Narra Ailie
+Los molestos exámenes habían terminado y podía ver como la noche caía lentamente cuando alguien tocó a mi puerta.
-TOC-TOC-
¬¿Podemos pasar?
+Inesperadamente vi a Catalina y Michael entrar por la puerta -chicos, ¿qué hacen aquí?-.
¬Nos dijeron que te habían internado.
+Rodrigo.
¬No lo culpes, él solo está preocupado por ti.
+Catalina era la única que hablaba mientras que Michael solo estaba detrás de ella mirándome.
¬¿Cómo te sientes?
+Solo con mareos y agotamiento, como si todo el tiempo tuviera sueño.
¬Ya veo.
+Pensé que todo iba bien pero-.
>¡Lo siento!
+¡¿Qué?! -Michael se acercó-.
>¡Perdóname por como te trate!, ¡pensé que si te despreciaba te lastimaría pero eso no me hizo sentir mejor!, ¡por favor no te vayas tú también!.
+Michael yo…
>¡Se que lo que te dije fue muy cruel!, ¡y no estuvo bien!, ¡es solo que-! -¡snif!-.
+¡Michel! -luego de eso me tomó de la mano mientras que por sus ojos caían pequeñas lágrimas y luchaba por contener el llanto- Michael, lo siento.
>¡No!, ¡no hagas eso!, ¡no te disculpes!, ¡tú….tú no puedes morir también!
+Michel de solo tomar mi mano se agachó y la puso sobre su frente mientras eventualmente comenzaba a llorar.
>¡Si tan solo yo…!
+Por favor perdóname, aquel día yo también dije cosas muy crueles, no fue tu culpa tampoco, después de todo él que lastimó a Alec fui yo.
¬Ninguno de los dos tuvo la culpa, ninguno hizo algo con el propósito de lastimarlo, hasta donde se...hasta donde se yo también participe en emparejarlos y no lo hicimos con un objetivo que lastimara a Alec, al contrario, lo hicimos porque solo queríamos verlo feliz.
+Pero eso no cambia el hecho de que yo sea un asesino.
¬¡Ailie!
+Es la verdad, maté a nuestros hijos, si yo…
¬¡Basta!, ¡eso no es verdad!
+¡Yo…!, ¡chicos yo…!, ¡yo realmente quería tener una familia!, ¡cuando me enteré de mi embarazo, un gran sentimiento de felicidad inundó mi corazón!, ¡pero fui cobarde!, ¡yo….!
>¿Qué quieres decir?
+¡Yo…yo quería tener a mis bebés!
>¡¿Pero entonces por qué…?!
+¡Por cobarde!, ¡soy consciente de lo que está mal conmigo!, cuando me dieron la noticia de que estaba en cinta no pude sentirme más feliz, el solo pensar que habría dos pequeños que pudiesen parecerse a Alec me alegraba la vida, pero enseguida un gran sentimiento de miedo me invadió, sé que lo que voy a decir no justifica nada, pero tenía miedo de lastimarlos, de decepcionarlos, no solo a ellos si no Alec también, realmente quería darlos a luz, pero ¿y si me equivocaba?, ¿y si estaba siendo egoísta?.
¬¡¿Por qué sería egoísta?!
+¿Qué pasaría si por mi codicia terminaba siendo un mal padre?, ¿y si no era suficiente?, ¿cómo podría ver a esos pequeños a la cara cuando los he lastimado?, ¿cómo seré un buen padre si no tengo ni la más mínima idea de como ser uno?
>¡¿Cómo puedes decir algo así?!, ¡Ailie, nadie llega a este mundo sabiendo ser padre!
+¡!
>¡¿Cómo podrías ser un mal padre cuando para empezar querías tenerlos?!
¬¡El simple hecho de tener miedo a lastimarlos es lo que te habría dado fuerzas para amarlos!, ¡es lo que te habría dado el impulso para ser cada día un buen padre!
>¡Y no habrías estado solo, Alec iba a estar junto a ti durante todo el proceso!
+En ese instante el llanto que había contenido hace apenas unas horas se desbordó en este momento -¡fui un tonto!, ¡deje que mi resentimiento y miedo me arrebataran lo más valioso que pude haber tenido!, ¡por un momento estuve tentado a decirle todo a Alec!, ¡pero ni apenas me enteré del testamento de su abuelo y las condiciones que Alec debía cumplir, me sentí furioso!, ¡yo…!
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Narra Catalina
¬Ya iba de regreso a casa pues Michael decidió quedarse con Ailie esta noche para que no se sintiera solo, no puedo creer que Ailie estuviese cargando con todos esos sentimientos durante todo este tiempo.
-Brrr-brrr-
¬¿Hola?
A: Catalina, hija, ¿en dónde están?
¬Voy del hospital mamá.
A: ¡¿Qué?!, ¡¿estás bien?!, ¡¿pasó algo?!, ¡¿y tu hermano?!
¬Tranquila mamá, Michael está bien, se quedó con Ailie.
A: ¿Acaso Ailie está mal?
¬No particularmente, pero no está bien del todo tampoco.
A: Ya veo, llega con cuidado, Jía está en casa.
¬¡¿Jía?!
A: Si.
¬Está bien mamá, llegó en un rato.
-Bep-
¬Con que Jía, ha pasado mucho tiempo, después de la muerte de Alec ella quedó devastada y peor aún porque cuando él murió ella ni siquiera estaba en el país, llegó una semana después del entierro, nos enteramos por su padre que lloraba mucho y tenía terrores nocturnos y lo entiendo…entre Alec y ella nos criaron a Michael y a mi cuando mis padres no podían cuidarnos, era como otra hermana, luego de la muerte de Alec tuvo un cuadro depresivo severo y fue medicada, tiempo después volvieron a enviarla al extranjero.
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-En casa-
¬Ya llegue.
A: Hola hija, ¿cómo estás?
¬Solo un poco cansada, ¿en dónde está Jía?
A: En la sala.
¬Bien, iré a verla -entré y dejé mis cosas, me dirigí a ver a Jía quien estaba en la sala sentada de espaldas- hola.
=¡Catalina!
¬En cuanto me vio corrió a abrazarme.
=¡Los he extrañado mucho!, ¡pero mírate!, ¡este vestido rojo te queda precioso!
¬Muchas gracias -Jía está muy delgada, parece que al final no está del todo bien-.
=¿Y Michael dónde está?
¬Él está con Ailie en el hospital.
=¿Estás hablando de…?
¬Si.
=¿Entonces lo han perdonado?
¬Primero vamos a sentarnos, ¿te parece?
=Si.
¬Ambas nos sentamos y nos servimos un poco de té.
=¿Y bien?
¬Respecto a ello, realmente no diría que hubo algo que perdonar desde el inicio, Ailie no fue quien mató a Alec, solo fue un evento desafortunado en el cual desgraciadamente mi hermano murió.
=Pero Cati, fue por su elección que Alec murió.
¬Entiendo tu resentimiento, pero si fuese como dices, ¿entonces por qué sigues viva?
=¡¿Qué?!
¬Jía, ¿acaso no recuerdas que estuviste en una situación igual a la de Ailie hace doce años?, si fuese como dices después de haber interrumpido tu embarazo debiste ser asesinada.
=¡¿Cómo….cómo puedes decirme algo así?!, ¡sabiendo lo que pasé!, ¡¿cómo te atreves?!
¬Y justo por lo que pasaste no deberías emitir ese juicio contra Ailie, estas diciendo que un aborto es un boleto directo a ser asesinado cuando no es verdad, Ailie nos ha contado todo lo que pasó aquel día, él no tuvo ningún control sobre toda esa cadena de eventos, él no sabía que lo llamarían, él no sabía que esa carta era del hospital, él no sabia que Alec llegaría antes para empezar, él no sabía que había dementes buscando a mi hermano por lo que ocurrió en Alemania, es más, Ailie ni siquiera sabía que es lo que había ocurrido en Alemania, ¿como puede ser su culpa?.
=¡Pero…!
¬Lo entiendo Jía, créeme que yo mejor que nadie lo entiendo, yo era su hermana, yo vi su cuerpo, yo lo vi antes de ser enterrado y aun así aunque hubiese querido odiar a Ailie no podía, porque el simple hecho de hacerlo hacía que tuviera un enorme peso en mi pecho, Ailie me consoló durante el funeral, me pidió perdón por algo que él no hizo, no justifico las acciones tan egoístas que tuvo con Alec, pero puedo comprender porque es así, él solo tiene miedo, se siente solo, no podría siquiera estar junto a él si no fuese porque a pesar de sentirse avergonzado él admitió que la forma en como trato a Alec fue cruel y que si tan solo se hubiese esforzado un poco más y dejar el miedo de lado tal vez todo hubiese sido diferente.
=Pero…¿entonces por qué yo no puedo hacerlo?
¬Cada proceso es diferente, Michael apenas hace una hora pudo volver a aceptarlo por completo, pero podía ver como el sentimiento lo consumía, ni Michael ni yo fuimos criados para odiar a las personas, tú y Alec nos criaron de esa manera.
=Pero no puedes hacer como si nada hubiese pasado, ¿me estás diciendo que perdonas a los asesinos de Alec?, ¿acaso puedes tratarlos como seres humanos?
¬Es algo complejo, a veces no perdonas a las personas porque merezcan ser perdonadas, lo haces porque eventualmente el odio hacia ellas te termina consumiendo, porque de repente basas tu bienestar en ellos.
=¿A qué te refieres?
¬Si, si ves a esas personas terminas poniéndote de mal humor, te sientes herido porque piensas que el castigo no fue justo o suficiente, a lo más mínimo que tenga que ver con esas personas simplemente te afecta o arruina tú día, y dime, ¿crees que a ellos les importa?
=No.
¬Al contrario, se regocijan de que siguen haciéndote daño, más que perdonar siento que es ignorar su existencia, ahora están en prisión y aunque eso no nos regresará a Alec simplemente no me interesa que ocurra con ellos, su objetivo es herir, lastimar, pero si seguimos adelante, podemos llegar a ser felices y entonces su objetivo se pierde, en mi opinión eso es mucho mejor, no te pediré que aceptes a Ailie y lamento si lo que dije hace unos instantes te lastimo de alguna forma yo…
=No, entiendo lo que quisiste decir, para ser sincera no lo había visto de esa forma.
¬Lo sé, no es fácil, cada persona lo asimila diferente y no te digo que hagas como si fuesen los grandes amigos, como puedes aceptarlo o cómo puedes elegir no verlo y ambas decisiones están bien, siempre y cuando no causen un dolor en tu corazón, puedes elegir perdonarlo y no querer verlo, se que es complejo pero espero puedas comprenderlo en algún momento, no es algo que pueda explicar con palabras, es un sentimiento extraño.
=¿Y cómo sabré cuando esté lista?
¬En mi caso admito que puedo ser un poco ingenua e inocente, pero lo asimile despacio, al inicio sentí que era un compromiso moral, me decía "una buena persona no odia a otros", pero luego caí en cuenta que no siempre tenía que ser buena, que tenía derecho se sentir enojo y hasta de odiar, pero no eternamente, hubo un momento en el que me sentí tranquila, al recordarlo esa ira ya no estaba presente, asumo que con cada persona es diferente, con otros que fueron crueles conmigo a veces solo me pregunto qué habrá sido de ellos pero de una forma desinteresada, como si solo fuesen personas cualquiera.
=¿Cualquiera?
¬Si, como personas que ves pasar por la calle, sabes que existen pero hasta ahí, es como decir "mira, ahí está esa silla", pero solo eso, no sientes nada ante su existencia.
=Es una analogía un poco extraña.
¬Lo sé, ¿pero qué sientes al verla?
=Nada.
¬Pues algo así pasa, no la odias a pesar de que anteriormente te hayas pegado con ella, tampoco la quemaste o vendiste cuando te pegaste con ella y tampoco la amas porque tenga un color bonito.
=Creo que comienzo a entender el punto.
¬Aparte somos humanos, no somos perfectos y por desgracia así como somos capaces de amar somos capaces de lastimar y ambas cosas forman parte de nuestra naturaleza, para ti lo justo es que Ailie se quede solo, aquellos que mataron a Alec pensaron que matarlo era justo por haber perdido sus trabajos, todos juzgamos a los demás y sus acciones con base a nuestros propios principios y desde nuestras realidades, ¿no crees que eso es egoísta?, ¿crees que deberíamos juzgar y castigar a una persona que robó una manzana porque tenía hambre de la misma forma en la que se castigaría a alguien cometió fraude por millones solo por codicia?, digo, el acto es el mismo.
=Supongo que no, pero ¿y entonces estás diciendo que Alec murió de forma justa?.
¬Por supuesto que no, para eso hay un sistema de leyes, para que cosas así no vuelvan a pasar.
=Entiendo.
¬Al final pienso que quienes realmente merecen ser perdonados son a aquellos que se arrepienten de lo que han hecho de corazón y a quienes no, bueno, simplemente es por bienestar personal, el odio finalmente consume a quien lo siente, no a aquel que ha provocado el sentimiento, se que es más fácil decirlo que hacerlo, pero sé lo que sufres y por ello deseo que pronto puedas quitarte esa carga…..
-brrr-brrr-
¬Estaba terminando de hablar con Jía cuando sonó el celular -disculpa, debo atender-.
=Adelante.
¬¿Hola?
>Catalina.
¬¿Michael?, ¿qué pasa?
>Es Ailie.
¬¡¿Le pasó algo?!
>No, lo que pasa es que…
¬Michael no me decía nada, solo se quedó en silencio por un momento -Michael por favor dime que pasa-.
>Hace un momento el doctor vino a verlo, dijeron que había anormalidades sobre la producción de las hormonas en las glándulas, iban a decirle algo a Ailie pero pidió que me sacaran.
¬¿Entonces?
>Alcance a escuchar que el doctor le dijo que solo tenía diez meses.
¬¡¿Diez meses?!, ¿a qué te refieres?
>¡Cata…!, ¡por como lo dijeron creo que diez meses es lo que le queda de vida a Ailie…
¬¡¿Qué?!
-¡PAM!-
=¡Catalina!
¬Dejé caer mi teléfono y estuve a punto de caerme cuando Jía alcanzó a sostenerme.
=¡Cati!, ¡¿qué ocurre?!
¬Sentía mi cuerpo helado, como si me pesara la sangre.
=¡Catalina!
¬Para ese momento yo solo pude abrazar a Jía y soltarme a llorar -¡NO!, ¡NO PUEDE SER!-.
=¡Cati!, ¡¿pero qué pasa?!
¬¡¿Por qué tiene que pasar todo esto?!, ¡no lo entiendo! -¡snif!-¡snif!-
=¡¿Pero qué pasa?!
¬¡Que tal vez Ailie ni siquiera llegue al año!, ¡Jía….Ailie morirá!
=¡¿Qué...?!...