El niño al escuchar eso detuvo sus pasos, se dio la vuelta lentamente antes de preguntar con la voz aun temblorosa:
"¿Necesita algo de mí, señor bibliotecario?
El bibliotecario se quedó en silencio por un momento, dudando de las siguientes palabras que diría, al final, poco tiempo después, soltó un profundo suspiro.
"Supongo que, si viniste a mi preguntando por manuales y técnicas, entonces ya debes saber qué es lo que necesitas por el momento, pero recuerda mocoso, te prestaré el manual y técnica que escojas por el periodo de 1 mes, lo que comprendas en ese mes depende de ti, eso es todo lo que puedo hacer."
Al escuchar esto, el niño se quedó atónito, en su cara solo había sorpresa e incredulidad, sus ojos vacíos y llorosos recuperaron poco a poco la claridad, le tomó un par de minutos volver prácticamente a la realidad, la cual, al percatarse de ella, saltó de alegría y gritó con todas sus fuerzas:
"¡MUCHAS GRACIAS, MAYOR!"
El bibliotecario, al ver el comportamiento del niño, se sintió bastante feliz, su anterior culpabilidad había desaparecido solo con ese agradecimiento, y, aunque no sabía que tanto de todo lo que pidiera el niño lograría aprender, sabía que hizo todo lo posible para ayudar a un muchacho que le había traído algo de alegría a su monótona vida.
"Hmph, mocoso no te pongas tan engreído, después de todo solo tienes 1 mes y dependiendo de la técnica o método de cultivo que elijas, comprenderlos completamente puede ir muy fácil a imposible."
Como un baldazo de agua fría, el niño se calmó un poco, aunque aún había destellos de felicidad en sus ojos, en su corazón él sabía y recordaría el gran favor que le hizo el bibliotecario, por lo que decidió aprovechar al máximo esta oportunidad.
"Tienes razón mayor, pero aun así quiero agradecerle, sin usted no tendría ninguna posibilidad de cambiar mi destino, a partir de ahora, si triunfo o no dependerá completamente de mí mismo."
El bibliotecario, al ver que el niño finalmente se había calmado, suspiró para sus adentros, después de todo, el niño tenía razón, si sobrevivía o no, dependía totalmente de él a partir de ahora.
"Mocoso, basta ya de charla y decide primero qué manual de cultivo necesitas"
Al escuchar al bibliotecario hacer la pregunta, el niño pensó un momento antes de responder:
"Si no es mucha molestia, me gustaría que me dijera cuantos manuales de cultivo tiene de acuerdo por sus rangos".
Los manuales de cultivo, por lo que había leído el niño hace un tiempo, se dividían en 6 categorías:
Humano, tierra, cielo, divino, inmortal y antiguo, siendo éste último extremadamente raro, ya que son manuales que solo se podían encontrar y no buscar.
Los manuales de cultivo de rango divino e inmortal no difieren mucho entre sí, lo que los diferencia es que los manuales de rango inmortal provienen de una época anterior para luego ser adaptado y adecuado para el cultivo actual, y los de rango divino fueron creados por potencias de esta era de cultivo. Estos son destinados a los genios demoniacos de una familia y que, además, han probado que son leales a ésta, genios que, en un futuro, se convertirán en la base de la familia, eso y que dichos manuales son considerados como la fundación de una familia, en el caso de la familia Aegis, tienen su propio manual de cultivo que combina perfectamente con su línea de sangre.
Los manuales de cultivo de rango tierra y cielo son los más comunes en Kunlun, generalmente, las familias menores daban a sus juniors manuales de rango tierra y si destacaban como genios, les darían un manual de rango cielo.
Los manuales de cultivo de rango humano son más comúnmente usados por la mayoría de los cultivadores que se inician en los reinos inferiores, en donde un manual de cultivo de rango cielo es tan raro como un manual de rango divino, y en Kunlun, casi no existe manual de este rango.
Por lo que, el bibliotecario, al escuchar la pregunta del niño, se rio con desdén.
"Ja ja ja, mocoso, mejor no escupas al sol sino quieres que te caiga en el rostro, conozco tus intenciones, así que para evitar alargar más esto, te diré que la familia Aegis tiene 9 manuales de cultivo de rango divino, cientos de rango cielo y unos miles de rango tierra."
El niño al escuchar las primeras palabras del bibliotecario, se avergonzó un poco, la verdad era que quería sondear si la familia tenía algún manual de rango antiguo, y aunque al parecer no tenía uno, se sorprendió mucho al escuchar la cantidad de manuales que la familia guardaba, el hecho que tuviera 9 manuales de rango divino era sorprendente, después de todo, cada manual equivalía a la fundación de una nueva familia capaz de igualar a la suya, sin mencionar la cantidad de manuales de rango cielo y tierra.
"Ja ja ja, parece que el mayor ya me ha pillado, así que no haré más el ridículo, en cuanto al manual de cultivo, me podría explicar lo que tengo que tener en cuenta al elegir ¿uno?"
El bibliotecario pensó por un momento antes de responder:
"Ummm, bueno tu caso es bastante especial, te prestaría el manual de rango cielo que la familia designa a todos los juniors que se embarcan en su camino de cultivo, pero debido a que ya no posees tu línea de sangre no te serviría para nada."
"Además, aún no sé cuál es tu afinidad elemental, por lo que recomendarte un manual sin saber eso te podría retrasar en vez de ayudar."
El niño decidió dejar el tema de su línea de sangre de lado, lo más probable es que si todo hubiera seguido sin ese incidente, al final se le hubiera dado el manual de cultivo de nivel divino de la familia, pero no hay "si" en este mundo, por lo que decidió centrarse en lo 2do que mencionó el bibliotecario.
"¿Hay alguna manera de averiguarlo mayor?, ya había leído en los libros sobre ella y siempre me pregunté cuál sería mi afinidad elemental, pero aquí no hay las herramientas adecuadas, por lo que me di por vencido."
"Bueno de hecho sería bastante simple si tuviéramos una perla elemental, pero no es la única forma, ven acércate y coloca tu mano sobre la mesa".
De hecho, el niño sabía sobre la perla elemental, era una herramienta muy usada incluso en los reinos inferiores por su practicidad y por su disponibilidad, la perla era de color blanquecino y cambiaba de color dependiendo de la afinidad elemental que la persona que la tomaba tenía, es decir, si la afinidad de uno era el fuego, la perla cambiaría a un color rojo, si es madera a un azur, si es viento a un verde, etc. Pero debido al hecho de que no había dicha perla en la mansión, el niño se dio por vencido, por lo que al escuchar al bibliotecario tener otro método para saber su afinidad elemental, el niño no dudó en colocar su mano sobre la mesa en el centro de la biblioteca (mesa en donde siempre dejaba los cristales) con una gran anticipación.
Pasaron varios minutos, pero el bibliotecario aún no había dado una respuesta, por lo que el niño, sin poder esperar más, decidió preguntar:
"Y bien mayor, ¿ya sabe cuál es mi afinidad elemental?"
El bibliotecario no respondió de inmediato, lo que impacientó aún más al niño, y justo cuando el niño quería volver a preguntar, el bibliotecario por fin respondió:
"Mocoso, te hace falta ser más paciente, estaba verificando tu afinidad ya que encontré algo bastante extraño, por lo que demoré un poco más."
Al escuchar esto, el niño se preocupó un poco, por lo que decidió preguntar:
"No hay nada de malo con mi afinidad ¿verdad?, o es que no tengo afinidad a ningún ¿elemento?"
El bibliotecario, al ver que el niño empezaba a entrar en pánico, decidió responder rápidamente
"No es eso mocoso, cálmate, ¿a donde se fue toda esa determinación que mostrabas antes eh?, y sí, tienes afinidad elemental, es solo que me sorprendió un poco."
El niño, al escuchar al bibliotecario, se avergonzó un poco, pero la curiosidad hacia su afinidad elemental solo había crecido, por lo que preguntó:
"Entonces dígame mayor, ¿A qué elemento tengo mayor afinidad?
Tomando una ligera pausa, el bibliotecario respondió:
"En cuanto a elementos, tienes una afinidad muy alta a la luz, seguida por el trueno y el fuego"
El niño se sorprendió mucho, por lo que había leído, era muy raro que alguien tuviera una doble afinidad, sin mencionar 3 afinidades, significaría que para cualquiera de los 3 caminos que decidiera seguir, podría progresar el doble de rápido con la mitad de esfuerzo.
Pero pronto el niño también se percató de algo, el bibliotecario había dicho "en cuanto a elementos", ¿a qué se refería exactamente con eso?
Al ver la duda en el rostro del niño que parecía a punto de preguntar, el bibliotecario decidió responder primero.
"Sé lo que te preguntas mocoso, pero antes de responderte quiero preguntarte, ¿alguna vez has estado en un espacio aislado o te llevaron antes de venir aquí a algún lugar donde las leyes espaciales fueran altas?"
Al escuchar la pregunta del bibliotecario, el niño reflexionó por un momento antes de responder:
"No mayor, desde que tengo recuerdo siempre estuve encerrado en una habitación antes de llegar aquí, por lo que solo puedo responder que no mayor."
El bibliotecario asintió, como reconociendo lo que el niño dijo, pero eso solo hacía más extraño lo que encontró en el niño.
"*suspiro*, en fin mocoso, lo que encontré más en ti es lo que se conoce como "semilla espacial", generalmente se forman cuando una persona ha estado en contacto con leyes espaciales por un largo periodo de tiempo, pero para formar una de éstas se requiere más que eso, la suerte de uno debe ser muy buena, ya que son pocos los que la llegan a formar en esos ambientes, y básicamente es una bendición para ti, que quieres seguir el dao del espacio, ya que esa semilla "crea" una afinidad con las leyes espaciales".
Al escuchar esto, el niño comenzó a saltar de alegría, parecía que era su día de suerte, no solo logró convencer al bibliotecario de que le prestara los manuales y técnicas, sino que descubrió que tenía afinidad cuádruple, por lo que su camino en la comprensión del dao aparentemente iría sin muchos problemas.
El bibliotecario decidió dejar que el niño se divierta un poco mientras reflexionaba sobre que manual de cultivo sería adecuado para él, debido a su afinidad "cuádruple", tenía que buscar manuales que se adaptaran bien al niño, y dejando de lado al espacio, que debido a que es un dao superior y que existen pocos o ningún manual de cultivo sobre éste, el fuego, el trueno o a la luz eran los criterios que tenía que tener en cuenta.
Así que, después de buscar por un largo momento el bibliotecario escogió entre los mejores que encontró y le habló al niño que aún seguía celebrando.
"Muy bien mocoso, ya busqué entre todos los manuales que hay en la familia y encontré 5 que se adaptan a ti."
Al escuchar esto, el niño rápidamente se recompuso y prestó atención a lo que el bibliotecario iba a decir.