Ya en nuestra casa.
Acabábamos de cenar y estábamos lavando los platos en los cuales comimos la comida que preparamos.
"Quiero conocer a Another", dijo Akio de repente, y yo me sorprendí mucho.
"Está bien, pero, ¿Realmente quieres hacerlo?", le pregunte a Akio vacilando.
"Si, después de todo, es otra parte de ti y me interesa mucho", dijo Akio muy seria.
"Entiendo, entonces, bésame para que pueda salir", le dije a Akio poniéndome roja, ella cerró lo ojos y la bese jugando con su lengua hasta que mi corazón estuviera en forma.
Me despegué de Akio y, no paso nada,
"Qué raro, no puedo hablar con ella, ni cambiar de lugar", dije en voz alta, "¿No puedes?", preguntó Akio, "Es más como si hubiera desaparecido", dije muy confundida.
"Lo siento, en este momento no puedo presentártela", le dije a Akio.
"Te la presentaré cuando vuelva inmediatamente", le dije a Akio y nos fuimos a dormir.
Durante la noche traté de comunicarme con Another, pero, por más que lo hice no pude.
Durante la noche en nuestra casa no se puede ver nada, esta todo oscuro y completamente tenebroso, y hace mucho frío.
Escuché un ruido y me levanté a ver que era, abrí la puerta y vi el vestíbulo principal, pero no había nada, seguía medio dormida, pero pude ver algo tirado en el suelo.
Me acerqué a ver que era y estaba en el suelo un vaso, lo levanté y lo puse de nuevo en la mesa, el lugar estaba muy oscuro.
Escuché algo que se venía acercando muy rápidamente, instintivamente me hice a un lado y un cuchillo golpeo la pared detrás de mí.
A unos metros frente a mí había alguien, pero, por la oscuridad no pude ver nada, se me acercó rápidamente con otro cuchillo en mano y me comenzó a atacar, esquivé varias veces el cuchillo y retrocedí desesperadamente.
Pateé a mi agresor y corrí hacia la puerta de el cuarto donde estaba Akio durmiendo, y ella salió de allí.
"Lo siento", le dije y le robé un beso rápidamente,
"¡Maldición!", dije en voz alta, cuando me di cuenta, el agresor ya estaba a unos centímetros de nosotras, use mi cuerpo para cubrir a Akio de el cuchillo que estaba apunto de golpearme.
Sentí como el cuchillo entraba en mi espalda y se abría paso fácilmente dentro de mí.
"Agg", me quejé y empujé a Akio hacia el cuarto, caí al suelo con el cuchillo enterrado en mi espalda.
El agresor me quitó el cuchillo, me agarró por el cabello y me saco del cuarto arrojándome hacia el vestíbulo.
Caí otra vez al suelo retorciéndome por el dolor que sentía, sólo pude ver como el agresor cerraba la habitación sonriendo con el cuchillo en mano.
"¡¡¡¡Detente!!!!", grite desesperada mente casi llorando y la puerta se cerró completamente.
"¡¡¡¡Akio!!!!", grité fuertemente, y me paré de la cama muy rápido, miré hacia todos lados muy desconcertada y me encontraba dentro de la habitación donde dormíamos, era de día ya.
Akio entró por la puerta asustada, "¡¿Qué sucede Emi?!", pregunto muy asustada.
Me pare de la cama y corrí a abrazarla fuertemente, "Akio, estas bien", dije llorando, "Creí que te había perdido", agregué mientras abrazaba a Akio lo más fuerte que pude.
"Descuida Emi, me encuentro bien, sólo tuviste una pesadilla, tranquila", me dijo Akio abrazándome y me acarició la cabeza.
Después de tranquilizarme, nos pusimos a desayunar, Akio preparó los alimentos, estaban muy ricos.
"Bien y hoy, ¿qué misión elegiremos para hacer en el gremio?", preguntó Akio mientras recogía la mesa.
Me quede en silencio unos instantes, "Será mejor que no vayamos al gremio por un tiempo", le conteste mirando al suelo.
"¿Por qué?", pregunto Akio, "Porque, no tengo a Another en este momento y sin ella, yo soy muy débil y no podré protegerte si pasa algo malo Akio", le contesté enojada conmigo misma, estaba muy frustrada, estaba enojada conmigo misma, me sentía débil e inútil, me sentía asustada, ansiosa y preocupada por que tal vez, si pasara algo como de las veces pasadas, Akio estaría en problemas por mi incompetencia.
Akio me miro un momento y sonrió, "Emi, eres fuerte, aún sin Another contigo, te enfrentaste a los maleantes que querían atacarnos cuando queríamos volver a casa, lo sé, porque no estaba del todo durmiendo, sólo estaba muy impactada por perder a mi madre", dijo Akio sonriendo.
"También fuiste tú la que derrotó a todos esos monstruos antes del Demonio Ocular, y fuiste tú la que se enfrentó al Demonio Ocular y corto sus tentáculos limpiamente, también fuiste tú la que salvó a Chi la primera vez que se encontraron, ella me lo contó", agregó Akio, "Así que, como yo lo veo, tu no eres débil, tu eres muy fuerte, además, te dije que yo se utilizar las armas que había en mi habitación, tengo entrenamiento y se defenderme, así que estaré bien", al terminar Akio me abrazó.
"Así que vamos, levántate", Akio tomo mi mano y la jaló.
"Esta bien, vamos", dije ya sintiéndome mejor.