_ Sra. Cash su almuerzo está listo _ hablo amablemente la sirvienta. Cuando Tanying topo el último escalón.
_ Gracias, Matilde, pero tengo prisa hablamos luego_ dijo la chica caminando hacia la puerta principal. Sin embargo, cuando estaba a punto de marcharse recordó algo importante ¿A dónde se suponía que iba a ir? Ni siquiera sabía el paradero de su marido. Avergonzada Tanying voltio a ver a Matilde que aún seguía parada en las escaleras mirándola y preguntó:
_ Matilde sabes dónde se encuentra en estos momentos Maximiliano.
Por un momento Matilde se sorprendió por su pregunta, ya que se suponía que como esposa tenía que saber a donde se encontraba su esposo, pero de todas formas respondió con amabilidad:
_ Sra. Cash el señor salió en la mañana a trabajar como todos los días_ Entonces está en la oficina, pensó Tanying.
_ Gracias, Matilde _ agradeció la joven y luego agregó:"Ah" por cierto no vendré a cenar salder con mis amigos, así que te puedes tomar la tarde libre si deseas _ dicho esto Tanying salió apresurada sin esperar repuesta alguna de Matilde, más tarde se arrepentiría por no haber escuchado a Matilde antes de salir. Tanying se subió a su BMW una vez en el asiento del conductor con su cinturón de seguridad abrochado perfectamente encendido su automóvil y lo puso en marcha.
En la Empresa Multinacional Cash…
Alguien acababa de informar a los empleados de la recepción que la esposa del Ceo, estaba en camino que debería ser recibida y acompañada a la oficina de Ceo. Cuando Tanying estacionó su automóvil frente del edificio de la empresa multinacional Cash, casualmente recordó a su padre tenía tiempo que no hablaba con su viejo y con su madre muchos menos desde la boda no los había visto, ellos no habían acudido a ella y quien lo aria, después de lo que le dijo aquel día sus padres deberían estar dolidos, sin embargo, no importa todo lo que había dicho como hija única Marc y Alice se mantenía pendiente de su hija sin que ella lo supiera dándole su debido espacio. Muy al fondo Tanying lo había echado de menos, pero no estaba dispuesta a pasar de alto tan fácilmente lo que había hecho y ocultado. Dando un largo suspiro Tanying decidió dejar a un lado sus pensamientos saliendo de su automóvil se encaminó hacia la entrada del edificio.
Cuando Tanying dentro dos empleados le dieron una cálida bienvenida y la acompañaron a la oficina del Ceo. Hacía de camino a la oficina Tanying no pasó desprovista todos los empleados la miraban y saludaba. Era imposible que no llamara la atención la manera en que vestía hacía que todos girará a verla tanto como hombres y mujeres. Tanying vestía una pequeña falda negra con ruedos que cubría más arriba de sus rodillas, una blusa blanca con mangas cuello" v» holgada larga que había sido acomodada por dentro de la falda. Su atuendo era combinado con unos zapatos deportivos negros diseñados por unos de los diseñadores más famosos cualquiera que los viera reconocería de inmediato la marca y el costo. Sus largas uñas pintadas de negro le daba un aspecto de chica rebelde. Su larga cabellera teñida de Lila estaba recogida adecuadamente una coleta alta mientras su rostro no llevaba ni una sola gota de maquillaje lo que mostraba su belleza natural. Muchos admiraba la belleza de la esposa de su Ceo en sus corazones y como también algunas mujeres inventaban excusas diciendo que su belleza se debía a las cirugías plásticas a las que se había sometido. Cuando Tanying dentro a la oficina del Ceo Maximiliano no estaba en ninguna parte en cambio estaba, unas de las secretarias de Maximiliano quién le sirvió una taza de té con una sonrisa fingida. Como Maximiliano no estaba allí, acepto y dijo:
_ Gracias _ mientras pesaba si la secretaria no era una de las amantes de su esposo, en muchos libros hablaban de cómo los jefes se enrollaban con sus secretarias y tenía sexo en la oficina. Mirando a la secretaria que estaba ordenado unos papeles en el escritorio de Maximiliano cayó en cuenta que no era fea, bonito cuerpo curvas perfectas alta rubia su vestimenta la hacía ver profesional y madura._ Sra. Cash el señor debería de estar aquí en cualquier momento. Por favor, tome asiento mientras lo espera.
_ OK gracias, respondió casualmente Tanying
_ De nada Sra. Cash. Entonces yo me retiro. Dicho esto salió de la oficina con una sonrisa tan falsa.
Las amantes son celosas con las esposas entonces no estoy en mal concepto secretaria y jefe, pesando esto Tanying murmuró llevándose la taza de tez a sus labios _ Maximiliano Cash eres un hijo de p…_ Tanying soltó un suspiro. Después de todo no era malo ser la Esposa de un Ceo guapo y rico. Cuando pasó la puerta de la compañía todos los empleados estuvieron muy atentos. En vez de sentarse Tanying camino hacia la ventana francesa que daba una vista espectacular hacia la ciudad y se quedó allí observando mientras sostenía la taza de té en sus manos. Cuando Maximiliano dentro a la oficina Tanying seguía observando hacia la ciudad absorda en sus propios pensamientos. Desde la puerta Maximiliano miró cuidadosamente a su joven esposa y frunció su entrecejo al ver como estaba vestida mucho más por el color sentía que odiaba el negro desde la noche anterior que dentro a su habitación. Aunque no podía negar lo sexi y provocativa que se veía en ese atuendo puesto. Pronto el calor invadió su cuerpo desatándose el nudo de su corbata. No pudo evitar sentirse furioso al pensar en los hombres que habían sentido lo mismo que él a mirar su esposa. Maximiliano cerró la puerta de su oficina de una manera osca lo que provocó un fuerte estuerno haciendo que Tanying saltará del susto y volviera a mirarlo, si no hubiera sido por su buen equilibrio hubiera caído.
_ Maximiliano Cash ¿acaso quieres hacer que muera de susto? Así podrías quedarte con tu secretaria _ Protestó Tanying mientras intentaba calmar los fuertes latidos de su corazón.