(Regaleon's POV)
—¡Este olor! —Rápidamente me cubrí la nariz con la mano. —Pero ya era demasiado tarde. Había inhalado algo de humo.
—He estado esperando por ti, su alteza. —No era la voz de Alicia.
La mujer que estaba sentada frente a mí se dio la vuelta, era Verónica.
—¡Maldita sea! —Maldecí dentro de mí. —Bajé la guardia, pensando que era Alicia frente a mí.
Verónica se levantó de donde estaba sentada. Llevaba un vestido azul idéntico y una peluca similar al color del cabello de Alicia.
—¿Te gusta el olor de la fragancia, príncipe Regaleón? —Verónica abrió completamente el quemador de incienso. —El humo que salía de él se intensificó.
Ya no puedo bloquear el humo con mi mano. Poco a poco fui inhalando la fragancia del quemador de incienso.
Tos tos —El olor es fragante, pero era tan fuerte que lastimaba mi garganta y fosas nasales.
—¿Qué es esto? —Pregunté. —Mi cuerpo comenzaba a calentarse. Mi ritmo cardíaco se aceleraba.