—Manohar debe haber tenido un mal día si alguien patético e insignificante como tú logró matarlo. Era un mago y luchador genial, igual que tu hermano. Son el tipo de personas a las que confiaría mis ejércitos.
—Un idiota como tú, en cambio, ni siquiera es capaz de limpiar una letrina sin ensuciarse. —Thrud realmente consideraba a Lith y Manohar como dos enormes espinas en su costado.
Aun así, sabía que al desacreditar el mayor logro de Orpal y compararlo con su odiado hermano, él se perdería en la envidia y haría algo estúpido.
—Manohar estaba en perfecta forma y destruí la vida de Leech igual que estoy a punto de hacer contigo! —Esas palabras golpearon al Rey Muerto más fuerte que cualquier bofetada y lo volvieron loco.
Su orgullo no podía permitir tal desafío.