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Chapter 4 - #4 Desconcierto

Bito miro desde lejos con preocupación intensa en sus ojos. Nunca antes había sentido tanta presión en su vida. Este era un momento muy crítico e importante después de tantos años de estudio y esfuerzo.

Desde que experimentó su despertar y haber fallado tan miserablemente, una obsesión muy grande se había despertado dentro de él. Intentó por todos los medios estudiar y hacer algunos experimentos para mejorar la tasa de éxito en el despertar. Pero esto era complicado de hacer sin objetos de prueba.

Así que tuvo la genialidad de casarse con la mujer más talentosa entre las plebeyos. Intentó todos los medios para enamorarla hasta que lo consiguió. Teniendo sus primeros hijos con ella. Inmediatamente después del nacimiento de su primer hijo, cuando cumplió los tres años, comenzó a prepararlo para su despertar. Recibiendo las hierbas y medicinas del clan. Hasta conseguir las suyas y fabricarlas para mejorar la tasa de éxito.

Así con su ilusión y sueño, pasaron algunos años hasta que llegó el día esperado para Bito. Inmediatamente se dirigió a la plaza con su primer hijo en brazos, seguro de que podría tener éxito. Pero su sueño estaba demasiado lejos. Su hijo, fallo en el despertar.

Mirando tal fracaso, Bito no pudo soportarlo y deshecho a su primer hijo. Aquel niño fue abandonado el los suburbios más bajos a su suerte. Mientras tanto, su esposa Clarisa no dijo nada ante este hecho. Ella estaba de igual manera obsesionada con conseguir una mejor vida, y apoyaba en todo lo necesario a Bito. Ambos discutieron qué medidas debían tomar en su segundo hijo. Y así, continuaron con sus pruebas.

Los años pasaron, y Clarisa como Bito tuvieron 5 hijos más. En cada uno de ellos experimentaron diferentes métodos y pruebas. Con el transcurso del tiempo aquellas pruebas se hicieron más terribles e inhumanas. Dos de sus hijos no lo soportaron y murieron. Mientras que el cuarto y quinto fallaron sus pruebas del despertar.

Con los ojos tan rojos y llenos de locura, ambos decidieron no rendirse. E intentaron tener otro hijo más. Y así tuvieron al sexto y último hijo. Ambos discutieron e intentaron mejorar en sus pruebas para no tener más fallos.

Tenían esperanzas, esta vez en su locura creían haber hecho las cosas correctas. Pero sus ilusiones una vez más se hicieron pedazos. Fallando nuevamente, Bito y Clarisa se habían rendido.

Eso fue hasta que llegó Mark, sin tenerlo planeado y desearlo llegó un séptimo hijo el cual ellos no esperaban tener. Y con su renuncia, a diferencia de sus demás hijos. Intentaron ser buenos padres, criarlo y educarlo, como todo padre haría por sus hijos. En ese tiempo la familia era feliz pero eso cambió un día antes de que Mark cumpliera los 3 años.

Un día antes de su cumpleaños número 3, Bito había llegado con los ojos llenos de sangre y una furia la cual descargo en el momento que llegó a casa.

Golpeó, destruyó, todo lo que se le atravesaba en el camino, lo hizo pedazos. Clarisa la cual tenía a Mark en sus brazos estaba muy sorprendida por su comportamiento. Ella conocía a Bito por años y nunca lo había visto actuar de esa manera.

Incluso teniendo todo tipo de fracasos, Bito siempre actuó de la manera más fría y calculadora para intentar tener éxito en sus proyectos. Su casa que apenas podía ser llamada decente, fue destruida por la furia cegadora de Bito.

"¿Cómo es esto posible? ¡Cómo se atreven a burlarse de mí de esa manera!"

"¡¡¡Malditos, malditos!!!" Gritando palabras sin sentido, Bito continuó destrozando todo el lugar.

"Porque ellos, ¿por qué?"

Pasó el tiempo y Bito ya jadeando y más tranquilo después de desahogarse, se acercó a Clarisa.

Tomándola de los hombros él la miró a los ojos. "Clarisa, no podemos rendirnos. Nuestro sueño no puede acabar de esta manera. Hay que intentarlo una vez más."

"¿Qué? A qué te refieres con intentarlo de nuevo." Clarisa la cual estaba confundida miró a los ojos de Bito el cual seguían rojos pero esta vez estaba mucho más tranquilo que antes.

"Hablo de nuestro sueño de volvernos nobles. Aún no podemos rendirnos, a pesar de todo esos años intentándolo. Aún no es demasiado tarde." Bito la soltó y caminó hacia unos de los estantes destrozados y sacó algunas tablas para luego tomar un libro entre sus manos.

"Aún tengo varias teorías en este libro que podemos poner en práctica. Nuestro sueño aún no se ha acabado. Después de lo de hoy, estoy seguro que podemos tener éxito si lo intentamos una vez más."

"Yo no lo sé Bito, quiero tener éxito igual que tú. ¿Pero cómo lo haremos? Hay que ser sincero que es imposible que un plebeyo se vuelva noble. Es mejor si lo aceptamos y seguimos viviendo nuestras vidas." Clarisa hablo mientras ve a Bito mirar los textos de su antiguo libro el cual estaba cubierto de polvo.

"Clarisa, pensé lo mismo hace algún tiempo. Pero esta vez estoy seguro de tener éxito. Y tú también lo creerás." Bito camino hacia Clarisa y la beso en los labios.

"Tengo que decirte que el bastardo de Ana logró despertar y ahora su familia serán convertidos en nobles."

Escuchar tal noticia hizo que enloqueciera de furia, "¿Qué? ¿Cómo es posible que esa maldita perra lo haya logrado? ¡Esto no es posible!" Después de escuchar las palabras de Bito, Clarisa perdió toda compostura. Ella odiaba mucho a Ana desde lo profundo de su corazón.

Odiaba la manera en la que actuaba justa y recta delante de los demás. Creyéndose amable y bondadosa. "A esa maldita perra no le bastó con meterse en nuestros asuntos e incluso tomar a nuestros hijos y ponerlos en nuestra contra."

Bito la abrazó y besó su frente, "No te preocupes mi amor, esos bastardos no entendieron que lo que hicimos fue para darles una mejor vida. Pero a pesar de nuestros esfuerzos, ellos no supieron apreciarlo y fallaron su despertar. Desperdiciando nuestros años de esfuerzo."

Clarisa se apegó al pecho de Bito y lo beso en los labios" Pero no lo entiendo mi amor, esa perra no era infértil, incluso se molestó en adoptar a esos bastardos inservibles de nuestros hijos. Cómo es que ella salió embarazada e incluso que su primer hijo logrará despertar."

Al escuchar esto, Bito tenía una mirada fría y furia podía verse en sus ojos. "No lo sé, mi amor, pero no te preocupes. Nosotros también lograremos convertirnos en nobles. Te lo aseguro."

Bito la soltó y miró el libro antes de llevarlo a la última página. "Todos nuestros experimentos fallaron, pero eso fue solo el comienzo. Si los métodos normales no son suficientes para lograr el despertar, entonces usaremos...."

"¿Qué? ¿Pero ese método no es tabú?" Clarisa tembló de solo escucharlo, pero un brillo extraño apareció en sus ojos.

"Lo es, pero ya ha pasado tanto tiempo que los antiguos que conocían este método están todos muertos o en reclusión."

Clarisa tembló de emoción y la esperanza llenó su corazón, "Si lo que dices es cierto, entonces podemos volvernos nobles y tener la vida que tanto merecemos."

Bito la miro a lo ojos, "Así es mi amor, nosotros seremos nobles. Le demostraremos al mundo y tomaremos lo que por derecho nos pertenece."

Bajo este retorcido pensamiento, tomaron a su último hijo Mark y lo prepararon para el despertar.

Todo el esfuerzo lo llevó a este día...

La tormenta de llamas comenzó a disminuir mientras el tiempo pasaba. La angustia de los espectadores era grande mientras observaban el desarrollo anormal que sucedía frente a ellos.

Mark, el cual estaba en su centro, comenzó a absorber las llamas doradas que envolvían su cuerpo. El cual ya estaba completamente negro.

Todo lo que pudieron ver los espectadores fue el gran pilar de llamas que se alzaba hasta el cielo, fue disminuyendo y absorbido por el pequeño cuerpo del niño.

Todo el proceso fue muy rápido que apenas les dió tiempo para asimilar lo que estaba pasando frente a ellos.

Y sin darse cuenta, las llamas que una vez estaban ardiendo y amenazando con quemar todo a su paso. Fue completamente absorbido por Mark en su centro.

Los que miraron esto estaban asombrados. Mark estaba completamente cubierto de quemaduras y apenas podían ver si estaba vivo o no.

Soriak el cual era el más cercano al lugar, negó con la cabeza. Mientras que Bito apretó los puños con fuerza. Sus esperanzas se habían hecho pedazos una vez más. Eso es lo que pensó y todos pensaron. Mark había fallado en su despertar.

Todos esperaban las palabras y el anuncio del fallo, y el cual Soriak era muy consciente de ello. Así que caminó hacia Mark para tomarlo en sus brazos y reanudar la ceremonia pero sus pies se detuvieron.

Incrédulo, Soriak no podía creer lo que estaba viendo frente a sus ojos e incluso los presentes. Mark a simple vista delante de todos, comenzó a curarse a una velocidad sin precedentes. Su piel una vez negra y llena de sangre, comenzó a caerse en pedazos para ser reemplazada por una nueva piel nueva y brillante. Todo esto se repitió a una velocidad increíble en todo el cuerpo de Mark. Incluso su cabello ya quemado e inexistente comenzó a crecer nuevamente sin dar señales de detenerse.

Mirando esto, Soriak se sorprendió tanto y sin darse cuenta, Mark ya estaba completamente curado.

Suspirando, Mark abrió sus ojos muy lentamente. Sus pupilas negras fueron reemplazadas por un color rojo sangre. Y su cabello corto ahora llegaba hasta el suelo. Cubriendo toda la espalda del pequeño…

Soriak no sabía cómo reaccionar o explicarse como esto era posible.

Entre todos en la plaza sólo había una persona que sabía o tenía el conocimiento sobre este hecho y era Bito. El cual miraba a Mark desde la lejanía con una brillante y loca mirada.

Al fin había tenido éxito…

Al fin sus sueños se estaban haciendo realidad…

Mark, su última esperanza...

¡Había logrado despertar!