CAPÍTULO 12- Daniela.
(Pov- Daniel.)
Ah... Vaya, vaya... Maldita sea.
Bien, Daniel, piensa bien la situación.
Me casaré para mostrarle a los humanos y semihumanos que es posible vivir de nuevo en paz, juntos otra vez. Yo soy el único... Bueno, hay otros dos, pero por ahora, soy el único en este continente con todos los tipos de magia, la supuesta reencarnación del Dios de los semihumanos, y el héroe de los humanos que ha derrotado a demonios de un solo ataque.
Si alguien como yo se casa con las princesas semihumanas, además de crear leyes anti discriminación, es muy posible lograr esa paz en poco tiempo.
Mientras los castigos anti discriminación se apliquen a cualquiera, sin importar la edad o estatus social, los humanos y semihumanos estarán obligados a estar juntos y no hacerse daño.
Al principio odiarán estar juntos, pero con el paso del tiempo ese odio se convertirá en nada, y esa nada se convertirá en algo normal para ellos.
Esta generación se odiarán, pero las futuras generaciones, con una buena educación, convivirán juntos como si fuera lo más normal del mundo.
Yo daré el primer paso en eso, demostrando que es posible incluso que un humano esté casado con un semihumano.
Mi matrimonio no tendrá amor al principio, pero con tal de lograr la paz entre dos especies, estoy dispuesto a obligarme a mí mismo a amarlas. Después de todo, en el contrato del grupo está estrictamente prohibido que algún miembro del grupo salga con otros miembros del grupo, así que mis compañeras nunca me amarán, y si lo hacen, estarán obligadas a nunca pedirme salir con ellas. Nunca tendré una relación con ellas, mucho menos con Sonia, así que puedo casarme con las princesas sin miedo a arruinar mi amistad con las demás. Después de todo, simplemente somos amigos.
Me obligaré a mí mismo a amarlas. Será difícil considerando que sigo traumado con las relaciones románticas por culpa de Sonia, pero considerando las reacciones de las princesas y lo estrictos que son la realeza con respecto a la educación de sus hijos, ellas nunca me engañarán, debo confiar en ellas.
Daniel, intenta amar otra vez, por el bien de los demás, y no lo arruines esta vez.
Sonia me engañó porque no quise tener sexo con ella. No lo arruinaré esta vez.
Cuando me enamore de ellas de verdad, intentaré hacerlas felices, haciendo todo lo que ellas me pidan. No lo arruinaré de nuevo. No lo haré.
... Ah...
—Realmente no quería casarme.
Llegar tan lejos por los humanos y semihumanos, hasta estoy dispuesto a casarme con chicas que apenas conozco y son menores que yo... ¿Por qué soy tan buena persona? Daniel, sé egoísta por una vez en tu vida. ¡Tú odias los matrimonios políticos! ¡Odias los matrimonios sin amor! ¿Por qué no me atrevo a negarme?
—¿Por qué soy así?
Quiero negarme, pero al mismo tiempo, siento que debo aceptar.
¿Por qué soy tan raro?
Sé que soy una buena persona, pero esto es llegar demasiado.
—Ah... Sonia...
Aterricé en el suelo y me acosté, para descansar un minuto.
Me arde la cabeza... Mierda.
—Ver a Sonia me recuerda todo el dolor que sufrí por su engaño. Mi madre. La discriminación se los semihumanos hacia mí... Me casaré con dos chicas al mismo tiempo y sin sentir amor por ellas.
Le mentí al Rey, fingiendo ser la reencarnación de su Dios.
Les traeré la paz a los semihumanos con los humanos a base de mentiras.
—¡Ahhhhhhhh! ¡¡Maldita sea!!
... Dios, ¿en serio no puedes reemplazarme? No quiero estar aquí por más tiempo...
—Pero tampoco quiero irme.
Me quiero ir, pero otra parte de mí quiere quedarse... ¡¡¿Por qué soy así?!!
... Ah...
—Nací pobre, pero guapo. Perdí a mis padres, pero mi abuela me dio todo lo indispensable para sobrevivir. Me dio los mejores amigos que pude haber deseado, pero la mayoría de mis compañeros de clases (hombres) se burlaban de mí por ser pobre y hasta me golpeaban. Disfruté mucho de mi relación con Sonia, pero me engañó... Y también están los intentos de violación que sufrí, pero... Ah, en eso no hay una contraparte buena.
Esta vida me trata bien y mal siempre. Dios me da felicidad, pero también me da muchísimo dolor. ¿Estoy condenado a ser infeliz o feliz? No lo entiendo.
Y ahora que tengo a mi abuela a mi lado, resulta que mi madre es un demonio y está en este mundo.
¡¿Por qué me pasa esto a mí?! ¿Por qué yo?
—No quiero seguir sufriendo.
... Otra vez los pensamientos suicidas, a pesar de tener a mi abuela a mi lado otra vez.
—Madre... ¿por qué no me amas?
•
•
(Pov- Cris.)
Le acaricio la cabeza a mi hermana, intentando consolarla, para que deje de llorar.
Todas están discutiendo sobre la boda de Daniel con las princesas del país semihumano. Sus reacciones son bastante obvias para mí. "Oh, mi príncipe se casará con otra chica. Debo impedirlo". "¿Por qué él no me ama a mí, a pesar de que nos conocemos desde hace un par de días?" "Voy a decirle lo que siento por él cuando regrese".
No lo dicen, pero estoy bastante seguro de que lo están pensando.
Hasta mi hermana está llorando de frustración. Ah, si no fuera mi hermana, la golpearía por hipócrita. Ella engañó a Daniel, no tiene derecho a criticar sus decisiones, mucho menos interponerse en su vida.
Pero sí odio a las demás compañeras de Daniel, excepto esa pequeña chica hada, ella no parece estar interesado en Daniel de esa manera.
Daniel siempre ha querido amigos que sean sus amigos, pero las personas que se acercaban a él, solo lo hacían por dos razones. Los hombres fingían ser su amigo porque creían que de esa manera conseguirían novia, pues las mujeres siempre se acercaban a Daniel. Y las mujeres querían ser su amiga para intentar conquistarlo.
Y ahora sus compañeras sienten que les están robando a su hombre, porque ven a Daniel no como un amigo, sino como un futuro novio, y eso me llena de asco.
Sara, Alex, Rem y... Bueno, Rose es más interés en general que amor, creo que simplemente Daniel le llama la atención por ahora, pero las demás están enamoradas de él, a pesar de que él les dejó en claro varias veces que no está interesado en el romance ni quiere tener novia, hasta creó una regla en el grupo que prohíbe las relaciones entre los miembros, para evitar que ellas se enamoren de él, pero no les importó.
Daniel es guapo y una muy buena persona, no las culpo por enamorarse de él, pero hacerlo sabiendo por todo lo que sufrió por culpa de Sonia y dejarles en claro que él nunca se enamoraría de ellas, me llena de frustración.
Ellas están enojadas por una decisión de Daniel, decisión que no debería importarles ni afectarles porque Daniel no es su novio, pero se enojan como si Daniel las estuviera engañando.
Al menos Cristina, la amiga de Daniel, está juzgando a las demás con la mirada. Ella bailó con un noble ayer y hasta pasó horas hablando con ese noble. No creo que ella esté enamorada de Daniel, así que creo que ella, Liz y Rose son las únicas decentes del grupo. Sara podrá ser inteligente, Alex una prodigio con la magia de tierra, y Rem... Rem... Ella es la más inútil.
Pero ellas arruinarán su rol en el grupo si dejan que sus sentimientos por Daniel le afecten.
... Ah... Mejor me voy a dar una vuelta.
—Hermana, Daniel ya no es tu novio, y es más que obvio que alguien como él nunca regresaría con una chica que lo engañó, pero estoy más que seguro de que está dispuesto a ser tu amigo. No arruines esta oportunidad de volver a ser amigos, siendo una hipócrita. Lo arruinaste, ni modo, pero Daniel es solo un chico, hay millones de chicos en el mundo. Enamórate de otro chico y no lo arruines esta vez. ¿Entendiste?
—Lo sé, realmente lo intento, pero...
—Sin peros, hermana.
Dejé de acariciarle la cabeza y me levanté del suelo.
—Daniel tiene una nueva oportunidad de ser feliz, no lo arruines molestándolo. No seas egoísta y no pienses solo en ti. Piensa lo que te dije.
Salí de la casa y comencé a caminar, sin rumbo alguno en específico. Solo caminaré.
...
...
...
Me siento celoso, ¿eh?
Celoso de no ser Daniel, pero también estoy agradecido de no ser él.
Si tuviera la apariencia de Daniel, ¿tendría muchas novias? Posiblemente me hubiera aprovechado de eso, no fingiré ser un chico bueno como él para negarlo.
Las chicas se acercaban a mí solo para tener una excusa para hablar con él.
Un chico condenado a ser la sombra de Daniel, al menos mientras siga a su lado.
Ah, lo sé, todas las chicas que se acerquen a nosotros, será porque quieren estar con él. Ya estoy acostumbrado, así que no me importa demasiado.
Miré a las personas a mi alrededor... Algunas personas se me quedan viendo, pero no por interés por mí, sino porque soy un compañero de Daniel.
"¿Será poderoso?" Me imagino que se preguntan eso, y la respuesta es bastante sencilla: ¡¡No tengo magia ni habilidades especiales!!
Estoy condenado a ser una carga para Daniel. Vaya mierda, pero no hay nada que pueda hacer. Y tampoco soy tan idiota como para tener la esperanza de que, si aprendo a usar la espada, seré poderoso, porque estaría viviendo una mentira.
¡Los enemigos son demonios! No hay nada que un sin magia como yo pueda hacer, solo seré una carga.
¡La vida es tan injusta!
—Así que es mejor que la disfruta lo más que pueda.
¡Ya me cansé de ser virgen, me voy a un burdel!
Sé que eso no me ayudará a ser más poderoso, pero al menos haré algo que siempre he querido hacer: tener sexo.
Haré todo lo que he querido hacer antes de morir. Este mundo es muy peligroso, y más para mi hermana y yo, que no tenemos magia. Daniel puede revivirnos solo una vez, pero si morimos de nuevo, ya no regresaremos.
No quiero morir, pero no sabemos lo poderosos que serán los enemigos de Daniel. Más vale prevenir que lamentar, así que haré todo lo que siempre quise hacer antes de morir.
Tener sexo.
Besar a una chica.
Tener una cita.
Derrotar a un villano.
Tener un amigo que no me utilice para llegar a Daniel.
Tener novia.
Saltar en paracaídas.
Comer muchísimos platillos nuevos.
Conocer otros países.
Etcétera, etcétera, etcétera.
Pero hay una cosa que más deseo conseguir: Una novia que me ame a mí y solo a mí.
Ese es el objetivo más difícil, pues mientras esté con Daniel, todas las miradas se irán con él y nadie se fijará en mí.
Espero lograrlo, ¡la esperanza es lo último que muere!
—Veamos...
Saqué billetes de mi bolsillo.
Tengo 1,000 que me dio el Rey para mis gastos, y tengo entendido que una prostituta de calidad cobra 100. ¡Haré de mi primera vez, una noche inolvidable! ¡Voy a contratar a 5 chicas y lo demás lo gastaré en alcohol! ¡Vamos, Cris, a perder tu virginidad!
—Oye, oye.
—¿Eh?
¡Uwaaaah! M-mierda, Daniel tiene razón, la guardaespaldas del Rey es aterradora. Apareció de la nada detrás de mí y me abrazó con su brazo, como si fuéramos viejos amigos.
¿Me preguntará algo sobre Daniel?
—¿A dónde vas? Es raro ver que el siscon no esté con su hermanita.
—¿Siscon? ¡Sácate de aquí! Yo no tengo problemas mentales, loca.
—Uy, sí, claro. Te vi bailando con ella en la fiesta, muy juntitos.
—No lo sé, tal vez sea porque, bueno, ya sabes, ¡somos hermanos y nos queremos como hermanos! Mi hermana estaba triste porque Daniel se negó a bailar con ella e intenté hacerla sentir mejor.
—Fufu. ¿Hacerla sentir mejor? ¿Usaste tus dedos o la lengua?
—Estás enferma, ¿verdad?
—¡Hahahahahaha! Vaya, creí que serías como Daniel, pero eres bastante directo con tus palabras. Me agradas, cuatro ojos.
—Oh, ¿te agrado? Me siento tan honrado. Es todo un honor agradarte. Este es el día más feliz de mi vida.- Dije, obviamente siendo sarcástico.
—No te emociones tanto, me siento atraída por las mujeres. Perdón por romperte el corazón. Sé que soy hermosa y perfecta, pero debes superarme.
¿No entendió el sarcasmo? Nah, posiblemente solo se hace la tonta.
—Ya quisieras.
—¿No quieres superarme? ¿Tanto te gusto? Oh, me estoy sonrojando. Hasta creo que me mojé. Fufu.
—Eres rara, ¿lo sabías? Me agradas. ¿Quieres ir a un burdel? Iré a perder mi virginidad. Eres lesbiana, así que podríamos compartir gastos. Planeo hacer una fiesta en un burdel para festejar que me volví un hombre por completo.
—¡Hahahahahaha! ¿En serio le pides a una chica que te acompañe a un burdel? Eres más raro de lo que creí.
Me comenzó a dar palmadas en la espalda.
—Me agradas más ahora. Es mi día libre, así que vamos, a festejar que hoy te conviertes en hombre.
—Vamos. En el camino me das consejos sobre cómo satisfacer a una mujer, para no quedar mal.
—Por supuesto.- Dijo, guiñando un ojo.
Posiblemente solo se acerca a mí para sacarme información sobre Daniel, pero no tengo información que le sea de utilidad a ella. Al menos parece ser una chica divertida.
—¿Al menos tienes una buena herramienta entre tus piernas o solo irás a dar lástima?
—No se necesita mucho para satisfacer a una mujer, pero si tanta curiosidad tienes, ¿quieres verla?
—Un chico atrevido, ¿eh? Eso no se le ofrece a una dama.
—Cuando te conviene te comportas como una dama, ¿eh? Tú eres la que estaba interesada en mi majestuosa herramienta, no me odies por ofrecerte una solución a tu duda.
—¿Majestuosa, dices? ¡Hahahahahaha! Eso ya lo veremos.
—¿Veremos? ¿Quieres comprobarlo por tu propia cuenta? Que atrevida eres. Al menos invítame un café o háblame bonito.
—¡Ya quisieras, cuatro ojos! ¡Hahahahahaha!
Me abrazó fuertemente con su brazo mientras caminábamos.
—Tal vez en mi próxima vida te dé ese privilegio.
—Puedo esperar.- Dije, sonriendo.
Odio admitirlo, pero me cae bien esta chica. Es lesbiana, así que esta podría ser mi oportunidad para conseguir un verdadero amigo que no esté interesado en Daniel de una manera sexual o romántica. ¡Cris, no la cagues!