—Actualmente hay cosas más importantes esperando que las hagas —insinuó Mason.
Lila también sabía que si no aprovechaba esta oportunidad para terminar con el Presidente Fan, él continuaría causando problemas.
Así que, después de despedirse de Jonathan, salió de la sala de luto con el resto de Superstar Media. Como había dicho antes, solo le estaba dando al culpable una hora.
En cuanto los reporteros la vieron salir, se apresuraron inmediatamente a entrevistarla. Los fans que previamente le lanzaron huevos, casi todos se habían ido y a los pocos que quedaban se les obligó a cooperar con la policía.
—Señorita Tang, me temo que también tendrá que ir a la comisaría para dejar un reporte —dijeron los oficiales de policía mientras se acercaban a Lila.
Lila miró a los oficiales y asintió con la cabeza —Haré todo lo posible por cooperar, pero antes de ir a la estación, hay algo que me gustaría aclarar. ¿Pueden darme diez minutos?