Al salir en la dirección contraria dónde todos corrían en el horizonte las grandes e imponentes montañas tenían grandes nubes de polvo.
Lyon - Sara envía un mensaje al palacio, nosotros solo nos encargaremos de que esta ciudad no sea destruida... Y ¿Podrías llamar a Paris?.-
Sara - Lo primero está en camino y lo segundo lo veo innecesario.- Ella solo volteó en una dirección con una mirada juguetona.
Cuando ví en la misma dirección, la chica de piel bronceada que estaba acostumbrado a ver apareció de entre la multitud con una joven chica intentando seguirle el paso.
Su mirada estoica y su paso firme no mostraban ninguna expresión... Pero por algún motivo tenía la imperiosa necesidad de salir corriendo en dirección a la nube de polvo, sentía menos peligro de esa dirección.
Lyon - H-Hola Paris... ¿C-co-?...-
Cuando le dije esas palabras ella solo suspiró y volteó en otra dirección... Vi a la chica a su lado y ella solo se encogió de hombros.
Sabía que cualquier palabra luego de esto solo causaría daños innecesarios así que me guardé mi angustia para más tarde.
Lyon - Sara diles a todos que son libres de hacer lo que quieran en tanto no afecte a la ciudad y no pase ninguno.-
Sara asintió y se fue.
Yo salí caminando en dirección a la nube de polvo y junto a mi habían algunas personas con caras alegres... ¿Será que son adictos a la lucha?...
Con mi armadura y la espada luz listas me puse en guardia.
Con cada segundo que pasaba parecía que la velocidad de la estampida aumentaba.
Hasta ahora no lo había notado pero hay dos energías que no son de las bestias oso.
Cada energía es única pero cada especie tiene su propia forma de energía, por eso no es similar la energía de un gato a la de un humano o un perro.
La energía que estaba detrás de la estampida era muy superior a la de los otros seres en la estampida, la otra era como la energía de un niño que nunca ha entrenado.
Cuando entraron en mi rango le pedí a Samael que me diera el conteo de cuántos eran y me dijo que eran 11849... Cada persona debería poder eliminar cincuenta cada uno, más lo que de mayor poder eliminen.
Sara que acababa de regresar tomó su arco y tensó la cuerda con total seguridad, cuando el arco se tensó totalmente una flecha hecha de un metal brillante apareció en el arco.
Rafael por su parte preparó un hechizo... Entiendo que sea bueno con magia y las espadas... Pero ¿Realmente hay necesidad de que constante haga alarde de lo talentoso que es?.... No hay necesidad de andar mostrando que puede usar magia perfectamente y de que es un gran espadachín... Además creo que es más conocido por sus espadas.
Paris por su parte al no tener armadura ni un arma a la mano tomó una posición que parecía de boxeo.
Cada vez más y más cerca, cuando entraron en el rango de Rafael y Sara fueron bombardeados con flechas y bolas de fuego.
Los que escaparon de sus ataques fueron recibidos con espadas, puños, más flechas y más hechizos.
Cuando uno de ellos se acercó lo suficiente a Paris ella lo golpeó en la frente... No, se detuvo justo cuando tocó su piel.
En golpe rompió el cráneo del oso y lo clavó en el piso.
Yo por mi parte eliminé a todos los de mi alrededor con mover un poco mi espada.
De entre los osos había uno que tenía líneas de colores por todo el cuerpo... Supongo que ese es más fuerte.
Cuando me decidí llamé la atención del oso y lo guíe a donde estaba Paris... El oso sufrió el mismo destino que todos los que se cruzaron con Paris.
Después de algunos minutos las dos energías diferentes estaban a menos de cincuenta metros de mí.