En cuanto dijo eso... me emocioné tanto que le dije:
– hablas enserio?
el me sonrió y me dijo:
– si, en cuanto supe que tu lugar favorito era un lago, no dude en rentar una cabaña cerca de uno.
yo lo abracé y le dije:
– muchas gracias de verdad.
el también me abrazo y me dijo:
– no es nada... haré mucho más por ti.
yo solo sonreí...
el encendió el auto y salimos del estacionamiento de la escuela...
al salir me dijo:
– bueno... aquí vamos.
todo el camino miré por la ventana... apenas y conozco Washington... había árboles lindos... humedad por doquier... y a lo lejos se podía apreciar como los rayos del sol trataban de entrar entre las espesas nubes del lugar.
pasaron un par de horas... hasta que llegamos a una carretera... dónde sea que miraba no había más que árboles... y recién comenzaba a oscurecerse...
pasó casi una hora y me dijo:
– ya llegamos.
desde el auto podía ver la cabaña...
el bajo del auto y después abrió la puerta y me ayudó a bajar...
el tomó mi mano y me dijo:
– ya viste la luna?
cuando mire el cielo... mis ojos realmente se deleitaron... pues la luna estaba en su punto... tan brillante y llena... además estaba reflejada en el agua, se veía muy mágico.
le dije:
– es realmente bello.
el me dijo:
– pasaremos aquí el fin de semana...
le dije:
– me lo hubieras dicho antes... no traje nada de ropa.
el sacó una bolsa de el auto y me dijo:
– no te preocupes por eso, te compre algo de ropa...
me dio la bolsa y me dijo:
– espero que sea de tu agrado.
mire dentro de la bolsa y había un saco, jeans, medias, unas lindas sudaderas, ropa interior y un suave abrigo.
entonces le dije:
– no debiste molestarte, suficiente era traerme lago.
el tomo mi mano y me dijo:
– claro que no... quería darte un buen regalo y eso hice.
sonreí y le di un beso... mientras el me tomaba de la cintura...
entramos a la cabaña... era muy hermosa y tenía olor a madera.
sonreí y le dije:
– es muy hermosa.
el se quitó la chamarra y me dijo:
– si... tienes razón.
yo dejé la bolsa sobre la mesa y le dije:
– tenemos que ir a nadar al lago.
me quite el short la sudadera y los tenis y me quedé en ropa interior...
sonreí y le dije:
– te veo afuera.
salí y me puse al filo del lago, respire profundo y cerré mis ojos.
entonces él se acercó a mi y me abrazó por atrás y me agarró el vientre con sus manos y las fue subiendo hasta mi abdomen mientras me besaba la espalda y el cuello...
al sentir eso mi piel se erizó...
cuando por fin me volteé.. pude ver su abdomen totalmente descubierto... y sentí una sensación un poco extraña...
el me tomó de la cintura... entonces... puse mi manos atrás de su cuello y lo besé...
me aparté un poco y fuí entrando al agua poco a poco...
nos pusimos a nadar y a jugar en el agua fue muy divertido y muy lindo.
comenzamos a jugar a perseguirnos... yo nade hasta la orilla y salí del lago...
corrí hasta la cabaña y el iba corriendo detrás de mí...
me oculte en el baño y traté de no hacer ruido... pero el me encontró...
en cuanto me encontró me besó y me cargo, yo lo abrase con mis piernas, y él me empezó a acariciar la espalda...
el fue deslizando su mano lentamente por mi espalda hasta llegar a mi sostén...
el caminó y salimos del baño... y me puso sobre un mueble... me quitó lentamente el sostén... y comenzó a besar mi cuello y a besar mis hombros...
estaba comenzando a sentir como mi cuerpo se calentaba...
él bajo hasta mi pecho y comenzó a besarlo delicadamente... eso me hacía gemir involuntariamente... y eso hacia que el me abrasara con más intensidad.
depronto me sentí algo extraña... y le dije:
– espera... porfavor.
el inmediatamente se detuvo.
yo cubrí mi pecho con mis manos y le dije:
– yo... nunca he hecho con nadie... yo... soy virgen... no puedo.
y él me dijo:
– perdón... me deje llevar, no haremos nada si no quieres.
el tomo una toalla... me cubrió con ella y me dió un beso en la frente...
en ese momento me sentí protegida y segura...
el me tomo de la barbilla y me dijo:
– si quieres... puedes ducharte... yo entraré después.
le dije:
– está bien...
entré a ducharme y una vez ahí reflexione un poco... creí que su impulso sería mucho más grande y no pararía... sin embargo... se detuvo cuando yo le dije...
salí de la ducha y cuando salí él me sonrió y se metió a duchar después.
estaba a punto de vestirme... pero... me puse a pensar en muchas cosas como... me dolerá?, que se sentirá?, será que el va a ser el primero?
avía un espejo y me pare frente a el... me quite la toalla y aprecié mi cuerpo... al instante sentí mucha pena... y volví a cubrirme... y me senté sobre la cama...
recordé esa sensación tan placentera que sentí hace unos minutos y me dije a mi misma...
quiero hacerlo... quiero hacer esto con Dylan... aquí y ahora.
el salió de la ducha con una toalla rodeando su cintura y otra rodeando su cuello...
me puse de pie y el me miró un poco confundido... me dijo:
– la ropa no te gustó?
yo me quedé en silencio... no sabía que decir...
el se acercó a mí y me dijo:
- que pasa?
el se quitó la toalla del cuello y la arrojó a una silla...
yo me pare frente a el... solté mi toalla y está calló al suelo mientras lo tomaba con ambas manos de las mejillas...
me acerque a su rostro y le di un beso...
el me miró y me tomo de las manos... me dijo:
– quieres hacer esto ahora?
moví mi cabeza arriba y abajo y le dije:
– si.
el puso su mano en mi espalda y me ayudó a acostarme sobre la cama...
estaba muy nerviosa...
pero el me miró a los ojos y me dijo:
–tranquila... solo relájate y disfruta.
el comenzó a besar mi cuello y fue bajando hasta el pecho... mi abdomen... y fue bajando mas, y más... separó mis piernas... puso su rostro enmedio de ellas y comenzó a hacer maravillas con la boca... se sentía tan bien, que comenzé a gemir.
estaba cubriendo mis pechos con mis manos...
después fue subiendo nuevamente hasta mi cuello...
puso su cintura entre mis piernas...
tomó mis manos y me dijo:
– tu cuerpo es hermoso no lo cubras.
puso una de mis manos a la altura de mi cuello... puso su mano sobre mi muñeca...
yo respiré profundo y no dejé de mirar su ojos... me daban tranquilidad...
el dirigió su mano a la parte de abajo... me frotó ligeramente con sus dedos... y sentí como comenzó a entrar en mí.