—Sorprendentemente, todo lo que tenía que hacer Bai Zemin era sostener la tableta cuadrada mientras pensaba en ambas habilidades.
—Sintió como si algo dentro de él fuera arrancado a la fuerza, lo que le hizo fruncir el ceño ligeramente por la incomodidad. Sin embargo, esa sensación desapareció tan pronto como apareció, como una ilusión.
—Fuego Pesar, Lilith y Shangguan Bing Xue observaron la escena frente a ellos con ojos llenos de sorpresa y asombro.
—En los dos agujeros negros ubicados uno al lado del otro en el centro de la tableta cuadrada, dos runas con patrones peculiares aparecieron después de que dos destellos de luz salieron del pecho de Bai Zemin.
—La runa de la izquierda tenía varios grabados extraños que, después de una segunda mirada cuidadosa, parecían formar la imagen de un puño pequeño que se superponía al fantasma de un puño más grande. El puño más grande daba la sensación de poder romper los confines del espacio-tiempo.
