*Chirp, Chirp*
El sonido del agua se escuchaba en todas partes
El aire frío de la lluvia se esparcía, dejando a las personas sin otra manera que refugiarse de ella. Aunque para ellos, había algo más de que preocuparse.
-Y eso es lo que pasa, ¿Qué opinas, Chris?
La explicación de Ryuji rompió el silencio. Ante la mirada tranquila de Chris.
Una conversación de dos jóvenes, sus vestimentas eran completamente diferentes, a simple vista se diferenciaba de que uno vestía un uniforme escolar y el otro una ropa casual y cómoda para moverse.
Sus estaturas eran prácticamente las mismas. Pero en comparación, mientras uno es un joven que hablaba de una forma animada con una sonrisa rascando su cabellera negra, Chris no dejaba de dar una sensación de seriedad al escuchar, su suave cabello dorado oscilaba de forma glamorosa.
-A ver si entendí… Fui arrastrado en contra de mi voluntad bajo la lluvia, a un lugar por personas que no conozco por alguna extraña razón. Me dicen que los ayude de acompañar a esta chica, que por cierto no sé nada de ella, desde el trayecto de la escuela a su casa por seguridad, ¿Solo por el hecho de ir a la misma escuela?
-Correcto.
-No.
-¡¿Por qué?!
Ante esa respuesta contundente que cuestionaba todo lo que dijo, Ryuji se impacientó.
Fue entonces que Chris se dirigió a la chica, pero esta vez su expresión y ojos eran más relajados. Haciendo una leve sonrisa mientras la miraba, una sonrisa que se podría considerar perfecta.
-Lo lamento, Blair. Pero yo también tengo mis asuntos y no creo tener el tiempo suficiente para acompañarte. Lo siento.
-¡No, no, está bien, yo soy quien debería disculparse por pedir algo tan desconsiderado!
-...
Ariana estaba apenada, se sentía algo fuera de lugar por pedir ayuda a extraños que no conocía. En primer lugar, la idea no era ni siquiera suya, era de la persona que la había salvado, pero incluso si sabía que la idea era algo poco inusual. Por alguna razón que aún desconocía, decidió creer.
Después de disculparse, poso su mirada al chico al cual hablaba por ella.
Pero Ryuji, había estado observando a Chris por un rato, su estado de ánimo parecía algo más calmado que antes, como si estuviera pensando algo, o… se hubiera dado cuenta algo.
En medio de sus pensamientos, Ryuji, sintió que parte de la manga del suéter que traía puesto era ligeramente jalada, automáticamente sus ojos ven en esa dirección. Solo para cruzar miradas con los ojos color café de la chica.
-Creo que deberíamos rendirnos con esto, Ryuj… Narukami. Desde un principio sabía que era una idea egoísta, pero… ¡Estoy segura de que estaré bien, gracias por ayudarme y preocuparse por mí, en verdad!
-….
Ambas miradas no se apartaban. El bullicio de la lluvia parecía ser cada vez más liviano.
Incluso si opinaba que su plan era egoísta, el agradecimiento y felicidad que eran transmitidas por la sonrisa que da era genuina.
No era mentira. Y Ryuji se dio cuenta de eso.
Incluso si para él era desconocido muchas cosas, que para otros era normal.
En cada momento que una persona le enseña algo nuevo.
Algo que nunca pudo experimentar en el pasado.
Amistad, Respeto, Bondad, Disciplina, Generosidad, Amor.
Lo hacía feliz.
Lo hacía sonreír.
-... Entiendo, gracias.
-¿Uh?
Mientras que tomaba un intervalo de tiempo para ordenar sus palabras, le dijo.
-No tiene nada de malo en ser a veces egoísta, ni tampoco el creer que por el hecho de pedir ayuda te vuelve desconsiderado. Pero si piensas que antes te ayude sin saber quién eras y te parezca extraño. Pues ahora te ayudaré porque te conocí, y sé que eres una buena persona, Ari.
-¡…!
Cuando Ariana termino de escuchar las palabras de Ryuji, se estremeció. Palabras que hasta ese momento parecían desconocidas, con un rostro enrojecido, comenzó a mirar hacia otro lugar para ocultar su expresión que parecía estar llena de timidez.
No podía verlo ahora.
-Oye…
La voz de Chris rompió el ambiente de inmediato.
-No sé adónde quieres llegar, pero ya dije que no tengo tiempo para hacer lo que ustedes quieran, así que…
-¿En serio eso piensas?
-¿Uh?
Chris ya estaba cansado de todo esto, intentando negar todo para así irse de una vez. Con una mirada que hasta ahora mostraba su seguridad. Se vio algo confuso ante la pregunta de Ryuji.
Con una expresión que no era muy diferente a cualquiera que haya mostrado hasta ahora, con la diferencia de que sus ojos eran algo distinto.
No era algo normal.
Tomando la recompostura, Chris replico.
-¿A qué te refieres con eso? ¿Crees que estoy mintiendo?
-No sé si mientes o no y no me importa, pero, ¿no crees que se lo debes?
-¿Le debo? ¿De qué estás…?
-Sé lo que vistes y lo que ibas a hacer.
-¡….!
La cara indiferente de Chris de pronto se deformó a una nefasta.
Había quedado expuesto.
Algo que un su mente no era más que una sospecha, se convirtió en una realidad, y por nadie más que por la persona frente a él.
Su mirada se pasó a Ariana, que estaba escuchando todo, pero su reacción parecía confusa como si no sabía de qué hablaban.
Y es por qué no lo sabe.
Incluso si intentaba ignorarla ahora era inútil, un sentimiento que no quería sentir comenzaba a invadirlo.
La culpa.
No podía hacer nada para refutar. Quería salir corriendo de ahí.
Pero...
-No te preocupes…
-¿Eh…?
-No te estoy juzgando, de hecho. Te entiendo.
Para Chris, el tiempo parecía haberse detenido por un momento, pero al ver ante sus ojos la expresión del chico que no aparentaba ningún odio ni desprecio, sino que lo veía de una forma amable. La tensión que habitaba en sus hombros lentamente abandonaba su cuerpo.
No sabía por qué.
-No te pido que te redimas o que pospongas tus planes ni nada parecido. Solo te pido que al menos lo intentes. Ya que después de todo, el primer paso para entablar una amistad, es también poner un esfuerzo en tratar de conocerse, ¿no crees?
-….
Después de mirarse en silencio durante unos segundos, Ryuji observo el cielo que se estaba despejando.
-Ah, ya paro de llover.
Dando esas palabras finales, junto con la atmosfera tranquila y los rayos del sol que empezaban a caer de los cielos.
-¡Haaa…!
Un suspiro largo y pesado por parte de Chris, quien parecía más agotado que todos los presentes. Rascando su cabeza como si estuviera pasando por un tormento.
-Bien…
-¿Uh?
-Haré lo que me piden… igual no estoy tan ocupado…
-¡¿En serio?! ¡Haha, sabía que eras un buen tipo! ¿Verdad, Ari?
-¿Estás seguro, Treumun? Espero que no sea una molestia.
-Creo que ya es muy tarde para preocuparse por eso.
Con la misma seriedad, Chris, continúo hablando.
-Si ya terminamos aquí, creo que es mejor que me vaya.
-Yo también, aún tengo que terminar mi rutina.
¿… Rutina?
Chris se preguntó mientras se daba la vuelta para irse.
-¡Espera!
-¿Qué…?
Cuando Ryuji estaba por tomar su camino para marcharse. Ariana, repentinamente, tomo su brazo con fuerza para evitar que se fuera.
-¿Q-Qué ocurre? ¿Se me olvido algo?
Ryuji dijo eso mientras intentaba calmarse, fue tomado tan rápido y por sorpresa que sus palabras se quebraron.
Los ojos de Ariana se volvieron más intensos que antes, sin soltarlo exclamo sus palabras.
-¡…R-Ryuji…! ¿Tienes algo que hacer mañana…? ¿Estás ocupado?
¿Huh?, Ryuji emitió un sonido penoso.
Después de lo que paso, pensaba que ya había arreglado todo, que talvez había hecho todo lo que había a su alcance para evitar futuros conflictos.
Al menos creía que ya no los vería otra vez.
Pero al ver a Ariana, era como si su rostro dijera que no va a hacer así. Ryuji reflexiono y hablo.
-Tengo una rutina de entrenamiento que debo hacer todo el día… ¿Por qué?
-¿Es así…? Entonces, ¿no podrías hacer un poco de tiempo?
-¿Para qué?
-Quisiera darte algo para agradecerte… por ayudarme.
-¿Hm?, pero te dije que no es nece…
-¡Pues si lo es!
-¿¡…!?
Ryuji se estremeció. Los ojos que lo miraban de una forma tan intensa lo asustaron.
Era la primera vez que era atacado por alguien así de esa manera, y mucho menos una chica que parecía tener su misma edad.
No podía entender el por qué esta reacción. Sin aun comprenderlo, continúo.
-¡Incluso si dices que no es necesario, aun así no es correcto! ¡Manejando las cosas de forma egoísta como tú quieres, sin llegar a comprender lo que piensan los demás, y aun así rechazar la gratitud que te ofrecen, ¿Quién te crees que eres?!
-¿Huh? Yo… ¿Qué…?
-¡Me ayudaste sin siquiera saber quién era, ¿Está mal que te lo agradezca, idiota?!
-¡¿Idiota?! ¡¿Yo?!
Ryuji ya no sabía que estaba pasando.
¿Acaso todas las chicas son así?, viendo lo perplejo y lo asustado que estaba lo hizo tragar saliva.
Sin decir ni una palabra, parecía que estaba en un combate diferente, muy diferente.
Mirando lo decidida que se encontraba, y de suponer que talvez estaba equivocado en como hacia las cosas.
-…. Muy bien, tu ganas.
-¡¿En serio?!
-Si, dime donde debo estar e iré, también… ya me puedes soltar.
-¿Huh…? ¡Ah, lo siento!
-Está bien…
Con emociones que llegaron al límite, ambos se observaron delante del otro, avergonzados.
Mientras que Ariana encontraba la forma de relajarse, tuvo la suficiente para decir sus palabras.
-Si pudieras estar en la escuela que se encuentra cerca de la ciudad, pasando por la calle principal de la zona comercial, ¿sabes dónde es?
¿La zona comercial…? Si es por ahí, entonces…
En el sinnúmero de veces que ha recorrido la mayor parte de la zona. Al pasar el tiempo se ha ido extendiendo poco a poco hasta llegar a recorrer 20 kilómetros al día.
No sería extraño el haber visto, al menos una vez, tanto escuelas, y estudiantes por el camino.
Por lo que puede llegar a darse una idea de donde se encuentra, por el mapa mental que había creado su cerebro.
-Creo saber dónde es.
-¡Qué bueno! ¡Entonces nos vemos mañana a las 2 de la tarde!
-Ah…
A punto de decir algo, Ryuji no tubo de otra que guardárselas. Tan pronto termino de decir todo lo que quería, Ariana se dio la vuelta y corrió con una cara risueña y satisfecha.
-Demonios… y me dice que yo soy egoísta. Ni siquiera dejo que dijera algo y decidió por sí misma todo… bueno, qué más da. Supongo que también nos veremos mañana, Chris… ¿…. Uh? ¿Chris?
Chris se fue en el momento que había dejado llover.
En la calle donde empezaban a ser transitadas de nuevo.
Ryuji fue dejado por las mismas personas que había traído.
-...
Por un momento se sintió como un niño extraviado.
Un resoplido de su nariz con una sonrisa. Ryuji se fue también.
-Supongo que no es tan fácil como creí.