—¡Vale! ¡Hasta luego, mamá!
Chloe saludó a su hija hasta que entró por la puerta y se unió al resto de sus amigos. Su sonrisa se desvaneció por completo y cerró la puerta del coche.
Ya era difícil para ella hablar sobre el tema de su separación de Mackie, pero a medida que pasaba el tiempo, sabía que no podía ocultar esto por mucho tiempo.
—Tal vez no lo manejo correctamente… —dijo Chloe—. Debería haber sido más firme y haberle contado poco a poco sobre la separación entre Vicente y yo.
—Pero simplemente no tengo el corazón para verla llorar porque estaría separada de su papá. Y no hay manera de que la deje quedarse con Vicente.
En medio de su incertidumbre, trató de calmarse. Se convenció a sí misma: —Chloe, no puedes dejar que él vea a Mackie, al menos no hasta que Vicente haya firmado el papel del divorcio y el divorcio haya sido finalizado.
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Verno estaba de camino a su oficina cuando tuvo una idea. Llamó a su hermano mayor, y se conectaron después de algunos pitidos;
