El libro estaba abierto inocentemente en un hechizo macabro que hacía que sus víctimas se arrastraran con verrugas virulentas, si uno pudiera entender el italiano antiguo y formal. -¿Puedo ayudar? - Adair no se percató de la mujer que se le había acercado.
De mediana edad, vestida con un chaleco de punto y una prenda hasta los tobillos, sostenía, casi ansiosamente, unos binoculares en una mano.
-Este libro. -comenzó Adair, pero ella lo interrumpió - Es muy curioso, ¿no? - dijo ella, poniendo su cabeza a un lado como si fuera
un pájaro, - Forma parte de la colección permanente. No estamos seguros si es una reproducción, por lo que lo mantenemos aquí en la parte inferior.
- ¿Estás interesado en libros antiguos?
Él ignoró su pregunta. ¿Cómo se adquirió este libro?
Nos gustaría saber la procedencia de todos los elementos pertenecientes al museo, pero esto generalmente no es posible. Ella sonrió con cuidado, como si no estuviera segura de que el visitante todavía estaría interesado.
-Este artículo fue donado por un coleccionista que se mudó de Boston a Marblehead, Sra. Recuerdo que a Hendrickx le encantaba comprar botines durante la venta de propiedades. No podía soportar ver cosas viejas tiradas. Puedo mirar nuestros registros para ver si hay más información..." Giró la cabeza en la otra dirección.
- ¿Hay alguna razón en particular para su interés en la pieza? Estás investigando un poco. vas a escribir una tesis?
Porque él me pertenece. Las palabras flotaron en su cabeza, pero en cambio, respondió:
-Sí. Yo mismo soy un coleccionista de estas... cosas peculiares. Estoy interesado en comprar este artículo si quieres venderlo. Como usted misma ha dicho, probablemente sea una reproducción y de dudoso valor histórico, no es digno de ser conservado en esta noble institución.
Ella frunció el ceño, tratando de demostrar su intento de concentración o tal vez para indicar que él había dicho algo mal.
- Tendría que preguntarle al director del museo si estaba de acuerdo con su solicitud, aún tendría que pasar por la junta directiva del museo.
-Ya veo-comentó Adair, juntando sus manos frente a su cuerpo, tratando de evitar el impulso de simplemente agarrar el libro y salir corriendo, por haber encontrado al menos uno de sus tesoros.
-Y.. podrías comprobar si hay ¿Hay artículos similares en su stock? ¿Quizás más curiosidades de la colección Miss Hendrickx?