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Chapter 73 - Cosas que ya sabia - Parte 3

Cuando atrape aquella lata, sin darme cuenta, mi cuerpo reacciono de una forma que nunca había hecho antes. No podía sacarme de la cabeza ese momento, tenía que aprender a cómo usar ese estímulo de forma consiente.

Hasta ahora, había varias cosas que tenía muy claras ahora.

La venda de los ojos no fue más que un método para volverme más susceptible a lo que ocurre en mi entorno.

Si no hubiera pasado por todo esos días con la venda, nunca hubiese sido capaz de desarrollar ese instinto por mí mismo.

Pero eso es solo el principio.

El entrenamiento con las pelotas de goma, no fue más que una manera de cómo usarlo y tener una cierta perspectiva de lo que quería lograr. Pero aun así no iba a ser suficiente.

Era una buena idea, pero estoy bastante seguro que no iba a llegar a nada a ese punto. El entrenador no me había dado más pistas, así que me desespere y seguí intentándolo.

Si mis ojos en sí ya eran buenos, eso opacaría mis otros sentidos, probablemente el entrenador se dio cuenta de eso, así que lo "sello" por ahora.

Es por eso que ahora mismo…

Poco más de un mes de esta rutina. Voy a liberar ese sello y combinaré mi vista con mis otros mejorados sentidos.

Me di cuenta en ese entonces, que pude lograr reaccionar de ese modo porque había utilizado tanto mis ojos y oídos sin pensarlo.

Es por eso que se me ocurrió este nuevo entrenamiento poco convencional.

-Bien, creo que así está bien.

Usando unas cuerdas y cinta adhesiva. Amarre varias pelotas de goma en un extremo de una cuerda, y del otro lado uso la cinta para pegarla en el techo dejándolas colgando. Me aseguro de utilizar mucha cinta para fijarlo bien para que no se cayeran.

Había 6 pelotas colgadas en un círculo uniforme, separadas a poco más de 2 metros de cada una.

Estando yo en el centro de todo. Tomo un trozo de madera y entonces…

-Fuuu… ¡Vamos!

Con un movimiento oscilatorio golpeo todas con fuerza haciendo que se columpiaran. La cuerda de cada una son de 2 metros y medio, así que en el momento de estirarse por completo regresan hacia mí.

Todas regresan en diferentes tiempos. Y ese es el punto.

No estaba vendado, así que podía ver como regresaban.

Desde ahora todo depende de un ritmo. Cuando estaban a mi alcance las golpeo con las palmas de mis manos y las devuelvo.

Las que crea que no pueda golpear, lo esquivo con el más minúsculo movimiento sin salirme del círculo.

Al comprender la distancia de cada una es fácil predecir hacia donde vendrán. La idea de esto es no dejar que me toque ninguna, y únicamente puedo usar mis manos para alejarlas.

Al cabo de unos segundos, el entrenamiento se había convertido en lo que tenía en mente. Utilizando solo la información que puedo recopilar viendo y escuchando.

Puedo recrear a la perfección ese momento y mucho mejor. Usando mi imaginación con los recuerdos de todos los encuentro que he tenido.

Ataques directos, desde los costados y desde mi punto ciego. Este entrenamiento mejorará mis capacidades de reacción.

-¡Thch…!

Una pelota golpeó el lado izquierdo de mi cabeza… aún tengo que pulirlo.

Por el momento seguiré este método, la aumentaré más y más hasta que pueda dominarlo.

¡Puedo hacerlo! ¡No puedo permitirme perder!

-¡Arg, Esto es duro…!

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3 días habían pasado.

Los días libres habían acabado y otra semana había llegado.

-Fuuaaa… ¡Está haciendo más frío que antes!

-Cuanto más digas esas cosas más frío tendrás. ¡Joder! Incluso estoy empezando a tener frío también.

Chris no pudo evitar exasperarse mientras hablaba. Ya se sentía el cambio de clima con el paso de los días.

-¿Me pregunto qué tipo de ropa habrá en el centro comercial? Quiero conseguir una chaqueta.

Incluso si se estaba congelando. Ariana no pudo emocionarse por la salida a la ciudad.

Ella, junto a Chris, estaban esperando a Ryuji y sus compañeros para ir a comprar ropa de invierno como habían planeado.

-Creo que buscaré un abrigo. La que tengo ya está desgastada.

-Oh, que elegante, deberías de conseguir un gorro de lana también.

-Ummm, si hay uno que me guste lo haré. Pero de todas maneras… están tardando demasiado.

Chris expresa su ánimo con estrés. No soportaba mucho el aire helado del ambiente, y la ropa de invierno de la Academia no abrigaba lo suficiente.

-¡Oigan, chicos! ¡Perdón por hacerlos esperar!

Pero momentos después, una chica los llama a lo lejos. Sara Araroza, junto a sus dos amigas y Jack Collins.

Ariana y Chris los reconocieron y se acercan al grupo. Chris hablo de inmediato.

-Ya se estaban tardando. ¿Paso algo?

-No, nada malo paso. Solo estábamos arreglando varios asuntos de la clase. Ya podemos irnos.

Sara habló casualmente y sin preocupación como siempre. Los que lo acompañaban parecían estar también listos para irse, pero había algo extraño.

-¿Uh? ¿Dónde está, Ry? ¿Se quedó haciendo algo?

La que hablo fue Ariana, después de inspeccionar y darse cuenta que un personaje faltaba en el grupo.

Chris parecía concordar con la misma pregunta. A lo que Sara con una expresión simple responde.

-Ry ya se fue hace tiempo.

-¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!

-Parece que tenía algo que hacer o algo así. También dejo un mensaje que iba así, "Lo siento, aun cuando se dieron la molestia de invitarme no voy a poder ir, lo lamento en verdad". Eso fue lo que dijo antes de irse. Que sujeto tan tonto…

-...

No sabían qué decir. Si hablar acerca de Ryuji, o de la extraña y exacta imitación de Sara. Estaban muy desconcertados.

-Bueno, él tiene sus propios asuntos. Nosotros vamos a ir de todas maneras, ¿y ustedes?

Sara comenzó a guiar el camino mientras les expresaba su punto. No tenía ninguna intención de quedarse atrás. Chris parecia algo pensativo, pero hablo casi al instante.

-… Yo también iré. Supongo que no tenía de otra. ¿Tú que harás, Ari?

-Yo… si, también voy a ir. A pesar de todo, aún quiero comprar ese abrigo.

Con una expresión de pesar. Ariana aún se mantuvo decidida en ir de compras. Pero eso no evito que estuviera un poco decepcionada.

-¿Así que buscas un abrigo? ¿Qué tal conseguir un cárdigan? Te quedaría bien uno, Ariana.

-Son bonitos. Pero quiero algo que me proteja del frío, y un cárdigan no sería lo apropiado, sabes…

El pequeño grupo de chicas empezaron a hablar entre sí mientras caminaban en la ciudad. Chris se encontraba detrás observando sin decir nada.

Al mirar a su lado encontró a Jack caminando a pasos callados sin hablar tampoco.

-Este… Collins, ¿no?

-¿… Eh? Ah, ¿sí? Tú… ah…

-Treumun.

-Si… perdón…

-...

¿Por qué se disculpa?

Chris no pudo evitar preguntarse eso. Solo han hablado pocas veces, pero le han parecido muy extrañas las reacciones de Collins. Lo miraba con ojos de sospecha, pero se detuvo, era alguien a quien Ryuji lo consideraba un amigo. No sería correcto analizarlo.

Por lo que considero hablar con más delicadeza y paciencia.

-Collins, si no te molesta hablar conmigo. Podrías responderme algunas dudas que tengo, pero puedes negarte si quieres.

-¿Dudas… de qué?

-No es nada malo. Solamente quiero saber la razón de que Ry no haya venido. ¿Viste algo extraño en él?

-… Extraño… la verdad parecía estar como siempre… pero lucia algo… apurado, como si hubiese tenido una emergencia.

-Ummm. Ya veo. La verdad es que él siempre parece que tiene algo que hacer. ¿Sabes que él quiere ser un Ripper?

-Si… lo sé.

-¡¿En serio?! ¿También sabes que es un Singular?

-Si… lo dijo varias veces, en el primer día que llego, lo menciono en su presentación a toda la clase…

-¡Hahaha! ¡Por supuesto que lo hizo!

Chris se expresaba con naturalidad y Collins también parecía empezar a bajar la guardia. La conversación de ambos fluía con tranquilidad, pero entonces con sutileza y franqueza, Chris pregunta de nuevo.

-¿Crees que Ryuji pueda lograrlo?

-...

Las palabras fueron trasmitidas y el silencio apareció. Chris miraba directamente a Collins en busca de una respuesta.

-… Yo… no lo sé…

Cuando Collins murmuro eso con un toque de inseguridad que chocaba sus palabras, Chris tenía una cierta idea de que eso es lo que diría, así que se sintió un poco decepcionado, pero no quería verse de esa manera. Cuando parecía estar a punto de decir algo más.

-Pero…

Collins hablo de nuevo.

Su flequillo no dejaba ver por completo su rostro. Pero se pudo admirar el reflejo de sus ojos al mirar hacia adelante con una ligera sonrisa al pensar en su respuesta.

-Sería genial, que lo logre.

-¡…!

La expresión de Chris fue de sorpresa. Había sobreestimado a Collins por completo. Y en su mirada se vio reflejada una satisfacción de saber lo que opinaba.

-Ya veo. Eso está bien. Bueno, cambiemos de tema. ¿Hablemos de qué tipo de mujeres te gusta?

-¡¿Eh?! ¡¿Q-Q-Q-Que dices ahora?!

-¿De las chicas aquí presente cuál te atrae más?

-Ah… Ah…

Sin dejarlo escapar, Chris continúo hablando con un nervioso Collins mientras llegaban al centro comercial de la ciudad.

Una estructura de varios edificios. Había mucho que recorrer, pero sabiendo lo que buscarían se dirigieron al área en donde vendían ropa.

El grupo se dividió en dos al instante. Las chicas caminaron entre tiendas, mientras que Chris y Collins se mantuvieron en espera observando. Cada uno de ellos compraba por su cuenta.

-¿Qué, Treumun? ¿Eres tú?

-¿Hm?

Hasta que un ligero cruce de miradas. Chris fue llamado de repente.

No esperaba encontrar a alguien en este lugar. Pero siendo un sitio público y a esta hora no era muy extraño.

-Que sorpresa verte aquí, ¿estás en una cita?

-No, solo son una compras, aunque también podría preguntarte lo mismo, Marz.

El chico frente a Chris, Jimy Marz, en su misma clase 1-A. la relación entre ambos no era algo más que ser compañeros de clase, únicamente hablaban entre ellos si no era necesario o por pura casualidad.

El único conocimiento remarcable que conoce de él. Es que no tiene malas relaciones en su clase y está en el Club de Rippers. Eso es todo, no había mucho que le llamara la atención, en sus propias palabras, era una persona común.

Marz suspira como si hubiese recordado algo frustrante y empieza a divagar.

-Me estoy relajando un poco de las actividades del Club, ¿Sabes? Tenemos esta semana libre antes de que comience el torneo. Ya tenía varios compromisos, así que me tomo este tiempo para descansar. En fin, ¿quieren juntarse con nosotros? Están unas chicas de otras clases muy bonitas.

-Pasaré. Mi grupo está acabando con todas las tiendas que si me despego de ellos temo que no pueda encontrarlos después.

-Hahaha ¿Qué eso?, bueno, te veo luego.

-Ah, por cierto, Marz. ¿Una pregunta?

Con un leve indicio de intriga. Chris no dejo escapar la oportunidad de indagar.

-El , tienes pensado entrar, ¿no?

-Por supuesto.

-En las próximas elecciones para los puestos será dura, en especial para los de 1º año. ¿En serio puedes darte la libertad de estar relajado?

-Eso no me preocupa tanto. Soy el que tiene más victorias que derrotas en mi año. Tengo la absoluta confianza de ganarle a cualquiera.

-...

Chris lo observo con recelo, sin ninguna duda tenía una gran confianza en sus habilidades. También podía percibir en él Aura que liberaba sin darse cuenta. Sobresalía del promedio casi llegando a la 4ª etapa. Es fuerte.

Pero eso a Chris no le importo y le dice.

-No deberías decir que has ganado por ahora. Podrías terminar decepcionándote al final.

-¿Eso es un consejo o una advertencia?

Marz respondió con indiferencia, un poco enfadado.

-Tómalo como tú quieras. Las cosas no siempre salen como uno quiere, ¿sabes?

-Como sea. De igual forma entrenaré entre semanas y te devolveré tus palabras.

-Claro, lo estaré esperando. Que tengas suerte.

Con una sonrisa, Chris se despide de Marz, dejándolo con una actitud agria.

Ese idiota ¿Quién se cree que es?

Con amargura en sus pensamientos, Marz se va con su grupo con aires de enfado.

Chris miro de reojo el cómo Marz se alejaba.

Una vista expectante y seria. Continúo su paseo por el centro comercial.

-Más te vale barrer el piso con ese tarado, Ry.