Gong Wu Mei hizo que un subordinado trajera hielo, luego miró hacia Ning Shu con las cejas levantadas.
¿Para qué la estaba mirando?
"¿Cómo se supone que debo usar esto?" preguntó Gong Wu Mei. Ning Shu respondió de inmediato: "Solo ponlo directamente en tus pantalones".
"¿Estás jugando conmigo?" Gong Wu Mei gritó: "¿Podría ser que quieres que siga agarrándome la entrepierna?"
Ning Shu se rascó las orejas y luego dijo: "Líder de secta, si siente que no puede hacer eso, puede acostarse en una tina de agua helada y luego usar agua caliente para estimularlo, después de cambiar entre las dos temperaturas para estimularlo, debería mejorar".
Gong Wu Mei respiró hondo y luego dijo con voz ligera y sin emociones: "Estás jugando conmigo".
"Yo…Yo no." Antes de que Ning Shu pudiera terminar su oración, una sombra apareció frente a ella, y luego alguien la agarró del cuello. El rostro de Gong Wu Mei estaba contorsionado y su aliento caliente golpeó su rostro.
"¿Crees que no puedo soportar matarte?" La expresión de Gong Wu Mei se volvió aún más siniestra mientras agarraba la garganta de Ning Shu con sus dedos de jade. "En este momento, no quiero nada más que matarte".
Ning Shu sintió el veneno en su palma, sin embargo, no lo usó, porque incluso si lo usara, Gong Wu Mei aún podría romperle el cuello antes de que el veneno hiciera efecto.
Realmente había hecho un trabajo maravilloso cortejando a la muerte.
Su respiración se estaba volviendo más difícil y sus pulmones comenzaban a arder.
Ning Shu golpeó la mano de Gong Wu Mei queriendo apartar su mano. Gong Wu Mei le preguntó con frialdad: "Habla. ¿Cómo lo debo hacer exactamente?
Ning Shu luchó contra su agarre y señaló hacia su cuello. Me estás asfixiando, ¿cómo se supone que debo hablar?
Gong Wu Mei resopló con frialdad y luego soltó el cuello de Ning Shu. Ning Shu comenzó a toser violentamente hasta el punto de que las lágrimas brotaban de sus ojos, sin embargo, internamente estaba bastante feliz, porque antes había logrado frotar el veneno en la mano de Gong Wu Mei.
¡Mierda! ¡Él realmente trató de matarla! ¡Merecía convertirse en eunuco!
Gong Wu Mei la miró con frialdad. "Habla."
"¡Líder de secta, líder de secta, es terrible! ¡La gente de la comunidad de artes marciales ya ha superado la cadena de hierro y ahora está atacando la cueva! El mayordomo Liu entró corriendo a la habitación.
La sorpresa cruzó por el rostro de Gong Wu Mei. "¿Cómo pasaron la cadena de hierro? ¿No dije que desataran la cadena cada vez que esas sectas vinieran a atacarnos? ¿Por qué permitieron que esas personas llegaran aquí?
"¿No envié gente para proteger el puente? ¿¡Qué pasó exactamente!?" gritó Gong Wu Mei enojado, su cuerpo emitió otra ola de un hedor insoportable.
Interiormente, Ning Shu suspiró aliviada. Mierda, esas personas finalmente estaban aquí, luego hizo todo lo posible para disminuir su presencia, tan pronto como Gong Wu Mei saliera de esta habitación, se iría rápidamente.
Gong Wu Mei ya no podía molestarse en preocuparse por el goteo de su mitad inferior ya que el enemigo ya había llegado a su puerta, dio unos pasos hacia adelante, luego se dio la vuelta para agarrar a Ning Shu por el cuello y arrastrarla hacia la entrada de la cueva.
Ning Shu: …
¿Por qué estaba llevando, a una doncella débil, a una batalla? Ella no tenía fuerza de combate en absoluto, ¿para qué la llevaba? Ning Shu sintió ganas de morir.
Cuando llegaron a la entrada de la cueva, ya había mucha gente allí, todas las personas tenían atuendos diferentes y algunas portaban banderas que indicaban su facción.
La gente de la Secta Demoníaca se estaba defendiendo actualmente de los ataques de estas sectas ortodoxas, cuando vieron que el líder de su secta había llegado, inmediatamente gritaron: "¡Líder de secta!"
Ambos lados detuvieron simultáneamente sus ataques, la expresión de Gong Wu Mei era sombría cuando asimilaba esto, había establecido contramedidas cuidadosas, pero estas personas aún habían podido pasar la cadena de hierro, la única explicación para esto era que tenían un traidor.
La mirada severa de Gong Wu Mei recorrió los rostros de los seguidores de la Secta Demoníaca.
Ning Shu quería irse, pero Gong Wu Mei todavía la sujetaba con fuerza por el cuello, mientras estaba de pie frente a los dos bandos que estaban a punto de luchar, Ning Shu, que solo tenía la habilidad de combate basura, expresó que sus rodillas se estaban debilitando, si la práctica de las Artes Marciales Insuperables realmente funcionara, ya habría embestido contra la multitud, blandiendo un látigo con púas invertidas sin tener en cuenta la tierra de nadie, pero su cuerpo estaba lamentablemente débil en este momento...
Mierda, Gong Wu Mei no podría estar planeando hacerla morir con él, ¿verdad?
Alguien dio un paso adelante desde el lado ortodoxo, llevaba un atuendo azul de artes marciales y emitía un aura de rectitud con solo pararse allí.
Sus rasgos faciales eran claros y fuertes, con un puente nasal muy recto, era un jefe de la alianza de artes marciales muy guapo.
Cuando Gong Wu Mei vio a este hombre, dijo con frialdad: "Yan Nan Zhu, siempre me he ocupado de mis propios asuntos y no me involucré con la comunidad de artes marciales, pero has traído gente para atacar mi palacio. ¿Estás tratando de iniciar una guerra?
"Gong Wu Mei. Tu Secta Demoníaca tiraniza a la gente, matando a los inocentes y saqueando sus hogares, además, has secuestrado a innumerables mujeres y las has mantenido cautivas aquí en tu Palacio Wu Yang". Yan Nan Zhu dijo en voz alta: "¿Podría ser que deberíamos seguir dejándote hacer lo que quieras?"
Mientras Ning Shu escuchaba este discurso, realmente quería gritar '¡por favor, sálvame!' Sin embargo, como estaba justo al lado de Gong Wu Mei, mantuvo la boca cerrada con mucho tacto.
"¿Tu quieres matarme? ¿Un grupo de debiluchos juntos como tú? Que broma." El cabello de Gong Wu Mei se levantó ligeramente a pesar de que no había viento, su expresión era demoniacamente encantadora mientras su cuerpo emitía un aura intensa y despiadada.
Yan Nan Zhu se paró enfrente y dijo: "Gong Wu Mei, has cometido atrocidades sangrientas que claman justicia al cielo. Sin embargo, si cesas y desistes, te dejaremos vivir".
Mientras Ning Shu escuchaba esto, sintió que Yan Nan Zhu era como un tío policía al estilo de la era antigua.
"¿Quieres que me deje capturar pacíficamente? Yan Nan Zhu, ¿hay algún problema con tu cabeza? Dejen de fingir rectitud, ustedes solo quieren saquear los tesoros de mi Palacio Wu Yang, la codicia en sus ojos es clara como el día, repugnantes 'sectas ortodoxas'".
"Gong Wu Mei, amasaste tu riqueza a través de matar personas y el saqueo". Yan Nan Zhu frunció el ceño.
Gong Wu Mei se rió a carcajadas. "Lo gané saqueando, pero ¿y ustedes, chicos? ¿No están tratando de hacer lo mismo actualmente?
"Esto no es lo mismo". Yan Nan Zhu negó con la cabeza.
"¿Qué tiene de diferente? Aunque estén marchando bajo la bandera de la justicia, en realidad, sus acciones son las mismas que las mías", dijo Gong Wu Mei con una sonrisa fría.
Ning Shu: …
¿Por qué carajo? ¡Si vas a pelear, pelea ya! ¿Por qué hablas tanto? ¿Cuál es el punto de hablar?
"Jefe de la Alianza Yan, deberíamos destruir este nido de demonios para restaurar el orden del mundo".
"¡Así es! La gente de la Secta Demoníaca no siente nada, incluso cuando matan personas, no sirve de nada hablar con ellos, ya están más allá de la salvación.
La gente de las sectas ortodoxas también parecía estar hartas de estas dos charlas interminables y ya querían atacar.
Ning Shu estaba de pie junto a Gong Wu Mei, por lo que podía sentir que su cuerpo temblaba ligeramente, sus ojos estaban inyectados en sangre y aunque su aura era fuerte, era muy caótica, las heridas internas de Gong Wu Mei habían estallado.
"Gong Wu Mei, ya que te niegas a cambiar tu forma de ser, no deberías culparme por no ser cortés, todos, maten a todos los discípulos de la Secta Demoníaca, pero capturen vivo a Gong Wu Mei, si no es posible capturarlo con vida, matenlo".
"¡Matar! Destrozar este nido de demonios…"
"¡Matar! defender la justicia…"
Las sectas ortodoxas comenzaron a gritar sus consignas mientras corrían hacia los discípulos de la Secta Demoníaca, los dos lados pronto se enfrentaron y comenzaron a pelear.
Mientras tanto, Gong Wu Mei y Yan Nan Zhu se enfrentaron desde la distancia, por el momento, ninguno de ellos se movió y solo vio pelear a sus subordinados.
Ning Shu: …
¿¡Cómo se suponía que iba a escapar así!?