Ya ha pasado un mes y el trabajo de la Srta. Drake es muy bueno para lo que esperaba, lo que no puedo aceptar es que aun no haya caído ante mi ¿acaso es lesbiana?
Algo que me molesta es su cercanía con Sthepeng, es muy molesto... ¿ven? ya me enojé, está arruinando mis planes. -¡Srta. Drake! ¡Drake! ¡Srta. Drake!- O... puede ser bisexual, si es así de pronto yo no sea su tipo, no, imposible... soy el tipo de todas.
-Si Sr. Dorlan- muy hermosa ¿Por qué viste tan bien?
-Mueve mi conferencia de las 10:00am a las 1:00pm... iré a comer con KATHERING- resalto lo ultimo picándole un ojo y sonríe de lado. Hablando de Kathering llevo todo el mes ignorándola,
-Bueno Sr. Dorlan, que lo disfrute- ¿que? ¿acaso no le interesa? que molesta.
-Y... espera, me llevarás a casa hoy- asintió y dio unos pasos hasta llegar a la puerta.
-Con su permiso Sr-
¿Estaré siendo muy insoportable? no se... pero siento que pasa media hora cada que la llamo, no, no es para nada molesto.
-¡Srta. Drake! ¡JESSICA DRAKE VEN A MI OFICINA AHORA!- podrá verse infantil, pero suena genial.
-Sr... ¿en que puedo ayudarlo?- le pido que se aproxime un poco y obedientemente lo hace.
-Llévale un vaso de agua a KATHERING- vuelvo a repetir mi acción de hace 9 minutos.
-Sr. Dorlan la Srta. Roth tiene manos, ella puede ir a la cafetería y sacar un vaso de agua si tiene sed- tomo un vaso y saco de mi jarra.
¿Por qué eres tan difícil ? me ves cada cinco minutos con eso ya deberías enamorarte de mi rostro, ya ríndete.
-Llévale de la MÍA- ella muestra desconcierto en su rostro.
-Pero Sr...-
-Hazlo.- comento demandante y da un gran suspiro.
Necesito verla de nuevo, ¿Qué hace Sthepeng hablando de nuevo con ella?
-¡Srta. Drake! ¡Jessica! ¡Drake! ¡¿ACASO ESTAS SORDA?!- vete inútil.
-James- saluda tomando asiento atrevidamente.
-¿Que haces aquí?- frunzo el ceño.
-Deberías dejarla descansar un poco, ¿tanto quieres que caiga en tu juego?- que entrometido.
-¿Te importa?- arreglo un poco mi traje y tomó unos papeles que puso sobre mi mesa. -
-Ha vuelto- comentó al ver como lanzo la hojas algo furioso.
-¿Cuando llegó?-
-Hace una semana- mi respiración comienza a tornarse acelerada.
Tomo una hoja y saco mi teléfono sin dudarlo marco al número de contacto en esta, buzón... -¡Oye, cuando piensas visitar a papá, no sientes ni una pizca de culpa... eres un malnacido, te voy a encontrar!- tomo mi chaqueta y las llaves de mi auto.
-James, deberías pensarlo un poco- Sthepeng toma mi muñeca.
-Déjame, esto no te incumbe- ese maldito hijo de perra, ¿crees que ese dinero que te dio papá te va durar para siempre? tarde o temprano irás a ver a madre.