se que es un elemento muy importante para el Héroe, pero creyeron que no lo necesitabas—agrego Hikari.—Ya me disculpe, ¡ahora ten el valor de pedir perdón por tal tontería!
Tanto Charlotte y Sofía copiaron las palabras de Aurora. Ambas no tenían algún conocimiento de que sus respectivos lugares de nacimiento bloquearan el crecimiento de Elías, así que no tenían mucha preocupación. Aunque, estaba enojadas con los lideres del clan Kitsune y Dragon por no respetar la posición de Héroe, independiente de lo inservible del actual en comparación a los anteriores.
—No bromeo. Tampoco se disculpen por actos que nunca hicieron. En primer lugar, no soy el tipo de persona que fuerza a otras para entrar a lugares por su estatus o poder—dijo sin voltearse.—Noah, tu mas que nadie debe entender el favoritos de las razas. Si ellos te considerar el verdadero Héroe, debes serlo. No olvides que todos conocen las hazañas y logros de los Héroe anteriores, por lo que tienen una compresión clara de su fuerza.
—Elías, ¿tu...?
—No lo niegues. En este momento, el ejercito de las razas opina lo mismo—interrumpió. Volteo un poco su rostro para ver a su amigo con un ojo y explico:—El acta de paz entre las razas se renueva por el respeto al Héroe. Todo nuestro viaje por la mitad del continente sirvió para demostrar que el Héroe estaba de acuerdo. Pero si no hay respeto por el Héroe actual, nadie tendría una razón valida para renovarla. La mejor prueba la estas viendo tu.
Noah guardo silencio. No había comprendido la razón por la que tenían que viajar a cada país cuando no beneficiaban mucho al Héroe. Sin importar las capacidades de su amigo, la nula ayuda de los países no le permitió avanzar. Ahora que él lo explico, cayo en cuenta que todo fue mas por política que la guerra contra las demonios.
—Lo vuelvo a repetir: Lo siento, Reina Demonio—se disculpo mientras la miraba.—Diste un gran respeto hacia mi persona y yo te escupo en la cara. No me importa si me perdonas, solo vine a decirte mi decisión por respeto hacia ti, y nada mas.
La Reina Demonio no supo como procesar tal información. Congelada en su lugar, observo como el Héroe rasgaba el espacio sin ningún movimiento y se marchaba del campo. En su sitio, comenzó a oír palabras que despertaron la furia de su corazón:
—¡Que bien!¡Por fin se fue el falso Héroe!—exclamo un humano.
—Veo que por fin tuvo las agallas de renunciar. Alguien como él no es digno de tal titulo—agrego una mujer de la Raza Tiger.
—Las estrategias de nuestro clan Kitsune resultaron. ¡Por fin ese tipo tan patético se marcho! Ahora se hará justicia—menciono feliz una Kitsune.
—No hablemos de nuestro Clan Dragon. Es gracias a nuestro esfuerzo que desviamos sus recursos al verdadero elegido—sonrió un hombre con cuernos.—¡Quien se creía para ser merecedor de nuestros poderes! Todos sabemos que su posición es una estrategia de engaño de la Sacerdotisa.
La Reina Demonio apretó los puños con tal fuerza, que sus uñas penetraron su piel. La sangre dorada de la demonio quedo eclipsaba por los ojos llenos de instinto asesino y dientes apretados. Estaba tan enojada y aterrada por las acciones de las razas que apretó la empuñadora de serpiente con fuerza.
La acción de la Reina Demonio provoco que todo el continente empezara a temblar. Los habitantes de cada territorio llegaron a la conclusión que el combate final había comenzado, y esperaban que sus respectivos elegidos ganaran. En cuanto a los individuos en el epicentro, tuvieron que volar para no ser tragados por las grietas y ser sumergidos en el magma que surgía de la tierra.
—¡¡¡Ustedes, desgraciados!!!¡¡¡Entienden el problema que causaron!!!¡¡¡¿Creen que esta batalla es un juego?!!!—grito furiosa. El aura escarlata expulsada de su cuerpo tomo la forma de miles de almas en agonía. Luego de usos segundos, freno su liberación de poder y suspiro.—No valen mi tiempo. ¿Debo encontrar al Héroe y concluir? El tiempo es limitado.
El ejercito de las razas recupero la respiración por tal poder y miraron a la causante. Extrañados, vieron como recogía el bastón y se retiraba hacia las tierras demoniacas. No entendían por que se marchaba, si el verdadero Héroe pelearía y cumpliría su destino.
—¡Oye, Reina Demonio!¿Por que te marchas?—pregunto un anciano. Al ser el actual líder de los caballeros de la raza humana y maestro de Noah, era su deber velar el inicio del combate.—¡No vez que el Héroe espera empezar el combate!¡Tu misma sabes que no puedes retirarte así por así!
—¿El Héroe?¡¿Acaso crees que soy ciega?!—rio. Detuvo su paso, volteo su rostro para que un ojo lo viera y endureció su mirada.—¡No te burles del titulo de Héroe y Reina Demonio! Si fuera tan fácil obtenerla, no habría razón para que existieran.
Un tiempo que nadie fue capaz de percibir, el cuerpo del líder de los caballeros exploto. El ejercito de las razas y el ex grupo del Héroe quedaron anonadados por el acontecimiento. Después de procesarlo, muchos gritaron aterrados, enojados, tristes y temerosos. Independiente de sus sentimientos, todo estaba apuntado a la Reina Demonio.
—¡¡Reina Demonio!!—grito Noah. Furioso, se lanzo hacia la demonio mientras imbuía todo su poder en la hoja de la espada.—¡¡Pagaras por esto!!