Los nuevos empleados y adiciones al personal redujeron la carga de trabajo de Ves.
El cambio más crítico ocurrió cuando los diseñadores de mechs Tovar finalmente llegaron a Cortina Nublada.
Ves y Gloriana los recibieron de manera grandiosa, asegurándose de montar un espectáculo vistiéndose elegantemente y sacando tantas mechas de los Avatares y el Batallón de la Gloria como fuera posible.
La simple presencia de mechas de segunda clase de élite fue suficiente para suprimir cualquier arrogancia de los jóvenes diseñadores de mechs de la Familia Tovar.
—Miles Tovar, a su servicio —dijo el hombre que lideraba a los miembros de su familia—. Soy Aprendiz y exalumno del DCTI.
—Bienvenido a la LMC —Ves sonrió y le estrechó la mano.
—Nos aseguraremos de tratarlo bien —prometió Gloriana con una sonrisa reservada.
Los otros Tovars también se presentaron. Todos ellos habían estudiado en buenas escuelas, aunque ninguno tuvo la suerte de asistir a una institución de segunda categoría.