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Además del mecha personal de la Comandante Lydia, las Doncellas de la Espada perdieron todas sus Valencias Plateadas. Sus ataques suicidas combinados sometieron al Belisarius a una enorme cantidad de daño, ¡sin embargo el mecha experto no había sufrido ningún daño!
Por la fuerza de las explosiones que los sensores observaron, Ves estimó que debería haber tenido una oportunidad decente de incapacitar al Bailarín Pálido. Sin embargo, este enorme sacrificio fue en vano ya que el Belisarius solo perdió su carabina láser.
Esta vez, incluso las Doncellas de la Espada temblaron. —¡Este Belisarius era un mecha demasiado perverso! —exclamó uno de sus miembros con miedo.
—¡Este mecha no puede ser detenido! —gritó otro, desesperado.
