"Lo siento, pero esta es una decisión definitiva, no hay forma de que cambie de opinión" - respondió Ren mientras se cruzaba de brazos - "De hecho, si no fuera porque es extremadamente necesario, ni siquiera iniciaría esta operación porque es muy peligrosa"
"Ren, sé que quieres a tus subordinados, pero tienes que comprender que si quieres finalizar con éxito tu plan vas a tener que hacer sacrificios" - dijo Eric mientras negaba con la cabeza - "Esto no es problema de moral, sino de realidad"
Ren se quedó en silencio mientras fruncía el ceño - "Ok, eso lo entiendo, pero remarco mi punto, no voy a dejar que vayas a esta misión, Erika, no me importa si piensan que estoy mostrando favoritismo, pero es imposible que ponga en peligro a la mujer que amo"
Erika se sonrojó antes de agachar la cabeza porque las palabras del príncipe resonaron en su corazón, aunque la situación no terminó allí, porque todos podían ver cómo la espalda de los dos enamorados estaba empezando a brillar.
"¡Aquí está!" - exclamaron Elisabeth y Rea en sus pensamientos con emoción - "¡El despertar!"
Eric frunció ligeramente el ceño antes de caminar donde su amigo y quitarle la parte superior de su ropa, mostrando su bien entrenado físico.
Erika se sonrojó, aunque su expresión cambió a una de incredulidad cuando vio el tatuaje de dragón en la espalda de su amado, lo que hizo que su corazón latiera tan fuerte que hizo que sintiera un dolor en su pecho - "Ugh..."
"¿Estás bien, Erika?" - preguntó Rea mientras fingía preocupación, no porque no le importara su antigua esclava, sino porque ella estaba consciente de la situación en su totalidad, incluso la notificación que había aparecido, reafirmaba lo que pensaba.
[Heroína [Erika Belldandy], y héroe, [Ren D. Bahamut], han sincronizado sus despertares]
[Personaje, [Erika Belldandy] ha conseguido la habilidad [Bendición de Belldandy]... Personaje, [Ren D. Bahamut], ha conseguido la habilidad [Despertar Heroico]...]
Rea sonrió ligeramente mientras le daba una mirada rápida a Elisabeth, quien asintió ante la señal.
Las dos chicas sabían de las dos habilidades despertadas por los héroes.
En el caso de Erika, [Bendición de Belldandy], era una habilidad que era una activa y una pasiva. La primera consistía en una curación que podía usarse cada 30 minutos, y podía curar hasta un corte profundo, en cuanto a su pasiva, era un aumento de poder ofensivo, siempre y cuando Ren estuviera cerca.
Por otro lado, la habilidad de Ren, [Despertar Heroico], era una habilidad pasiva que aumentaba su daño y resistencia al dolor mientras más daño recibía, también aumentaba la moral de las tropas al máximo si Erika estaba cerca.
Dejando sus poderes de lado, el primer despertar de Erika y Ren eran buenas noticias porque aumentaban drásticamente las probabilidades de éxito de la misión.
Ren estaba sorprendido, más cuando sintió cómo la conexión con Erika parecía profundizarse nuevamente, aunque esto le causó una enorme confusión.
"Esa marca..." - murmuró Ren mientras sentía cómo un archivo aparecía en su mente - "¿Belldandy?"
Eric miró a su mejor amigo, confundido con estas palabras porque no tenía sentido que él dijera el nombre de la diosa de la luz, protección y maternidad.
"¿?" - Erika le dio una mirada confundida, aunque por algún motivo, ella sentía que este nombre era extrañamente familiar.
"¿Lo sabían?" -preguntó Ren mientras miraba a Elisabeth y Rea, quienes no parecían sorprendidas ante esta revelación - "¿Sabían que Erika era parte del clan Belldandy y yo era un Dragonhart?"
"¡¿Dragonhart?!" - exclamó Eric con sorpresa, después de todo, ese apellido tenía un enorme peso en el continente.
"¿Belldandy? ¿Dragonhart?" - repitió Erika mientras intentaba recordar una historia que su madre le había contado en el pasado - "¿Te refieres a Draco Dragonhart, el antiguo héroe, y la sacerdotisa Bea Belldandy?"
La historia del grupo de héroes que se había unido para detener al dios demonio era conocida por todos los habitantes del continente, aunque lejos de tomarla como algo real, la gente pensaba que era una simple historia de fantasía, aunque los diferentes reinos del continente sabían que esta historia era completamente verídica, después de todo, los reyes y emperadores eran descendientes de la gente que siguió a Dragonhart y Belldandy en su batalla contra el dios caído.
"No importa cuanto lo piense, es estúpido pensar que ustedes sabían sobre nuestras identidades cuando ni siquiera nosotros lo sabíamos" - dijo Ren con el ceño fruncido - "Pero... todavía existe una posibilidad, aunque antes de esto, me gustaría que fueran honestas conmigo y me digan lo que saben"
Elisabeth y Rea se miraron entre ellas, sorprendidas de la actitud de Ren. Las dos chicas se quedaron en silencio mientras parecían estar discutiendo con la mirada, solo para soltar un suspiro y asentir.
"Su majestad, yo lo sabía porque puedo ver el futuro" - respondió Rea mientras mentía con toda facilidad, después de todo, ella sabía que si decía la verdad, podría ocurrir uno de dos escenarios. El primero era que Ren la considerara una loca, y la arrojara fuera del grupo, lo que significaría básicamente su muerte, o segundo, Ren le creía y entonces toda la trama se iría a la mierda porque no había forma de que alguien no intentara cambiar la situación cuando tenía información sobre lo que iba a suceder, así como los responsables de estos cambios.
Ren frunció ligeramente el ceño porque podía sentir cómo esta chica le estaba mintiendo, aunque al mismo tiempo podía sentir que ella no era hostil contra él, así que lo dejó pasar por ahora. Tal vez en el futuro ella decidiría decirle la verdad, así que concentró su atención en su vieja amiga, oh, y a ella sí que no la dejaría escapar, después de todo, muchas de sus acciones durante los últimos años eran jodidamente extrañas.
Elisabeth empezó a sudar cuando notó la expresión de Ren, así que rápidamente agachó la cabeza.
"No intentes decirme que también puedes ver el futuro, esa mentira no la aceptaré dos veces" - dijo Ren con neutralidad, y en el proceso, haciendo que Rea agachara la cabeza por vergüenza, después de todo, las palabras del príncipe demostraba que sabía que ella estaba mintiendo.
"Yo... esta es mi segunda vida" - respondió Elisabeth mientras soltaba un suspiro.
Ren frunció el ceño porque sintió que ella estaba diciendo la verdad - "Continúa..."
"Regresé del futuro, y vi lo que mis acciones causaron, no solo a mi, sino a todos los que me rodeaban" - continuó Elisabeth mientras se mordía el labio.
Ren se quedó en silencio porque podía sentir la contradicción en las palabras de su amiga. Sus palabras eran ciertas, aunque él logró detectar que había mentiras en esa oración, pero no sabía cuáles eran ciertas, y cuáles eran falsas.
"¿Volver al pasado?" - repitió Eric con el ceño fruncido.
Elisabeth le dio una mirada dolida antes de explicar su historia de fondo, o mejor dicho, la historia de la Elisabeth del juego [Dragon Frontier], lo que causó que Eric frunciera aún más el ceño.
Ren se quedó nuevamente en silencio porque pudo sentir la veracidad de las palabras de su amiga, aunque al mismo tiempo sentía como si ella estuviera tratando de contar la historia de una persona, no una historia personal, lo que causaba otra contradicción.
Eric no sabía qué decir, él estaba confundido, dolido y enfurecido, aunque una mirada de su amigo hizo que se calmara. Tal parecía que Ren había detectado algo extraño en las palabras de Elisabeth, así que existía la posibilidad de que las acciones de su prometida no se repitieran en esta línea temporal.
"Solo tengo una pregunta que hacerte" - dijo Ren mientras miraba a Elisabeth directamente a los ojos - "Tu vida pasada... ¿Eras realmente Elisabeth?"
La chica de cabello castaño rizado empezó a sudar cuando escuchó esta pregunta. Era obvio que el príncipe había logrado encontrar la contradicción en su confusión.
Eric también miró a su prometida porque también sentía que esto era extraño. No importaba lo mucho que Elisabeth intentara cambiar, si su confesión fuera cierta, entonces ella todavía estaría mostrando pequeños atisbos de su pasado, después de todo, las malas costumbres eran las más difíciles de cambiar.
Rea también empezó a sudar porque en el momento en el que Elisabeth revelara que venía a otro mundo, existía la posibilidad de que Ren moviera su línea de pensamiento a que ella también era una reencarnada.
Elisabeth se quedó en silencio unos segundos antes de sentir cómo su garganta se apretaba, como si esta no quisiera liberar ninguna sola palabra.
Ren se mantuvo de brazos cruzados mientras esperaba con calma cómo su amiga terminaba con su confesión, aunque hasta ahora él había descubierto algunas cosas interesantes, sin embargo, no tenía pensado en decirlas en voz alta.
"Y-Yo... yo era unas de las sirvientas de Elisabeth-sama" - respondió Elisabeth mientras continuaba sudando - "Vi cómo todo se desarrollaba y no pude soportarlo más, así que revelé esta información a Eric-sama porque no podía seguir viendo cómo alguien tan amable sufría en las manos de una mujer tan vulgar"
"Falso, al menos no todo" - pensó Ren mientras entrecerraba los ojos - "La identidad original de Elisabeth no era una sirvienta, pero que revelara la verdad sobre la prometida de Eric es cierto, lo que hace que al menos los sentimientos que ella tiene por mi amigo sean verdaderos"
Ren asintió lentamente, lo que hizo que Eric, Elisabeth y Rea, soltaran un suspiro de alivio.