El número de leyes crudas que comió Noah en el viaje a través del vacío fue inmenso.
Las Matriarcas del Imperio de Shandal y el Consejo no podían creer que todavía no hubiera avanzado tras absorber tanto significado verdadero llevando su individualidad.
El dantian de Noah se mantuvo en el pico del quinto rango. Los poderosos en la etapa líquida sentirían los efectos de tantos nutrientes, pero su centro de poder permanecía inafectado.
Esa peculiaridad no pudo escapar de los atentos ojos de las Matriarcas. Ambas eran experimentadas en el viaje de cultivo, pero nunca habían visto ni oído hablar de un caso tan peculiar.
Además, Noah no mostraba signos de adicción. Comía mucho más que la Mano Izquierda de Dios, pero nunca tomaba descansos. En cambio, la Matriarca tenía que evitar absorber leyes crudas si había tomado algunas en el mes anterior.