NO ABRAS. PARA QUE NO TENGAS QUE PAGAR. ESTE ES UN CAPÍTULO DUPLICADO.
Después de almorzar, las parejas dejaron que sus hijos jugaran en los jardines del palacio, ya que el interior del palacio aún estaba muy ocupado con los preparativos del banquete de esta noche.
—Sé buenos con tus primos y tus pequeños tíos y tías, está bien —Alicia dijo a Alfonso y Aerith—. Sé lo rudos que pueden ser ustedes dos, pero como son más pequeños que ustedes, jueguen bien.
—Sí, madre —Alfonso, Leonhart y Aerith respondieron al unísono.
—No se preocupen, su majestad, sabemos que hacer —Aliyah respondió con una gran sonrisa.
—Es correcto —Deimos respondió—. Hemos estado jugando con ellos durante mucho tiempo.