Harvey mantuvo las caderas de Amelia en su lugar antes de comenzar a empujar desde abajo, clavando su enorme varilla aún más profunda en su coño. Amelia gritó ante su repentino movimiento. Podía sentir que su poder penetraba profundamente en ella. Él se estaba moviendo a una velocidad tan rápida que ella se sorprendió tanto por su resistencia como por el placer que le hacía sentir. A ella le encantaba hacerle el amor a Harvey. Él era tan diferente de todos los hombres que ha tenido antes.
"Voy a... semen... Harvey ..." Amelia gimió.
"Adelante... te haré correrte toda la noche..." Harvey le susurró tiernamente al oído.
No pasó mucho tiempo después de que Amelia llegó a su clímax. Ella lo abrazó mientras gritaba su nombre mientras su cuerpo temblaba en sus brazos. Harvey sabía que Amelia podría llegar al clímax varias veces y continuó golpeando su gruesa polla en su agujero antes de acostarla lentamente sobre su espalda en la cama.