El avance de las tropas de la facción Trascendente fue prácticamente imparable tanto en el norte como en el sur de China.
Al sur, las tropas lideradas por Shangguan Bing Xue, cuyo alias Reina Sangrienta era ahora básicamente conocido por todas las facciones de la zona, sean humanas o no, rompieron toda oposición con tal facilidad que aquellos que aún estaban en la lista comenzaron a dudar si debían rendirse o continuar ofreciendo resistencia.
No mostró piedad alguna con aquellos que decidieron ser enemigos de su facción Trascendente. Antes de atacar cualquier base, Shangguan Bing Xue se aseguraba de enviar un diplomático para informar al otro bando qué demandaba la facción Trascendente a cambio de no atacar establecimiento.
Las condiciones establecidas por Shangguan Bing Xue eran muy simples, sólo había 2.
1) Rendirse incondicionalmente.
2) Entrega total del poder tanto del ejército como del gobierno.