Aldea Sirshen, nombrada así por el fundador de la aldea Nicolas Sirshen, como cualquier otra aldea rural en el imperio, se mantenía de la venta de sus cosechas, se podía considerar una aldea prospera, el bosque del árbol blanco les proporcionaba ingresos extra como hierbas y otros pequeños recursos. Esto mantenía los ingresos de sus pobladores por encima del promedio.
Por supuesto, las cercanías del bosque también tenían sus desventajas, una vez cada tanto tiempo, los seres que lo habitaban, se atrevían a incursionar en la aldea, provocando uno que otro problema.
Dado su estilo de vida, las personas en esta aldea siempre tuvieron un carácter concordante con esta. En pocas palabras, eran gente de actitud difícil.
―No necesitamos su ayuda.
Adrion coloco los dedos sobre su frente.
Brand ya llevaba cerca de treinta minutos en eso, el viejo líder de la aldea ya había repetido esa misma frase quien sabe cuántas veces.
―Señor Jhon, como ya le dije, venimos por parte del gremio, esta misión no tendrá costos o repercusiones en su aldea, venimos únicamente con la intención de ayudar.
A Adrion le pareció sorprendente como Brand lograba mantener su actitud amable y respetuosa después de tanto tiempo, por su parte, el resto del equipo se mantuvo detrás mientras él hablaba.
Detrás del líder de la aldea se encontraba una mujer de una edad similar al líder, ella miraba el desarrollo con una cara amable, la cual no había cambiado en ningún momento, probablemente era su esposa.
―No tenemos comida ni refugio para ustedes.
Atsuki ya estaba cerca de alcanzar su límite, si no fuera porque no era su señor quien recibía los insultos directamente, ella ya estaría golpeando a ese hombre.
―Por supuesto, no nos atreveríamos a pedir nada de eso gratis, si solo nos permitiera acampar en las cercanías del pueblo y respondiera unas preguntas, eso sería suficiente.
El líder de la aldea mantuvo la misma expresión y cuando parecía que seguiría con la misma respuesta, alguien intervino.
―Creo que podemos aceptar eso.
Fue la mujer al lado del líder del pueblo.
―Pero…
El hombre hizo una mueca cuando escucho las palabras de la anciana.
―Está bien, es esa época del año, necesitamos ayudarnos los unos a los otros.
Antes de que el hombre pudiera replicar, Brand aprovecho para continuar su discurso.
―Nos libraremos de los goblins lo más rápido que podamos, no seremos una molestia mientras permanezcamos aquí, le doy mi palabra.
Aunque el jefe de la aldea no se mostraba convencido del todo, parecía que la decisión estaba tomada.
Adrion solo pudo pensar que Brand sería un gran empleado si lo colocaban en un puesto de servicio al cliente, sin duda tenía las actitudes para eso.
Después de ese movimiento, el rumbo de la conversación fue bastante más suave, incluso lograron tomar prestado un granero para pasar la noche.
―Buen trabajo a todos.
Brand fue el último en llegar, en la negociación anterior, se separaron para examinar el área donde se quedarían.
―Buen trabajo.
Los miembros del grupo respondieron del mismo modo al verlo llegar, Brand se quedó junto al jefe de la aldea para terminar los últimos detalles, mientras el resto limpiaban un poco el granero.
Al principio, Atsuki mostro deseos de encargarse de todas las tareas por Adrion, pero rápidamente la rechazo, solo requirió el movimiento de la paja, costales y lo que parecía ser un equipo de arado, no fue la gran cosa.
Adrion estaba agradecido de poder usar el granero, no tenía nada que ver con no querer dormir a la intemperie, llevaban tiendas de campaña para tales propósitos, el problema era que no tenía idea de cómo armar una, podría dejar que Atsuki se encargara de eso, pero tal acción sería muy vergonzosa.
―Nos encargaremos de la cena.
―Nosotros podemos…
―No hay necesidad, deja a tus mayores mostrar sus capacidades.
Helena parecía estar empeñada en tomar el trabajo, así que Adrion lo dejaría ser.
―Entonces se lo encargo.
Ellas salieron después de tomar los materiales necesarios, parecía que su grupo estaba muy bien preparado, Adrion y Atsuki solo llevaban el equipo básico recomendado por el gremio, seguro estaban faltos en muchos aspectos.
Para sorpresa de cualquiera, Adrion era capaz de comer, del mismo modo, Atsuki era capaz de consumir alimentos humanos, el juego contaba con un sistema para adquirir mejoras temporales a través de diferentes alimentos. Pero aún se sentía extraño que un espectro como él pudiera alimentarse.
Él mismo se dio la tarea de experimentarlo, pidió comida al cocinero de la fortaleza para comprobarlo, y efectivamente el sistema de alimentos de la fortaleza funcionaba. El único problema era la forma en que cumplía con su objetivo, cuando se alimentaba, extraía una neblina gris que se dirigía a donde estaría su boca. Dejando una ceniza negra en el plato al terminar.
De esta manera él lograba saborear los alimentos, pero el problema era claro, no debía mostrar esto a las demás personas.
Adrion recordó los rituales funerarios sobre dejar comida a los muertos que tenían algunas culturas, se supone que los muertos extraían la vitalidad de los alimentos, probablemente se trataba de algo como eso.