Antes de que Ves se tomara un largo descanso, se aseguró de mover el Antiguo Sarcófago de vuelta a la cámara acorazada.
No se atrevió a permitir que ninguna persona se acercara al peligroso objeto. Aunque Ves no estaba seguro de si podría afectar o amenazar a alguien más, no quería correr ningún riesgo.
Se acercó a un terminal cercano y comenzó a tomar control de varios robots levantadores.
Afortunadamente, la entidad espiritual alienígena que residía dentro del Artículo #1255 no había interferido con los bots. En lugar de moverlo de vuelta a la cámara acorazada, lo colocó cerca de la popa del Barracuda.
La cámara acorazada estaba situada en el centro de la corbeta, lo que le permitía ejercer su influencia para cubrir la mayor parte del interior del barco. Al colocarlo en el borde mismo de la bodega de carga, justo contra la escotilla de la bodega, el Antiguo Sarcófago tendría que superar mucha más distancia para afectar al resto de la nave.
