Bajo unos limitados rayos del sol, ocultados por suaves y densas nubes en el cielo de color grises.
En una calle al aire libre en donde se encontraba Ryuji junto a la chica del uniforme escolar que acababa de ayudar, estaban observando que el grupo que los molestaban se habían ido.
-Ya todo parece estar bien. No tienes ningún daño, ¿verdad?
-¡No, no, estoy bien, en verdad! Perdóname a mí por haberte involucrado en esto.
La chica, aparentemente apenada por lo que ocurrió, comenzó a disculparse. Su largo cabello castaño se ondulaba en el aire por cada movimiento de su cabeza en negación y nerviosismo.
-No te preocupes, si dijiste que no son tus amigos, no hay por qué disculparse por eso.
Aunque…
Dijo Ryuji con una sonrisa, pero su mente parecía pensar otra cosa.
Es algo decepcionante que las cosas terminaran tan fácil. Quería probar otras cosas de mi entrenamiento… pero no puedo pedir mucho en realidad.
-De todas formas, te agradezco que me hallas ayudado. Estas cosas son muy molestas de tratar.
-¿Es así?, y al fin, al cabo, ¿Cómo te viste involucrada?
Su sonrisa se extendía como una flor al hablar, pero al mencionar el tema su sonrisa comenzaba a distorsionarse en odio.
-¡Jum! Esos idiotas aparecieron de la nada y diciendo estupideces, sin sentido para ligar, pero al mandarlos a la mierda terminé igual a como me encontraste. Lo demás ya lo sabes.
Palabras de asco para los tipos que la molestaron caían. Ryuji no la cuestiono, en cambio, se quedó escuchando cada palabra y asintiendo como si fuera algo normal y típico que entendía.
-Ummm, entiendo lo que paso, pero… ¿No tienes a alguien que te acompañe a casa? Creo que eso disminuiría la posibilidad de que eso pase otra vez, ¿no?
No seré muy experto en ese tema, yo siempre iba solo a casa. Pero los demás niños de mi anterior escuela lo hacían.
-En mi escuela, no tengo ningún amigo que viva cerca donde yo vivo. Salimos juntos, pero nos separamos al llegar a las calles principales.
-… Ya veo.
Si es así, no hay nada que pueda hacer. La chica parecía decir esas cosas con su expresión sonriente.
Ryuji no sabía que decir, era algo con lo que era difícil tratar, al tener un limitado conocimiento de cómo debería relacionarse las personas.
Pero aunque fuera limitado, no era inútil.
Se lo han demostrado.
Se lo han enseñado.
-En una escuela…
-¿Eh?
-Debe de haber muchas personas… ¿No habrá alguien que viva cerca de aquí?
Ryuji comenzó a hablar de una manera algo seria, pero la chica parecía no entender y comenzó a reírse.
-Por supuesto hay muchas personas en una escuela, es obvio, ¿no? Pero no solo puedes ir preguntando eso así de simple, ¿no crees?
-… Sí, es verdad… tienes razón.
-¿Eh…? ¿Pasa algo?
La chica le pareció algo preocupante la extraña forma en como respondió Ryuji.
La energía que emitía hace unos momentos no estaba, aunque ella le hubiera parecido cómica. Al verlo, le pareció algo triste y solitario.
-¡Ah! ¡No, no, no es nada, perdón!
Pero de inmediato se recompuso con una sonrisa nerviosa, agitando las manos hacia los lados a una velocidad increíble para ocultar su preocupación.
-Ummm, entonces solo tenemos que conseguir a alguien… ¡Ah!
Atrapado en sus pensamientos, levanto la vista como si hubiera recordado algo.
Dando media vuelta.
-¡¡Oyeeeeee!!
Usando sus manos como bocinas.
-¡¡Tú, el rubio de allá!!
Alzo su mano como una señal para el chico que ha estado observando desde el principio.
-¿Eh?
-¿Ah?
-¡¡¿Puedes venir un momento?!! ¡¡Quisiera preguntarte algo!!
Tanto el chico como la chica colocaron unas caras de dudas al ver la repentina acción que tomo este desconocido.
¿Me está llamando… por qué?
-¡¡Has estado un largo rato ahí!!
-¿Eh…?
Este tipo… ¡¿Lo sabía?!
El chico estaba perplejo, haciendo un recordatorio, él sabe que paso a un lado de él desde el principio. Pero solo fue por un instante, ¿lo había notado?
Y si es así… ¿Sabía que estaba observando desde mucho antes?
-¡¡¿Qué tanto piensas?!! ¡¡Vamos, no seas tímido, hee-hee!!
-….
Incluso si era cierto… ¿Por qué?
El chico comenzó a caminar hacia ellos, podía simplemente darse la vuelta e ignorarlo como siempre. Pero, no lo hizo.
¿Qué estoy haciendo…? ¿Por qué voy?
Un extraño impulso lo hacía caminar hacia ellos de forma algo ansiosa. Pero no se detuvo.
-Oye, ¿Qué es lo que haces?
La chica, sin comprender lo que pasaba, le pregunto a Ryuji de una manera ligeramente dudosa.
A lo que Ryuji no pudo evitar revelar una sonrisa.
-Te lo dije, ¿no?, solo deberíamos preguntar a alguien.
-Sí, pero…
-Tiene un uniforme como el tuyo, deben de ir a la misma escuela.
-¿Eh?
Ahora se daba cuenta la chica, que la persona que se aproximaba tenía el mismo uniforme que usan los chicos en su escuela.
Pero aparte de eso… se estaba preguntando si lo conocía, o lo había visto antes.
-No creo que haya problemas con preguntar, no perdemos nada si lo hacemos.
-….
Si no tienes respuesta a tus preguntas. Búscalas.
No te detengas. Encuéntralo.
No como antes.
Quería cambiar. Desea hacerlo.
Aprender todo lo que pueda. Por lo que esta vez, el dará el primer paso.
Luego de unos momentos el chico se acercó lo suficiente hasta estar cara a cara ante ellos.
Su mirada era serena junto al claro brillo de sus ojos azules.
No tenía por qué estar ahí. Pero aun así lo estaba. Pero en contraste con su actitud, se sentía algo ansioso, por lo que decidió hablar.
-Bien… ¿Qué es lo que quie…? ¡¿…?!
Apunto de decir sus palabras. Una gota de agua fría callo en la punta de su nariz. Su mirada fue alzada hacia el cielo nublado. No solo él se había percatado de esto, también los que estaban con él se dieron cuenta.
-…Se viene una lluvia fuerte…
-¡Ah esto es malo! ¡Mi ropa se va a mojar!
-…..
Talvez por que el estado de ánimo no se encontraba preparado para esta situación. Pero la repentina lluvia los volvió a sentirse algo desubicados.
-¡Vengan, rápido!
-¡¿Qué?!
-¡¿Ah?!
Ryuji tomo a ambos de las manos y los arrastro con el hacia otro sitio. El chico y la chica se sorprendieron por tal repentina acción. Pero de inmediato el chico le pregunto.
-¡O-Oye, ¿Qué es lo que haces?!
-No quieren pescar un resfrió ¿cierto?, conozco un lugar cerca, podemos hablar ahí hasta que deje de llover.
Sin mucho que decir, el chico no siguió preguntando. Aunque parecía algo reacio por cómo se estaban llevando las cosas.
Como si no tuviera ningún control de lo que pasaba. Simplemente, era llevado por esta persona desconocida.
Luego de correr tratando de escapar de la lluvia, Ryuji los llevo a un local cerca de donde estaban. La tienda no era nada en especial, pero en la entrada tenía una sombrilla grande cubriendo la entrada, lo suficiente para refugiarlos mientras pasaba la llovizna.
-Podemos esperar aquí hasta que pase la lluvia. Perdón por arrástralos así de la nada, pero no quería que se mojaran.
-No… Huuff… está bien, es solo… que no estoy acostumbrada a correr así de rápido.
-…..
A pesar de que se apresuraron a resguardarse, no pudieron evitar mojarse un poco.
La ropa de los tres estaba ligeramente mojada, Ryuji y el chico aparentaban estar bastante bien a pesar de estar un poco mojados y haber corrido apresuradamente, al contrario de ellos, el rostro de la chica estaba ligeramente roja con una respiración entrecortada, arreglando su flequillo mojado haciéndolo a un lado, revelando sus brillantes ojos de color marrones.
Los dos chicos quedaron hipnotizados por tal escena un poco excéntricos, que la chica al notarlo inflo sus mejillas avergonzada de ser vista y lanzándoles una mirada de odio con un resoplido de su nariz, haciendo su cuerpo a un lado para no ser vista.
Ryuji al darse cuenta del acto penoso que hacia desvió su mirada de inmediato, al igual que el otro chico.
Observando el cielo nublado que no parecía que vaya a parar de llover en un rato.
El chico les hablo.
-Y bien… ¿Quiénes son ustedes, y por qué fui envuelto en esto?
Su voz era tranquila pero fría como el ambiente en el que estaban. Esa pregunta fue dirigida a Ryuji, el cual se encontraba sacudiendo el agua residual que quedaba en su cabello.
Sus palabras eran parecidas a una declaración de guerra, pero él no lo vio así.
De hecho, no le presto mucha atención y solo sonrió.
-No hay necesidad de tanta agresividad. Estamos en las mismas, ya que yo tampoco sé quiénes son ustedes.
-¿Uh?
-Ahora que lo mencionas… no me has dicho tu nombre.
Ignorando la reacción del chico, la chica de inmediato callo en cuenta de que ni siquiera sabía el nombre de la persona que lo había ayudado. Demostrando su clara curiosidad hacia él.
De inmediato, él se acercó a la chica y alzo su mano hacia ella en forma de saludo.
-Me llamo Ryuji Narukami. Pero puedes decirme Ry, si lo prefieres.
La chica después de escuchar su saludo, y ver su mano extendida, agarrando la mochila con una mano que estaba presionando su pecho, le devolvió su saludo tomando su mano y mostrando una sonrisa.
-¡Es un gusto conocerte…Narukami, ¿verdad?! Me llamo Ariana Blair. Gracias otra vez por ayudarme.
-Ya te dije que no fue nada. Y con Ry es suficiente, también es un gusto conocerte. Entonces… ¿puedo llamarte Ariana o, "Ari"? ¿Tú que piensas?
-¡¿Ah?! P-Pues… yo, no se…. Creo que con solo, Ariana, sería bueno para empezar… talvez…
-¿Hmm? ya veo, entiendo.
Mientras que Ariana comenzó sentirse avergonzada con una voz nerviosa jugando con su cabello por reflejo, por la actitud algo confiada de Ryuji al llamarla tan casual apenas se conocieron, con un rostro enrojecido mirando a otra dirección ocultando su expresión.
Ryuji la observo por un rato, preguntándose él porque estaba actuando de esa forma. Pero no le tomo mucho tiempo para ignorarlo y dirigirse al chico que estaba mirándolos.
-También es un gusto conocerte…
-….
La mirada del chico parecía perdida, observando la cara sonriente del chico que lo saludaba, para después ver la mano que le era extendida.
-¿…Uh, pasa algo?
Ryuji pregunto al ver que el chico parecía algo reflexivo. Le pareció extraño, es decir, es solamente un saludo. Pero…
-Oh.
Al cabo de unos segundos, el chico tomo la mano de Ryuji.
-Me llamo, Chris Treumun.
Sus expresiones faciales no cambiaron mucho, pero a Ryuji no le importaba eso, de inmediato su sonrisa se extendió aún más.
-¡Ya veo, es un gusto conocerte, Chris!
-…
Una extraña risa jovial se podía escuchar bajo la lluvia, ante una situación que nunca espero tener. Chris, no pudo evitar quedar algo tenso y reflexivo por lo que ocurría.
-¡Oigan, yo también estoy aquí ¿saben?! ¡No me aparten del grupo!
-¡Oh, es cierto! ¡¿Ya dejaste de mirar hacia la distancia, Ari?!
-¡¿A-Ari?! ¡No tienes por qué cortar mi nombre, no es están largo!
-No quiero, es más fácil y lindo decir Ari.
-¿L-Lindo…? ...¿Um? ¡Espera, ¿Acaso dices que mi nombre no es lindo?! ¡¿Es lo que tratas de decir?!
-En fin, Chris. A lo que vinimos.
-¡¡Responde!!
-...
Chris pensó que talvez correr bajo la lluvia no sería tan malo…