"¡TEN MAS CUIDADO! POR POCO LO DEJAS CAER" Grito Tetis muy molesta
"descuida, es muy resistente "
(HIJA DE….)pensó agraviado Hefesto
¿pero como es, que es hijo de Hera? Pregunto Eurinome nerviosamente mientras tartamudeaba
Eurinome se fue acercando a Tetis mientras lloraba levemente
"ahh… ¿por que me dejaste con el niño de una monarca de la creación? ¿acaso quieres que Zeus me parta con un rayo?" se podía notar a simple vista que Eurinome estaba muy asustada.
"descuida la situación, es un poco mas compleja, no sucederá nada malo "Dijo sobando la cabeza de Eurinome
"¿cual es la situación exactamente?" pregunto Eurinome confundida y algo alterada
"pues…"
Tetis mantuvo un silencio profundo con una mirada oscura
mientras temblaba levemente y con fuerza, apretaba su puño...
"no es nada de lo que debas preocuparte yo me encargo ¿bien?"
"oh... esta bien" Dijo Eurinome con un puchero al ver que su jefa no quiso contarle
"¿Fue tan difícil ? "pregunto haciéndole cosquillas a Hefesto en su estomago
este mostró su sonrisa mas angelical y hermosa...
Eurinome al ver la horrible contorsión de su rostro se espanto
"¡Claro que si!"
"Por favor, ¿no es como si fuese tan malo? Tengo un encanto poca veces visto", pensó Hefesto para sí mismo.
Eurinome lo miró durante un segundo, recordando todas las malas experiencias que había tenido cuidando a este niño.
"Ahhh", Eurinome se acercó al brazo de Tetis y empezó a llorar.
"Y lo peor..."
"Es que ya me encariñé..." dijo con lágrimas en los ojos y una expresión de perro.
"Ahhhh", lloro Eurinome mientras Hefesto la miraba con cara seria.
"(Esta tipa de verdad no me da buen crédito. ¿Ni que fuera tan difícil? Apenas le decía algo y pasaba todo el día tratando de descifrar y controlar este cuerpo que por alguna razón es extremadamente difícil)", pensó Hefesto.
"Eso es raro. Los dioses son conocidos por su alta inteligencia y su gran desarrollo mental a una edad temprana", comentó Tetis.
"Pensé que no sería tan difícil, por eso lo deje".
"¿No has escuchado de cómo Hermes, en su primer día de vida, inventó la lira y robó el ganado del dios Apolo?", preguntó Tetis.
"Tal vez por haber caído nació con un pequeño retraso", comentó Tetis, balanceándolo en su arrullo con algo de lástima en su expresión.
"Ja, ¿la escuchaste? Eres un retrasado", dijo Eurinome con una mirada burlona.
"(Hija de... ya verás, me voy a cagar en...)", gritó Hefesto en su mente.
"Perdón... por habértelo dejado sola", dijo Tetis algo apenada.
"Te lo compensaré".
Eurinome se hizo la difícil de manera orgullosa mientras cruzaba los brazos.
"Oh, mi tarea ha sido demasiado larga. Deberé decirle a todos que mi jefa, Tetis la nereida, es una persona horrible", comentó de manera dramática llorando.
"¿Unh... qué tal si compramos un poco de leche astral? ¿Cómo te gusta?", le preguntó Tetis con una sonrisa ignorando sus tonterías.
Tetis vio que la expresión de Eurinome se volvió más oscura.
Y con un arranque de ira, habló:
"NO ME HABLES..."
"De leche..."
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Después de hablar y reír durante un par de horas, Tetis vio a Eurinome y Hefesto durmiendo abrazados, pero ella no podía conciliar el sueño.
Se puso de pie con sudor en su frente y dijo: "Tengo que comprobarlo".
Entonces salió de la gruta subterránea y ascendió a la superficie. Al tocar tierra, su cuerpo comenzó a transformarse y adoptó la forma de una arpía, con plumas de una infinidad de colores brillantes y vivos y garras afiladas como pies.
Voló en la oscuridad sobre el bosque de la isla hasta que encontró algo entre la oscuridad.
Las garras filosas cayeron sobre un animal, un gran cerdo. El animal chilló y gritó hasta que Tetis terminó rápidamente con su dolor desgarrando su garganta.
Tetis cambió a una forma humanoide y se acercó al animal, arrodillándose y susurrándole al oído: "Ahora irás con los dioses. Perdóname por hacerte sufrir para mi beneficio".
Vio la sangre en sus manos y con una mirada triste, se pintó la cara con ella. Se puso de pie y empezó a hacer una hoguera, recolectando ramas de árboles.
"(Yo... tengo que hablar con ella)", pensó mientras encendía las llamas.
"Mi diosa... Hera... solicito tu presencia", dijo haciendo que un poder azulado infundiera la llama. Arrojando el cerdo entero, sacrificando el animal a su diosa.
Empezó a ser una danza ritual, bailando con pasos alegres con una mirada fría y nerviosa. Al final se inclinó de rodillas ante la llama y esperó. Después de unos minutos, el fuego se transformó en un fuego masivo del tamaño de una casa. Ondas de energía se podían ver alrededor de la llama y los animales del bosque corrieron y se ocultaron.
Entonces, una voz ancestral habló: "¿Qué ser... me ha invocado?", dijo Hera, mostrando su forma física a través de las llamas.
"Soy yo", dijo Tetis.
"Tetis, nereida, hija del anciano dios de los mares Nereo y de la oceanide Doris".
"Tetis, mi dulce Tetis, ¿cómo has estado? ¿Te has sentido bien?", dijo Hera con una gran sonrisa.
"Sabes que ante mí no tienes que ser tan formal, ¿verdad?", dijo Hera con un rostro feliz.
"Mi señora, llamo por urgentes noticias", dijo Tetis.
"Ah, vamos Tetis, ¿por qué siempre tienes que ser tan formal y respetuosa?", preguntó Hera suspirando .
"Dime, Tetis, ¿qué sucede?", preguntó Hera.
"Yo... yo encontré a un niño", dijo Tetis.
"¿Sí?", dijo Hera con duda.
"Ese niño es su hijo, Hefesto", dijo Tetis.
La cara de Hera se transformó en una de ira.
"¿Dónde?", preguntó Hera.
"¿Mi señora?"
"¿dónde está esa criatura nauseabunda y repugnante para que yo misma pueda asesinarla? Estoy deseando descuartizarla con mis propias manos," declaro Hera con ira.
"¡Mi señora!", exclamó Tetis, perpleja.
"¿Qué le sucede a usted? ¿Cómo puede decir eso de su propia descendencia?", preguntó Tetis.
Un arrebato de ira convirtió la voz de Hera en una trascendental.
"ESA COSA NO ES MI HIJO. ES UN SER APÓCRIFO Y PETULANTE, NO MERECEDOR DE LA GRACIA DIVINA. ES UN INSULTO A LA DIVINIDAD MISMA, AL MUNDO", Grito Hera con ira.
"Y a mí…"
Tetis lloro al escuchar las palabras sin corazón y el poco afecto que Hera tenía por su propio hijo. "¿Cómo es posible que la persona en la que más confiaba pudiera ser asi de cruel?", se preguntó Tetis.
Tetis fue corriendo al fuego, materializando agua y apagando las llamas. Cuando estas se fueron, solo quedó una gran neblina de humo y, entre ella, Tetis mostró una expresión abatida.
"AHHHHHH" un grito de dolor recorrió el lugar
"no podía creer... que lo escucho fuese verdad. para Tetis Hera era como su segunda madre ¿como podría ser tan cruel ? ¿Que hay de ella? ¿Era igual de basura? ¿si se le interpusiese a su tonta arrogancia? ¿la asesinaria? ¿acaso a ella le importaba?¿o era otro mas de sus hijos inutiles que podria desechar cuando le convenía? Acaso siquiera...¿llego amarla?"
desde niña se le había enseñado a adorar a los dioses a reverenciarlos y eso haba hecho... ¿pero ahora? ¿como podía adorara a una diosa que muestra tan poco afecto por su hijo siendo el símbolo de la misma familia? ¿como podría reverenciarla sin estar traicionándose así misma?
un llanto de un dolor primordial se escucho por esa llanura fría
solo los animales escuchar el gran lamento de Tetis
por su corazón traicionado y el amor a su diosa… roto
"AHHHHHH"
____
"¿Como carajos Hefesto pudo caminar después de quedar cojo? ¿como lo aprendió? esta mierda es Dificil"
Hefesto había estado mas de dos horas parándose y calleándose una y otra vez
"vamos Hefesto tu puedes hacerlo"
Eurinome y Tetis estaban tratando de hacer que Hefesto caminara
"vamos Teras vamos puedes hacerlo ven con mami Eurinome"
Dijo alzando los brazos
poco apoco vieron como Hefesto se ponía de pie
(VAMOS CARAJO MALDITO CUERPO DE MIERDA OBEDECEME )
*punk*
Hefesto dio un pequeño paso
luego procedió a dar otro
(CHINGA TU MADRE, CARAJO ¡VAMOS!)
y otro hasta que se acerco a Tetis y le alzo los brazo
"EHHHH" grito Tetis tomándolo de los brazos con una sonrisa, emocionada de verlo caminar ya estaba preocupada por el creyendo que podría nunca poder hacerlo por su herida
mientras las dos reían y sostenían a Hefesto
Eurinome se detuvo y penso durante un momento y Dijo
"¿POR QUE FUISTE PRIMERO CON ELLA?"
Hefesto estaba acariciando los pecho de Tetis
este se encontraba un poco avergonzada e incomoda
Hefesto miro a Eurinome y le dio un pulgar hacia arriba
Eurinome lo aparto de Tetis
¿BEBE PERVERTIDO QUE TE DIJE SOBRE ESTAR TOCANDO DONDE NO DEBES TOCAR?
(no me regañes estoy aburrido mi mente de adulto le cuesta interactuar con el cuerpo de un niño ,dejame..)
Hefesto hizo pequeño llanto y ruido mientras peleaba con Eurinome
"jaja"
Tetis al lado solo mostró una sonrisa "¿Qué voy a ser con estos dos?" ….
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después de unos meses
Tetis y Eurinome estaba enseñándole a escribir palabras griegas en el suelo con tierra
haber así se escribe tu nombre
"bien "
Ήφαιστος
copiar los símbolos para Hefesto fue bastante fácil por primera vez pudo tener una actividad mental gratificante pero sin percatarse un pensamiento invadió su mente
pensó en como su madre le había enseñado a escribir cuando era solo un niño, como siempre fue mas inteligente que su hermana y vivía molestándola…
recordó cuando los niños del colegio la molestaron por eso y el les dio una paliza y enseño a su hermana a leer y escribir…
recordó cuando Yessica le insistió para que estudiara con ella, pero el ya le debía demasiado a su familia, no creía que fuese digno de ni siquera...de estar con ella
(debí haber estudiado con ella...así al menos hubiésemos pasado mas tiempo… juntos) una lagrima salio de su rostro
Eurinome se asusto al verlo llorar y fue abrazarlo
"¿que pasa pequeño? no importa, no importa si eres un tonto y te cuesta trabajo entenderlo ¡yo también lo soy!"
Hefesto se sintió mejor con las tonterías de ella le recordaba un poco a su hermana cuando estaba de buenas
"no soy tan tonto como tu"dijo con una voz grave
"eh... como te atreves pequeño mo…."
"¿hablaste?"
Tetis y Eurinome se quedaron callada
"si ya puedo hablar con normalidad"
"quería darles las sorpresa pero decide hacerlo ahora"
Eurinome y Tetis se pararon felices y los abrazaron
(no volveré a cometer el mismo error, esta ves... no seré tan tonto, no volveré a perder a mi familia de nuevo... esta vez... no)pensó abrazándolas
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después de unas semanas mientras Hefesto trataba de caminar con torpeza
tropezó y se lastimo su pierna coja
"ahhh"
un dolor que no había sentido en años lo recorrió
Tetis de inmediato vino a socorrerlo
y empezó a cantar
una energía azulada surgió de ella mientras empezó a cantar y recorrió a Hefesto
NTA:IA da miedo lo que puede hacer
En las olas del mar
Te canto esta canción
Para calmar tu corazón
Dulce criatura
Dulce dios de la mitología
Duérmete, mi amado
Deja que el sueño te lleve
Mientras la brisa marina
Pone besos en tu frente
Sé que has tenido un día
Lleno de trabajo y afanes
Pero aquí en mis brazos
Estarás seguro y a salvo
Que los sueños te traigan
Paz y tranquilidad
Y que cuando despiertes
Tengas fuerzas para seguir
Hefesto, mi querido hijo
Te canto esta canción
Para que sepas que siempre
Estaré aquí contigo
Duérmete, mi amado
Deja que el sueño te lleve
Mientras la nereida Tetis
Canta esta canción
Después de unos segundos, Hefesto se sintió mejor y vio cómo esa energía se introducía en su pierna.
"Gracias, mamá", dijo Hefesto.
"Lo siento, no soy tan poderosa", dijo Tetis.
"¿Qué dices? Pero si ya no me duele", dijo Hefesto.
"Es una ilusión, una canción que calma el dolor. Pero la herida de un dios no es algo que yo pueda curar. Cuando crezcas, probablemente el dolor se vuelva peor. Cuando tus poderes rebasen los míos, puede que ya no lo pueda calmar. Tendrás que buscar otra forma de hacerlo", dijo Tetis.
"Lo siento por no ser tan poderosa", dijo Tetis, sobando la cabeza de Hefesto con una expresión algo triste.
"No te preocupes", dijo Hefesto. "Mamá, has hecho mucho por mí. Siempre te estaré agradecido", declaro Hefesto.
Hefesto y Tetis se miraron con cariño y afecto.
"¡Dejen de estar presumiendo tórtolos !"
Dijo Eurinome trayendo leche del mar carne y alimentos
parecía molesta y lo estaba desde que Tetis llego, Hefesto le estaban prestando poca atención, además de lo que siempre hacían juntos Hefesto y ella, ahora lo hacían Tetis y Hefesto
eso solo la molesto y la puso mas furiosa
"oh estas celosa" Dijo Tetis
"¡CALLATE!, claro que no, me voy sola" Dijo yéndose a explorar las grutas
"Hefesto acompáñala es peligroso"
" si mami" ( si esta bella dama me lo pide ¿como voy a decir que no?)
Hefesto fue con ella al darse cuenta de que no le había prestado la suficiente atención se puso cojeando atrás de ella y la abrazo
¿que te pasa mocoso? Comento ella molesta e irritada
"voy acompañarte a las cuevas, siempre las exploramos juntos" respondió el
"¿que no tienes a tu mami Tetis que te acompañe?"
Hefesto se rio
(es igual que una niña pequeña)
"tu .. también eres mi madre Eurinome..."
Eurinome en la oscuridad se avergonzó
"¿incluso si no me presta atención y no hablamos mucho"? Dijo en una voz algo mas baja
"jaja"
"si, incluso en ese caso"
Eurinome lloro levemente
limpiándose las lagrimas y cargo a Hefesto
mientras caminaban después de un segundo Hefesto le amaso las tetas
Eurinome se sonrojo molesta
"¡YA SABIA YO POR QUE ESTABAS TAN MELOSO! "
Eurinome le sobo rápidamente la cabeza
"¡Eurinome mi cabeza!"
"AHORA AGUANTATE OH VAS A SUFRIR POR APROVECHARTE DE UNA JOVEN DAMA"
"joven dama mejor asalta cuna, eres una anciana"dijo en broma
"jaja"
Eurinome tenia una mirada oscura
un silencio profundo y tenso se produjo
"…"
Hefesto al notar la situación solo comento
"¿me pase verdad?"
Eurinome dejo a Hefesto en el suelo
y saco matas de su pequeña bolsa y empezó a masticar
"corre" comento con una mirada fría mientras masticaba comida
"AHHHHHHH" grito Hefesto corriendo de Eurinome mientras era perseguida por esta
Hefesto tropezó
"hiajjjjaaja" se rio Eurinome mientras lo veía arrastrarse por el suelo
"¡abre grande!" dijo con la boca llena, uso su peso para aprisionar sus brazos
"¡por favor!, ¡no!, ¡no lo hagas no!, ¡NO!, ¡NOOOOOOO!"
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Tetis Eurinome estaban conversando
"Te digo Tetis Hefesto es un niño muy Dificil"
"¿que en serio ?" Pregunto tetis dudosa le parecía que actuaba un poco mas pervertido de lo normal pero de resto era obediente
"si antes incluso lo odiaba"
"por favor creo que estas exagerando"
ambas lo vieron jugar al lado con unos juguetes de madera
" te digo que si quedaras con el por mas de un año no lo soportarías como yo "
"ah por favor estas exagerando"
" te los mostrare" Dijo Eurinome susurandole al oido
Eurinome se desnudo para entrar al agua para buscar verduras y frutas
"¿como podrías odiar a ese?"…
vio a Hefesto mirando perversamente a Eurinome
"ser..."
le lanzo una mirada juzgándolo
"no me mires así es algo biológico si"
"tu de verdad que no te ayudas" Comento Tetis suspirando
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"que molestia"
Dijo Hefesto mientras caminaba por la cueva ya estaba harto de la situación en el suelo de la cueva tenia muchas secciones filosas que lo herían continuamente
pero de la nada sintió una sensación extraña algo que no había sentido antes una necesidad
al principio era como una leve chispa pero luego se convirtió en una llama furiosa
Hefesto se sentía inspirado de algún modo. Buscó en la cueva las rocas más duras hasta que consiguió una que no se rompió incluso arrojándola por el suelo. Y se puso de rodillas y empezó poco a poco a pulir el suelo y eliminando las imperfecciones que había en el
para el no fue tan difícil sintió que su fuerza aumentaba levemente
aunque Eurinome y Tetis no dirían lo mismo.
"Por favor, para ya". El chillido constante, parecido a las uñas en un pizarrón, resonaba por todo el lugar. Tetis y Eurínome se encontraban todo el día tapándose los oídos.
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Eurínome y Tetis sonreían felizmente, mirándose y sonriendo. Eurínome le dijo algo a Tetis, pero esta no pudo escucharla. Tuvieron que quitarse la lana que habían comprado para no escuchar los chillidos de Hefesto.
*CHIIIIIII*
" Ya lleva una semana, ¿no?"
Sí, es bastante desesperante. Aunque ellas no lo veían, los ojos de Hefesto tenían un brillo dorado en su interior mientras éste tenía una gran sonrisa.
Al día siguiente, cuando se despertaron, se quedaron paralizadas. El suelo no solo estaba pulido, sino que tenía pequeñas decoraciones. Parecía un enorme patrón que Hefesto había tallado a mano. Era simplemente hermoso, con pequeños cristales volcánicos que había conseguido explorando las cuevas.
"¿Qué tal?"comento Hefesto
Oh, se ven bastante bien. Hefesto la detuvo antes de que pisara los patrones.
"¿Oye, no los pises?
¿Qué querías que visualizáramos mejor el arte y estuviéramos más cómodas y ahora no quieres que caminemos?" Eurínome miró molesto a Hefesto.
Al ver que estaba siendo egoísta, suspiró: "Lo siento, me sentí inspirado, es todo". Hefesto vio una pared del lado de la cueva y sus ojos volvieron a brillar.
Se acercó a esta y empezó a pulirla también.
*CHIIIIIII*
"¡Voy a matarlo!", dijo Eurínome acercándose por detrás con una mirada oscura.
"¡Ni se te ocurra!", dijo Tetis deteniéndola.
Eurínome soltó una lágrima mientras era sujetada por Tetis: "¿Qué hice para merecer esto?"
Después de unas horas, se podía notar un bello dibujo tallado en la pared de dos madres sosteniendo a un hermoso bebé.
Tetis y Eurínome se quedaron sorprendidas por el nivel de detalle. Estaba sonriendo hasta que Eurínome vio un detalle y su rostro se oscureció, agarrando a Hefesto con ira.
"¿Por qué Tetis está antes que yo? ¿Teras?", dijo agitándolo con cara de loca.
"¿Por qué ella no es una idiota? jajaja..."
"Ya verás, te voy a..."
Luego de unos segundos de Rasparle rápidamente el cabello con sus manos, Eurinome agregó con cara burlona: "Además, ¿por qué te dibujaste tan hermoso? Debiste agregarle un toque de realidad".
"¡Cállate idiota!", exclamó Hefesto ofendido el sabia que su belleza era muy peculiar.
"Pequeño bastardo, ¿cómo me dijiste mocoso?", Dijo eurinome con cara de enojo.
"Ah, suéltame, vieja loca". Se pusieron a forcejear en el suelo.
Tetis solo miró el dibujo, fascinada. Se acercó a la pared y puso la frente sobre ella. Las dudas que sentía en su corazón eran grandes. ¿Debía desobedecer a su diosa, tirar por la borda todo en lo que había creído durante tantos años por un simple niño? Pero...
Los ojos de Hefesto se volvieron dorados por un momento y su fuerza aumentó. Después de pelear por primera vez, Eurinome perdió ante la fuerza de Hefesto, doblándole levemente el brazo por detrás.
"Me rindo, Hefesto monstruo"dijo ella pidiendo clemencia con su mano libre
Hefesto la miro con una sonrisa arrogante. Y la soltó y ella se fue frotando su brazo.
"Tetis, Hefesto me maltrató", Dijo Eurinome con lágrimas como una niña.
Tetis abrazó gentilmente a Eurínome. Luego miró furiosa a Hefesto.
"¡Hefesto, compórtate!", dijo Tetis. Eurínome le sacó la lengua mientras Hefesto arrugó el rostro.
(Pero por ellos)... Tetis miró levemente el dibujo. (Estoy dispuesta a hacerlo…)
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Mientras paseaban por la cueva, se podía ver a un Hefesto más grande, como de edad de diez años. El crecimiento de un dios era algo anormal. Solo habían pasado tres años desde que llegó a ese mundo.
Mientras exploraban la cueva, Eurínome empujó a Hefesto. Éste cayó al lado y un pulpo grande con alas de murciélago se había clavado en la cabeza de Eurínome.
"¡Ahhh, ayúdame!", gritó Eurínome opacada por el ser en su cara
Hefesto se acercó a ella y, con un brillo dorado en sus ojos, jaló al animal. Cuando lo hizo, la fuerza se desbordó y mató al animal de manera accidental.
"Cof, cof, eso estuvo cerca", dijo Hefesto.
"No podías ser más delicado", dijo Eurínome, molesta con toda su cara llena de baba verdosa y su cabello hecho un desastre. Hefesto le tendió la mano. "Por favor, podrías haberte convertido en agua si te dolía tanto".
"Niño, no lo pensé. Si me asusté", dijo Eurinome.
"¿Qué cobarde eres?", exclamó Hefesto con cara burlona.
"¡Cállate!", Dijo Eurinome parándose y volviendo a donde vivían junto a Tetis.
La cueva se veía algo mejor, llena de pequeños muebles de madera, un par de camas, una cocina ornamentada y bien construida.
Tetis miró a Hefesto con calma al llegar. "¿Ya está listo?", preguntó.
"Sí", respondió Hefesto. ya habían explorado toda la gruta marina era algo que quería hacer antes de irse
"¿Qué dices, Tetis?", preguntó Eurinome.
"Sí, diría que ya está listo. No creo que le pase nada malo mientras esté con nosotros", dijo Tetis
Hefesto miró el agua de la cueva abajo de ellos. Allí estaba su libertad... pero imágenes de su caída, el agua, los recuerdos del dolor que sintió se interpusieron en su mente. Se puso en cuclillas.
"Dijiste que querías salir de aquí, ¿no? ¿Qué pasa?", preguntó Tetis acercándose a él y poniendo una mano en su hombro.
"Es que... no sé si estoy preparado", respondió Hefesto. Ocultando su miedo
"No te preocupes, estamos aquí contigo. Te protegeremos", le aseguró Tetis.
Eurinome asintió, añadiendo: "Somos tu familia, no te dejaremos solo tonto".
Hefesto sintió un leve temblor en su cuerpo y su miedo. Eurinome al verlo en ese estado sonrió Ella le dio un abrazo y lo cargó, sumergiéndose levemente en el agua. "Espera, EURÍNOME", grito Hefesto.
"Todo va a estar bien. Estoy aquí, nada malo te va a pasar", susurro ella en su oido mientras sostenía sus manos.
Hefesto asintió y cerró los ojos mientras el terror lo invadía. "No cierres tus ojos, aguanta la respiración", dijo ella.
Se metieron debajo del agua, pero por unos segundos Hefesto no quiso abrir los ojos. Tenía demasiado miedo a la oscuridad del mar y a volver a pasar por ese dolor. Después de unos segundos, sintió el toque de Eurínome en su espalda y abrió lentamente los ojos.
Hefesto cuando la oscuridad se aparto de su mirada, se cautivo al ver el hermoso paisaje bajo el agua. Era un mundo totalmente distinto al que había conocido hasta ahora. Vio un paisaje increíble, lleno de luces del fondo marino, plantas bioluminiscentes que decoraban el mar, animales gigantes que recorrían cada centímetro, y árboles marinos que parecían llegar a la superficie del agua.
Un océano que parecía tener distintos colores plagaba el lugar.
Al final del recorrido ascendieron y tocaron tierra
Hefesto sintió un cosquilleo en su piel mientras caminaba por la arena, con sus pies sintio el calor tan familiar que le trajo recuerdos de cuando iba la playa con su familia miro hacia afrente viendo una pradera extensa, con arboles brillantes en las distancia montañas gigantes que llegaban casi hasta el cielo, Era un lugar mágico y lleno de vida. Se haba sentido triste y deprimido durante todo estos años, apenas quería hacer alguna cosa... estaba roto y dolido pero por primera vez, en esos años, ante esa vista tan imponente de otro mundo se sintió verdaderamente feliz
Hefesto sintió el viento de la playa en su piel y aromas que no había sentido en años no recordaba como era no oler el amoniaco de las grutas marinas cercanas al volcán
. "¡Es increíble!", exclamó Hefesto, con lágrimas en los ojos. "Es hermoso".
"¿No te dije? ¿De lo que te perderías si no venías?", dijo Eurínome, mientras le sobaba la cabeza a Hefesto.
"Sí, tienes razón", respondió Hefesto. "Estoy muy agradecido de estar aquí con ustedes".
Hefesto miro hacia la pradera con una mirada melancólica mientras sus ojos lloroso no dejaban de sacar lagrimas
(Quisiera que ella... pudiera verlo conmigo...)
NOTA: DESDE AQUÍ EMPIEZA LO BUENO VAMOS A EXPLORAR EL MUNDO POCO A POCO