—Haaa… haaa… haaa…
Yuan estaba acostado en el suelo suave, cubierto de sudor y jadeando de manera agotada.
Solo habían estado entrenando durante media hora, pero Yuan ya estaba al límite, sintiéndose más agotado que cuando luchó contra muchos expertos en la Ciudad del Dragón Antiguo.
Hacia el final de su práctica, Yuan fue golpeado tan seguido que Feng Yuxiang prácticamente estaba aterrizando cada vez sobre él, y aunque Yuan había mejorado su técnica de movimiento, aún no era suficiente para evitar a Feng Yuxiang, que siempre estaba un paso por delante de él.
—¿Ya terminaste, Joven Maestro? —Feng Yuxiang le preguntó con una expresión completamente tranquila y ni una sola gota de sudor en su cuerpo, pareciendo que acaba de darse un paseo por el parque.
—Feng Feng, eres más fuerte de lo que pensaba —Yuan le dijo.
—Gracias por el cumplido, Joven Maestro. Incluso con mi cultivación reprimida, mis técnicas siguen siendo muy precisas —dijo ella.
