La flecha disparada por el Arco Destructor del Sol no era una flecha cualquiera; era un arma con alto daño de ataque físico, indestructible.
Más importante aún... ¡esa flecha fue disparada bajo la activación de la habilidad de objetivo único más poderosa que Bai Zemin había visto en toda su vida!
¡Bang! ¡Bang!
Dos explosiones sordas ocurrieron al mismo tiempo que el rugido de dolor de Akumi resonaba en el espacio exterior. La atmósfera tembló mientras grandes cantidades de sangre salpicaban, flotando en la nada y siendo arrastradas por la aparentemente imparable onda expansiva.
La flecha original y la copia golpearon la sección media del cuerpo de Akumi, dejando dos grandes agujeros del tamaño de una cabeza humana cuya profundidad era difícil de calcular.
A pesar de haber herido a su enemigo, sin embargo, Bai Zemin no solo no sonrió sino que en su lugar apareció un leve ceño fruncido en su rostro.
Este tipo de daño...