~~
Trinidad
~~
Al siguiente día me sentí un poco mejor. Quizás fue saber cuál era la causa lo que me hizo sentir un poco mejor. Y, para colmo, desde que Reece me hizo consciente de la pequeña vida que crecía dentro de mí, pude sentir una especie de calor emanando desde adentro. Una especie de luz dentro de mí que sabía que era el bebé.
No pude evitarlo, estaba emocionada. Tenía que compartir la noticia. Sabía justo a quién decírselo primero. No quería decírselo directamente, quería que fuera una sorpresa cuando se entere.
—¡Hola! —La voz de Junípero estaba llena de diversión y emoción como siempre cuando la llamé.
—Hola Junípero, ¿qué haces hoy? ¿Algún plan?
—Ninguno en absoluto. ¿Por qué? ¿Qué tienes en mente?
—Quiero ir a buscar un regalo de cumpleaños para Lila. Me preguntaba si podrías ir conmigo.
—Por supuesto, siempre estoy dispuesta para ir de compras.
—Genial, vamos a almorzar primero y luego a comprar.