-Bien hoy te enseñaré cosas básicas para que puedas ser un buen funcionario de la embajada, cada clase durará una hora, intentaré que sea lo menos pesado posible, tienes geografía, economía, el idioma de mi país, modales básicos y artes marciales, son solo 5 horas el resto del día lo tendrás libre, al haberte comprado eres mío y he decidido que seas un funcionario de mi país y por lo tanto tienes inmunidad política, desgraciadamente no podre estar mucho tiempo contigo así que mis sirvientes te enseñaran todo menos las artes marciales que lo haré yo- El omega albino se quedó mirándome extrañado, creo que es la primera vez que lo tratan como a una persona...
/no se leer ni escribir.../ Su voz es suave y muy dulce, me recuerda a mi antes de tener que tomar esta responsabilidad
-cierto lo olvidaba, en idiomas se te enseñara a leer y a escribir en ambos idiomas y en economía se te enseñaran matemáticas básicas-
/gracias... por todo.../
-De nada en lugares como este los omegas se tienen que apoyar entre ellos ¿no? Puedes coger la ropa que quieras de mi armario, las joyas por motivos de seguridad no las lleves- El omega asintió
-¿Cómo te llamas?-
/No tengo nombre, el amo es el que pone el nombre a sus esclavos/
-Bien pues te llamaré Aica, significa sabiduría- La cara de Aica se iluminó con una gran sonrisa, ver cómo le he salvado la vida a alguien me reconforta mucho
-Bueno tengo que irme nos veremos en 4h para entrenar- Dicho eso salí de la habitación y me dirigí a la biblioteca del palacio, si quiero comerciar y cambiar una cultura primero tengo que entenderla, además podre saber su nivel tecnológico y eso será muy útil en caso de guerra
No podía creerlo, había un nivel de tecnología más avanzado de lo que creía, son expertos en metalurgia y en orfebrería, sus joyas se ven mucho más bonitas y mejor hechas que las de mi país, ese es un buen sector para comerciar, tienen una religión con varios dioses casi todos alfas menos obviamente el dios de la fertilidad que tenía que ser omega, es un reino grande con mucha tradición, no son tan salvajes como pensaba aunque en lo social les falta mucho
Mi lectura fue interrumpida por Azai, debió de detectar mi aroma
^Mira a quien tenemos por aquí si es Shilé^ Últimamente su olor me pone de los nervios, no me molesta su olor ni nada de eso al contrario me agrada y es por eso que me pone de los nervios
-Buenos días su majestad- dije cortésmente, no quiero discusiones a esta hora de la mañana
^Me pregunte donde estaría nuestro invitado porque faltó al desayuno...^ Su mano rozo mi hombro derecho y empezó a bajar por mi pecho hasta llegar a mi pezón, sus manos son muy cálidas y su aroma... su aroma es genial... cuando empezaba a perder el control sobre mí mismo reaccione
- ¡Para! ¿¡Estás en celo!?-
^Si y solo puedo pensar en ti, me duele mucho haz que deje de dolerme^ Me fije en el gran bulto de sus pantalones, era enorme... pero no voy a caer así, antes de que pudiese hacer nada salí corriendo con el corazón a 1000 y me encerré en la habitación.
De repente me empecé a calentar y el lubricante natural de mi entrada se empezó a resbalar por mis piernas
-ese alfa... ah... me ha provocado el celo...- No pude más y caí ante el celo, llevé mis dedos a mi entrada y lentamente los metí haciendo que un grito de placer saliese de mí, mis dedos se movían una y otra vez dentro de mí y de repente grite algo de lo que me arrepentiría después
- Ahhhh... Azai... mmmm...-
Después de todo el día encerrado masturbándome me dormí por agotamiento dejando la cama empapada de lubricante, con un poco de suerte se me quitará mañana...
La mano de Azai se dirigió a mi entrada, la acarició un poco y de repente metió un dedo
-Ahhhh... más, más por favor...-
Sentí un segundo dedo entrar y moverse dentro de mi
-mmmmm... para... no quiero mas dedos quiero sentirte dentro de mí...-
En menos de un segundo Azai sacó los dedos y se posicionó encima de mi y de una sola estocada metió su enorme miembro dentro de mí, grité, dolía pero a la vez era lo más placentero que había sentido nunca, no tardó mucho en moverse dándome embestidas fuertes y profundas, me agarré al cabecero de la cama para hacer fuerza con los brazos y que no me empujase con las fuertes embestidas, de repente lo noté
-Ahhhhhhh- había encontrado ese punto tan especial, sentí que podía tocar el paraíso, una de sus manos me cogió de la cadera para que no me pudiera mover por las embestidas y con la otra me cogió un pezón y empezó a jugar con él, en ese momento no aguante más y me vine, ya no podía mas ya estaba cansado pero él no paró me dio la vuelta poniéndome en 4 y me la volvió a meter de golpe, jamás me había sentido tan lleno, sentía que me iba a partir, me cogió de los brazos y tirando de ellos empezó a embestir más rápido y más fuerte que antes, cuando sentia que iba a explotar por la mezcla de placer y dolor lo noté, una cantidad increíble de líquido espeso inundaba mi interior a la vez que el nudo se formaba
Desperté sobresaltado y excitado, estaba muy lubricado, mi celo se había pasado, al ser provocado solo dura un día, pero la confusión se apoderó de mí, ese alfa ha podido provocarme un celo y según lo que me han enseñado en clases de biología solo significa una cosa...
Ese alfa, ese alfa que tan mal trata a los omegas es mi compañero destinado.