Subaru quien se abalanzó hacia Felt al nivel de su cintura, y mientras abrazaba su cuerpo cayó a través del suelo. Antes de golpear el suelo, sintió algo metálico raspar su nuca, lo que le puso los pelos de punta. Pero, sintiendo el peso de la persona en sus brazos, hizo lo mejor para tratar de ignorarlo y seguir rodando para poner tanta distancia como fuera posible de donde estaban antes.
Cuando Subaru miró atrás, estando de rodillas, Elsa lo miraba sorprendida. Sintiendo que había sacado una sobre Elsa, Subaru no pudo evitar sonreír, embarazosamente pero orgulloso.
— ¡¿Estás bien?! —le dijo a Felt—. ¡Estaba desesperado, así que accidentalmente toque un lugar que no debía, por favor perdóname, ¿estás bien?!
— ¡Si no hubieras dicho eso te hubiera agradecido normalmente! … Pero, ¿por qué?
— ¡No lo sé! Mi cuerpo se movió por sí mismo. Sé que tengo que dar una razón… bueno, no sabes sobre esto, pero ahora estamos a mano, ¿okay? ¡Recuerda eso! ¡Ahora estamos a mano! —dijo Subaru, apretando su puño después de soltar a Felt.
La segunda vez, Felt había salvado a Subaru de la espada de Elsa. Ese recuerdo no significaba nada en este mundo esta vez, pero con esto era capaz de pagar su deuda.
Subaru pensó que aun así, sus deudas debían pagarse, así que nada de lo que debía hacer antes había cambiado.
— Escucha, Felt. Ahora mismo voy a hacer el mismo tipo de cosas que Rom hizo antes de ser noqueado para ganar tiempo. Cuando eso pase me aseguraré de abrir una oportunidad para ti, así que quiero que uses esa oportunidad para escapar tan rápido como puedas. ¿Lo entiendes?
— ¡¿Qué?! ¡No! ¡¿Me estás diciendo que meta la cola y huya?!
Dijo Felt, mirando a Subaru con sus ojos rojos. Pero Subaru solo se acercó y la miró de vuelta. Cuando lo hizo, estaba seguro de no perder el momento cuando Felt parecía asustada de lo que Subaru trataba de decir.
— Sí. Eso es lo que te estoy diciendo. Mete la cola y huye. Para ser honesto, eso es exactamente lo que quiero hacer ahora mismo. No quiero quedarme otro segundo más en este espacio violento —dijo Subaru, dándole palmadas en la cabeza a Felt.
Cuando Felt empezó a decir "Pero…" Subaru la interrumpió y continuó.
— Tienes quince y yo diecisiete. De todos nosotros, probablemente eres la más joven aquí. Así que es correcto darte la mayor posibilidad de salir con vida de aquí. Es natural.
— N-no me digas eso… ¡Tú mismo estabas temblando hace un momento!
— ¡Eso fue entonces, esto es ahora! ¡No estoy temblando ahora, así que está bien! De verdad, antes de recordar y empezar a temblar tengo que hacer esto. ¿Okay? ¡Así que prepárate para huir!
Subaru puso su mano sobre la frente de Felt cuando parecía que iba a objetar de nuevo, y entonces se puso de pie. No muy lejos en el suelo estaba el garrote de Rom. Parecía pesado, pero Subaru pensó que sería capaz de balancearlo.
Mientras No-Satella continuaba disparando bombardeos de hielo hacia Elsa, no había señal de torpeza en sus movimientos mientras bailaba para evadir los disparos. En primer lugar, Subaru no estaba realmente seguro de que él, enfrentado a un súper humano como Elsa con nada de experiencia de batalla real por sí mismo, podía abrir una oportunidad para que Felt huyera. Todo lo que podía hacer era hacer un ataque sorpresa cuando ella no le estuviera prestando atención.
Así que justo después de que Elsa había balanceado su cuchillo y había roto una gran carámbano, y Subaru estaba completamente en uno de sus puntos ciegos, Subaru saltó hacia ella, olvidando incluso respirar, y balanceó el garrote hacia ella.
Tal vez la adrenalina de Subaru finalmente había arrancado, porque la velocidad de su balanceo era mucho más rápido de lo que había imaginado que seria. Cortó a través del aire hacia su nuca, y…
— Escogiste el momento y ángulo preciso para apuntarme, pero desafortunadamente podría haber sentido tu intención asesina desde una milla de distancia.
— ¡¿Intensión asesina?! ¡No tengo idea de cómo se supone que tengo que esconder eso!
Para bloquear el golpe que venía directamente desde detrás de ella, Elsa golpeó el garrote con el borde desafilado de su espada, cambiando el curso del golpe lo suficiente para que no golpeara. Sin embargo, en ese instante Subaru abrió su boca ampliamente, revelando sus dientes, y gritó.
— ¡Ahora, Felt! ¡Corre!
— ¡¡…!!
Como un resorte Felt lanzó su pequeño cuerpo al viento y corrió. Iba tan rápido que Subaru no podía seguirla con sus ojos y la chica, ahora vuelta viento, se apresuró a la salida.
— ¿De verdad crees que te dejaré ir?
Para detener a Felt, Elsa sacó otro cuchillo de su bolsillo y lo arrojó hacia Felt. Como si fuera el símbolo de venganza por lo que Felt hizo antes, el cuchillo simple sin decoraciones fue arrojado directo hacia su espalda. Sin embargo…
— ¡Qué pena, pero quiero dejarla ir!
Subaru pateo la mesa redonda que estaba a su lado hacia arriba, la cual colisionó con el cuchillo y lo desvió.
— ¡Vaya, soy asombroso! ¡Eso fue asombroso! ¡Wow, mi dedo duele más de lo que pensé!… ¡¿Uwah?!
Tal vez era la adrenalina de Subaru de nuevo, o algún poder que había despertado en él que había fallado en activarse las tres veces anteriores, pero mientras la larga pierna de Elsa llegó y lo golpeó en el lado de la cabeza y lo envió volando, su auto-felicitación se cortó.
Fue golpeado tan fuerte que parecía girar, y junto al comienzo de dolor y sabor a sangre en su boca, Subaru vomitó.
— Esa es la primera vez en mucho tiempo que alguien me hace en realidad un poco enojada.
— ¡Bueno, eso es algo que estoy feliz de escuchar! ¡Ha-ha! ¡Te lo mereces! ¡Dejé que uno de nosotros escapara!
Subaru se paró y pretendió estar en mejor forma de lo que estaba, haciendo lo mejor para seguir llamando la atención de Elsa.
Como si Elsa leyera la mente de Subaru, le sonrió, y olvidó a Felt por el momento.
— Bien, si eso es lo que quieres, te pondré atención. Tu baile tiene que ser mejor para no aburrirme.
— Me adelantaré y te advertiré, si vas a bailar conmigo, mejor sé cuidadosa. No he aprendido nada sobre bailar así que de seguro pisaré tus pies —dijo Subaru, escupiendo la sangre que tenía en la boca. Reajustó su agarre en el garrote que aún tenía en sus manos.
No era como si Subaru fuera a tener muchas oportunidades para golpear, así que usó todo lo que tenía para concentrarse en golpear a Elsa que se apresuraba hacia él.
— ¡Mejor no te olvides de mí! —dijo No-Satella, junto con un pedazo de hielo tirado desde atrás.
Pero incluso sin mirar hacia atrás, Elsa balanceó su espada y rompió el hielo en pedazos. Con los súper humanos sentidos de Elsa manifestados totalmente, incluso Subaru no era capaz de seguir burlándose de ella.
— He empezado a cansarme de este jueguito… ¿Están seguros que serán capaces de mantenerme entretenida? —preguntó Elsa en voz baja, con una sonrisa color sangre.
Al Subaru mirar esa sonrisa, sintió un escalofrió, y miró a No-Satella para hacer contacto visual.
— Si tienes algún tipo de verdadero poder escondido disponible, creo que ahora sería un buen momento para usarlo.
—…Tengo otro truco bajo la manga, pero si lo uso, seré la única que quede con vida.
— Me gustaría que te contuvieras, entonces. Nada de auto-destrucciones, por favor… Okay bien, lo tengo. Maldición. Úsalo si tienes que, pero no seas muy precipitada, ¿está bien?
Subaru tenía la intención de que eso fuera una broma, para ayudarlo a sacudir su cobardía, pero No-Satella tomó las palabras de Subaru seriamente. Después de verlo suspirar profundamente y solidificar su determinación, los labios de No-Satella se relajaron casi sonriendo.
— No lo usaré. No puedo mientras hacer lo que puedes. Puedes hacerlo, así que sigue luchando. Confiar en el poder de los padres de uno es mi opción final absoluta —replicó No-Satella.
Mientras decía eso realmente parecía como si se estuviera quedando sin opciones y eso encendió un fuego dentro de Subaru.
De cierta manera, No-Satella parecía como si estuviera lista para rendirse; al mismo tiempo que parecía aceptar el hecho de que Subaru era débil y no ayudaría mucho.
Para Subaru, No-Satella era alguien que, no importa que tan difíciles fueran las cosas, nunca miraría hacia abajo y se rendiría. Porque esa era la manera de ser de ella, Subaru había trabajado duro para verla sonreír.
Subaru había muerto varias veces y había llegado hasta aquí para salvarla. No había venido hasta aquí solo para verla rendirse.
— No vi nada justo ahora.
—… ¿Qué?
— ¡Esta conversación que acabamos de tener, no sucedió! Acabo de recordar la razón por la que estoy aquí. ¡Déjamelo a mí, maldición! ¡Voy a asegurarme de que nunca tengas que usar esa opción final tuya!
Subaru apuntó a No-Satella y luego a Elsa e hizo su declaración. Escupió mientras lo hacía, piso fuertemente el piso, y dejó bramar todas las emociones de su alma.
— Voy a enviarte lejos y tendremos un final feliz. ¡No perteneces aquí, así que lárgate!
—… Bueno, no te ves sobreexcitado —replicó Elsa.
— Solo estoy listo para darlo todo. Esta vez será el clímax. ¡Tengo más energía que antes!
Al Elsa inclinarse hacia adelante, Subaru balanceó el garrote como si declarara que iba a batear una carrera. Los labios de Elsa se retorcieron en una sonrisa y se deshizo dentro de la oscuridad.
Por la poca altura que parecía que se arrastraba por el suelo, Elsa se deslizó hacia Subaru. Mientras tenía sus ojos en el brillo opaco de su espada, Subaru balanceó el garrote con toda su fuerza.
El golpe de Subaru no se contuvo; estaba preparado para golpear a Elsa hasta la muerte. Pero Elsa esquivó incluso más lejos, como si no fuera nada y estaba tan bajo que parecía que lamia el suelo.
— ¡Tú mujer-araña!
— Bueno, supongo que es correcto que digas que estás enredado en mi red.
Cuando Subaru vio la espada de Elsa elevándose, rápidamente arrojó su cuerpo hacia atrás. Sin embargo, aún no pudo salir del rango de su espada. Miedo subió por la espina de Subaru, y sin pensar pateó con su rodilla. A pesar de no haber apuntado a su rodilla a ningún lugar, como Elsa estaba en frente de él, golpeó directo en su estómago. El camino de la espada cambio un poco, y entonces justo en el camino salió una luz blanco azulada, seguida de un sonido agudo.
— ¡Un escudo de hielo! ¡Buena cobertura!
— No soy buena haciendo esos a distancia. ¡Accidentalmente podría haber congelado a alguien!
— ¡¿Ella, cierto?! Te refieres a ella, ¿verdad? —replicó Subaru, con una mezcla de broma en sus gracias.
No-Satella siguió haciendo retroceder a Elsa con su bombardeo de hielo.
— He empezado a cansarme de tu pequeño insecto… Creo que es tiempo de terminar esto.
— Hey, no subestimes a los insectos, ¿okay? ¡No es mi culpa si te pican y te da urticaria!
— Bueno, ¿no suenas tan grande y poderoso cuando estas fuera de mi rango? —replicó Elsa mientras se concentraba en evadir los ataques de No-Satella, mientras Subaru continuaba tratando de llamar su atención.
Mientras Subaru hubiera amado tratar de apuntar a la espalda de Elsa mientras seguía evadiendo, no quería correr el riesgo de ser víctima de fuego amigo, así que no se podía mover. Eso era probablemente la razón por la que los ataques de No-Satella fueron callados cuando Subaru hizo su movimiento antes.
Era el tipo de problema que tenías que enfrentar cuando trabajabas en un equipo improvisado.
Subaru siguió mirando como Elsa desviaba los ataques de No-Satella, de vez en cuando haciendo un ataque por sí mismo, antes de retirarse de nuevo, pero poda sentir que la situación empeoraba.
Si Elsa realmente quería, era claro que podía encargarse de Subaru, como hizo con Rom. La única razón por la que parecía que estaban iguales era porque Elsa no podía desviar toda su atención hacia él. La precaución de Elsa en su lugar estaba dirigida hacia la posibilidad de que el espíritu Puck apareciera de nuevo. Eso era suficiente para mantener la situación sostenida.
Otra razón por la que Elsa no actuaba era porque la cobardía de Subaru lo mantenía un paso atrás. Estaba cuidándose de no ponerse en rango de peligro letal. Si Subaru fuera un idiota valiente, lo hubiera cortado y el balance hubiera cambiado. Sin embargo, no parecía como que la cobardía de Subaru le serviría mucho más.
Mientras los contraataques de Elsa se hacían más severos, las retiradas de Subaru no estaban haciéndose a tiempo y estaba teniendo pequeños cortes sobre todo su cuerpo.
Subaru tenía cortes en la parte superior de sus brazos, en sus pantorrillas, en sus axilas e incluso unos pequeños cortes en su cuello y mientras esas heridas incrementaban, el traje gris de correr de Subaru empezó a teñirse con sangre.
— ¡Maldición, duele! ¡Argh! ¡¿Qué hay de esto?!
A pesar de que el dolor era suficiente para hacerlo llorar, Subaru balanceó una patada, tratando de hacer algo nuevo para atrapar a Elsa fuera de guardia.
Sin embargo…
— Solo tomaré eso —dijo Elsa.
—… Maldición.
Elsa fácilmente esquivó la patada de Subaru y sobre todo, fácilmente agarró su pierna. Elsa alzó su kukri, apuntando a cortar toda la pierna. Con la fuerza del balanceo de Elsa, su velocidad y el filo de la espada, Subaru sabía lo que sucedería a continuación. Su pierna seria cortada por el muslo y moriría por el shock mientras la pérdida de sangre y dolor lo abrumaban. Subaru solo podía ver las palabras BAD END 4, elevándose ante sus ojos.
«¡No debería haber hecho eso!»
Los pensamientos de Subaru gritaban.
Trató de alzar el garrote para bloquear, pero con la desventaja que enfrentaba, con la otra pierna en alto, no lo haría a tiempo.
No-Satella gritó. El corte sin piedad llegaría a su pierna en momentos. Mientras Subaru pensó que el dolor y el derramamiento de sangre traerían un grito a su garganta, la sangre que vomitaría cuando…
— Eso es suficiente.
Una llama apareció, quemando a través del techo desde el centro de la bodega de botines.
La llama estaba llena con una terrible malicia que atravesaba la habitación y detuvo a Elsa en sus pasos.
La pierna de Subaru fue liberada, saltó hacia atrás antes de caerse. Justo ante sus ojos, en medio de un pilar de humo, vio una roja, ardiente, brillante figura.
— Eso estuvo cerca. Me alegra haberlo hecho a tiempo. Ahora…
— T-tú eres…
Las llamas ondearon y avanzaron. Su sola existencia fue suficiente para hacer que Subaru, No-Satella, y Elsa se congelaran.
Tomando las miradas de todos los presentes, sin ser sacudido ni un poco, estaba un absoluto sentido de voluntad. Con ojos azul cielo brillando con un puro sentido de la justicia, el joven hombre sonrió débilmente.
— ¡Creo que es tiempo de bajar la cortina de esta actuación!
Declaró el héroe, peinando hacia atrás su cabello rojo.