Regaleon y yo estábamos en la habitación de los gemelos jugando con ellos. Le conté sobre mi sueño con el Todopoderoso y lo que dijo acerca de estas criaturas.
—Tenemos que lidiar con ellas lo más pronto posible, León —le dije—. Estas criaturas no son como las sirenas y los licántropos. El Todopoderoso dijo que estas criaturas no tienen conciencia, que son un peligro para las personas.
—Ya veo a qué te refieres, Lili —Regaleon respondió—. Estas criaturas tienen gusto por la carne, y no solo por la carne. También anhelan carne humana.
Se decía que los wyverns aquí en Tarmac depredaban tanto el ganado como los humanos. Parecen ser como cualquier animal carnívoro, pero cazar humanos representa una amenaza mucho mayor para las personas que viven cerca de su guarida. Pero los wargs que encontramos eran diferentes. Estaban coordinados y parecían seguir órdenes de alguien.