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Chapter 4 - Misión de Recolección

Mientras esperaba para encontrarme con el grupo de aventureros, aproveché para indagar un poco en el menú, al parecer tengo tres sub-menú aparte del de "Estado", que son: "Magia", "Habilidades" y "Encargos".

El sub-menú "Magia" indica cuales hechizos he aprendido y el porcentaje de maestría de cada uno, parece ser que cuando he dominado un hechizo, puedo aumentar su rango, haciendo que sea más potente y que consuma menos poder magico(él cual no he encontrado por ningún lado). También muestra con cuales elementos tengo afinidad, tengo una gran afinidad para los hechizo que sean de fuego y tierra. Por el momento sólo puedo usar dos hechizo que son los más básicos de sus elementos, estos serían: [Bola de fuego] y [Muro de tierra], ambos de Nivel 1.

En "Habilidades" descubrí que poseo dos habilidades pasivas que son de gran ayuda, esas serian: [Curación acelerada] y [Compresión de lenguajes]. Y también poseo dos habilidades activas, una se llama [Espia], esta me permite revelar el estado de cualquier personas, siempre y cuando esté viéndola. Y [La maldición de Lucifer], de la cual no pude obtener ninguna descripción, cuando intentaba averiguar los efectos, se mostraba un mensaje diciendo "Se activará cuando se cumplan los requisitos", pero en ninguna parte decía cuales eran los requisitos, lo que me dejaba bastante intrigado.

Y el sub-menú de "Encargos" me muestra los detalles de los encargos que acepto en el gremio. Allí puedo ver cuales son los requisitos para cumplir dicho encargo, la persona que lo encargó y la recompensa que será otorgada al cumplirla. La recompensa de esta misión es de 100 monedas de bronce o una de plata, como seriamos 4 personas tendríamos que buscar la forma de repartirlas equitativamente, lo más seguro tendré que dejar que el otro grupo se lleve la mayor parte, ya que se harán cargo de casi toda la misión, pero no por eso me quedare sin algo a cambio, como mínimo quiero 20 monedas de bronce. Digo que la repartiremos entre 4 personas porque dudo que Sofia tenga la más mínima intención de ayudarnos, así que no la incluí en la ecuación.

La hora paso volando mientras revisaba el menú, ya casi era hora de encontrarme con los aventureros, así que me dirigí a la entrada junto a Sofia, que insistió en acompañarme porque era "su deber", pero esa mentira no me la trago.

De camino a la entrada encontré una posada, pasar la noche en una habitación individual costaba 3 monedas de bronce y una habitación doble o matrimonial costaba 5 monedas de bronce. Cada comida costaría 1 o 2 monedas de bronce dependiendo de la calidad o cantidad, por lo que como máximo, mis gastos diarios serian de 11 monedas de bronce, tendré que seguir haciendo misiones si quiero reunir para comprar una espada y una armadura.

Tras caminar un par de minutos más, llegamos a la entrada del pueblo, a una metros del cartel de bienvenida habían tres personas con armas y armaduras, supuse inmediatamente que eran el grupo que me acompañarían. Decidí que este era el momento exacto para probar mi habilidad [Espía], por suerte para mi, no tengo que seguir un largo procedimiento o recitar un largo conjuro para utilizar la magia o las habilidades, solo tenia que pensar o decir el nombre de la habilidad y esta se habilitará.

Primero la usé con el hombre de cabello negro gran altura que estaba en medio del trío, de lejos parecía ser más fuerte, usaba una reluciente armadura negra con retoques dorados y empuñaba una singular lanza que hacía juego con su armadura.

Nombre: Greg Barton

Edad: 32 años

Raza: Humano

Clase: Lancero

Nivel 27

Debo decir que me siento estafado, solo me deja ver la información básica, pensé que me daría ver las estadísticas, ¡Que decepción! Espero que pueda subirla de nivel a medida que la utilice. Continúe con el de la derecha.

Nombre: Frank Turner

Edad: 22 años

Raza: Humano

Clase: Berserker/Herrero

Nivel 23

Frank, a diferencia de Greg, no era muy alto, su cabello era castaño y sus ojos eran cafés, tenía una mirada de pocos amigos. Sus músculos eran grandes, la gigantesca hacha de un filo que cargaba sobre su hombro derecho lo hacía verse como un matón. Su gruesa armadura azul y plateada cubría casi todo su cuerpo, hacía ruido cada vez que movía una parte de su cuerpo, pude ver su cara gracias a que tenia el casco en la mano izquierda. Procedí a usar [Espía] con la única mujer del grupo.

Nombre: Melany Harper

Edad: 16 años

Raza: Humano

Clase: Arquera/Bruja

Nivel 17

Ella era la única que no usaba armadura, en cambio llevaba un vestido negro y un gorro del mismo color, una bruja en su máximo esplendor, solo le faltaba la escoba. Su cabello plateado, de un tono más oscuro que el de Sofía, le llegaba hasta un poco más de la cintura, sus ojos eran grises y su rostro era tan refinado que enamoraría a cualquiera que la viera. De los tres era la de más bajo nivel, pero ya que es mucho menor que el resto puede que cuando cumpla los 20 pasará el nivel del líder.

Al principio pensé que tener dos clases era poco común, pero viendo que ella también posee dos clases no lo veo tan extraño.

En general el grupo tenia un buen nivel, no entiendo porque enviaron a un equipo tan fuerte a una misión tan sencilla, pero no objetaré, eso significa dinero fácil para mí, además mientras más experiencia tenga el grupo, mejor será para mí, ya que puedo hacer un centenar de preguntas.

Me acerqué a ellos con cierta cautela, no quería dar una primera mala impresión.

- Tu debes ser el novato que se unirá con nosotros a esta misión. Yo soy Greg Barton, líder del equipo. Ellos son Melany y Frank - Dijo, señalando a cada uno. Su tono de voz era fuerte, como esperarías de un lider - Seremos tus compañeros en esta misión.

- Mucho gusto, yo soy Ryan Rosberg, ella es Sofia Lauren, espero que nos llevemos bien.

- ¿Ella también es parte del gremio? - Preguntó Frank, que tenía una voz áspera que combinaba con su apariencia - él gremio solo nos notificó de un aventurero.

- No, ella solo me acompaña, le insistí que se quedará en la ciudad, pero es demasiado terca.

- Ya veo. Bueno, eso no importa, si quiere acompañarnos que lo haga, solo recolectamos algunas hierbas medicinales. Mejor pongámonos en marcha o se nos hará de noche.

Sin mucho rodeo comenzamos a caminar hacia el oeste, hasta llegar a un pequeño bosque, aunque digo pequeño, los árboles no eran muy pequeños que se digan, medían unos 15 o 20 metros cada uno., jamás había visto árboles tan grande en toda mi vida, creo que en mi mundo también habían de este tamaño, pero yo nunca los vi.

Mientras caminábamos Greg fue recolectando las hierbas medicinales que solicitaron, y a la vez recogió algunas que otras hierbas que podrían ser de ayuda a la hora de crear pociones o que se vendierían a un buen precio. Tuvo la amabilidad de decirme como se llaman, me explico para que servían cada una e incluso me dio un estimado de en cuanto podíamos venderlas. También me explico como crear ungüentos y antídotos.

Frank me explico el funcionamiento de las clases. Resulta que en este mundo existen dos tipos de clases: Clases físicas y Clases de apoyo. La clase Berserker que el tenia era considerada netamente de ataque y la clase Herrero se consideraba de apoyo. Según él, cada persona nace con sus clases predeterminada, pero Sofia me comento que los reencarnado podemos elegir una clase cuando llegábamos al nivel 5. Al parecer la clase Aprendiz solo se muestra para no crear confusión en los gremios.

En un par de horas terminamos de recolectar todas las hierbas que no habían socilitado. Fue una misión tranquila, no nos topamos con ningún monstruo y logré aprender un par de cosas importantes.

- Es muy extraño que no haya ningún Lobo Tormenta por aquí, - Comentó Melany, preocupada - Este es uno de sus territorios, usualmente cuando siente la presencia de alguien entrando a él, atacan de inmediato, ¿A donde se habrán ido?

Melany no sólo brindaba apoyo al grupo, sino que tenia un gran conocimiento sobre los monstruos y sus lugares de aparición. Al menos, eso fue lo que dijo Greg.

- Es mejor así, no me gusta estar limpiando la sangre de las armas y las armaduras - Dijo Frank.

- Lastima, me hubiese gustado ver al novato en acción - Comentó Greg, algo decepcionado.

A mi no me hubiese gustado, no quería pasar pena delante de nadie gracias a mi mal manejo del cuchillo. Ni siquiera se agarrar bien el cuchillo, mucho menos podría pelear con un monstruo, puede que tenga las estadísticas de un aventurero, pero no tengo el entrenamiento de uno.

Casi a la salida del bosque nos topamos con un par de lobos grises, supuse que eran Lobos Tormenta, pero a mi me parecían lobos normales. Por alguna extraña razón tenían mancha de sangres en diferentes partes de su cuerpo, puede que hubieran tenido una pelea antes de llegar aquí, pero en su boca no había ningún rastro de sangre.

- ¿Solo un par? - Exclamó Melany, parecía sorprendida por eso - Es demasiado raro ver tan pocos, por lo general suelen atacar en manada.

- Dejemos que el novato se encargue - Dijo Greg, dándome una palmada en la espalda.

- ¿Y-Y-Yo?

- Claro, es el momento de que nos muestres tu talento.

Greg me empujó hacia adelante para encarar al par de lobos. Con temor en todo mi ser, empuña el cuchillo con mi mano derecha que no dejaba de temblar, en algún momento tenía que pelear, así que debo aprovechar que estoy con un grupo experimentado.

Había calmado mi respiración y estaba a punto de lanzarme al ataque, pero antes de lanzarme hacia los lobos, Sofia me detuvo.

- Algo no anda bien con esos lobos - Dijo sin apartar la mirada de ellos.

- ¿Porque lo dices? - Preguntó Frank, confundido por las palabras de Sofia.

- Tienen miedo de algo, además parecen cansado, diría que estaban siendo perseguido por algo más, y varios de ellos murieron antes de llegar aquí, eso explicaría la sangre en su cuerpo.

- Eso es ridículo - Mofó Frank - por estos lados no hay más monstruos.

En el instante en que culminó esa frase, un Minotauro apareció de entre los árboles y agarró a los dos lobos, en cuestión de segundos, los exprimió de un fuerte apretón, derramando una gran cantidad de sangre en sus patas.

- ¡¿Un Minotauro?! - Exclamó Greg, que no podía creer lo que estaba viendo - ¿Que demonios hace por estos lados?

Yo estaba aún más sorprendido que él, era un Minotauro de unos 6 metros aproximadamente, su piel marrón era del mismo color que sus ojos. Se podía ver que estaba lleno de furia y con un fuerte rugió dio a entender que así era.

Me paralice en el instante, mi cuerpo no dejaba de temblar, pero tampoco era el único, los 3 aventureros temblaban temblaban de miedo también. Eso era una mala señal, si ellos estaban así por este monstruos, significa que no pueden derrotarlo o no habían visto ninguno.

El Minotauro soltó al par de lobos y se preparó para arremeter, ya lo había decidido, seriamos sus próximas víctimas. Poniendo en cuatro patas, salió humo de su nariz un par de veces antes de embestir hacia nosotros con sus dos enormes cachos al frente.

- ¡Muevanse! - Gritó Greg, despertándonos a todos del trance en que estábamos.

Con gran facilidad lo esquivamos, por suerte para nosotros, era demasiado lento para por su tamaño, no nos podría embestir tal fácil desde esa distancia, pero si nos llegaba a golpear una sola vez sería nuestro fin, no creo que ni Greg y su pesada armadura sobrevivían a tal ataque.

- ¡Debemos escapar! - Sugirió Frank, que aún temblaba, haciendo sonar su armadura - no podemos ganarle a ese monstruo.

- No podemos hacer eso - Dijo Greg, que era el único tranquilo - si nos vamos ahora ese Minotauro atacará el pueblo más cercano, debemos pararlo aquí.

- Pero eso es imposible, solo aventureros de Rango Bronce o mayor pueden derrotar a esa bestia, nosotros solo estaríamos lanzadonos a la muerte.

- Debes hacerlo, no hay de otra - Greg se volteó a mirarme - Ryan, necesito ue vayas al gremio y avises sobre nuestra situación, dile que envíen refuerzos de inmediato.

No lo dude en ningún momento, deba ir a pedir ayuda ya, era lo único que podía hacer. Mientras ellos llamaban la atención del Minotauro, yo intenté rodearon, pero el Minotauro no quería dejar escapar a nadie, dando un gran salto que no debería ser posible para un cuerpo tan grande, se puso en frente de mi, en ese momento lo supe, esto era pelear o morir.