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Después de que Lin Yuan anunciara el papel de Ciudad del Cielo, sacó un sobre blanco y lo colgó en la rueda giratoria. Luego se dio cuenta de que el hombre de mediana edad con el chivo estaba caminando hacia él con temblores.
El hombre de mediana edad con chivo se inclinó y dijo tartamudeando: "S… S… Señor! Siempre he tenido malas maneras con las palabras. Ni siquiera me gusta cómo hablo. No quise ofenderlo".
El Viejo Feng quería abofetearse a sí mismo. Ya era suficientemente malo que fuera un entrometido, pero además había sido ignorante ante la verdadera notabilidad. Una persona tan notable incluso había oído sus difamaciones.
Para echar leña al fuego, incluso había identificado su origen.
