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Ves y la Comandante Dise pasaron más de una hora en la sala de conferencias de la Espada Jadeada. Entre trofeos, banderas, estandartes y otros impresionantes artefactos, los dos regatearon dos acuerdos concurrentes a la vez.
Una confluencia de intereses aceleró las negociaciones. Los Vandálicos y Espadachines tanto sufrieron daños importantes en la misión hasta ahora y no darían la espalda a ayuda adicional.
La clave era hacer un acuerdo creíble que ofreciera suficientes incentivos para que ambas partes se adhirieran al trato. Aunque Ves negociaba principalmente en nombre de los Vandálicos, también intentaba asegurarse de que las Doncellas de la Espada no tuvieran motivos para retractarse del acuerdo una vez que lo consideraran.