"Para asegurarse de que la LMC no sería afectada por un liderazgo sin dirección, Ves hizo lo posible para poder nombrar a un agente que tomara decisiones en su nombre en el consejo.
El único problema era que necesitaba nombrar a alguien en quien pudiera confiar con una increíble cantidad de poder. Después de todo, la LMC era un fabricante de mechas en crecimiento con billones de créditos en brillantes perspectivas. Solo se necesitaría un loco sediento de poder para derribar todo lo que había construido en los últimos dos años.
Mientras Ves intentaba estrujar su cerebro en busca de posibles candidatos, empezó a tener un dolor de cabeza. —Carlos hubiera sido un agente perfecto para mí.
Él conocía a su amigo por dentro y por fuera y sabía que no disfrutaba del respaldo de nadie más. Como alguien que se benefició enormemente con Ves, Carlos ciertamente podría ser de confianza para valorar sus intereses por encima de los de los demás Larkinsons.
