Así pasó su primer mes después de llegar al 4to nivel de refinamiento, la rutina del niño ya estaba dividida entre cultivar y practicar con su espada, a excepción de las veces en las que tenía que salir al patio de vez en cuando para despistar al que lo observaba desde el exterior de la mansión y la comida que le llevaban las sirvientas de vez en cuando.
Con respecto a su observador, en un principio el niño se preocupó de que se diera cuenta de que había empezado a cultivar, pero por motivos que él desconocía, nada extraño sucedió.
"Quizás mi nivel de cultivo es tan bajo que, aunque me hice más fuerte, apenas si hubo algún cambio notable para la persona que me observa."
Una vez que llegó a esa conclusión, el niño solo salía 1 o 2 veces por semana y por un periodo bastante corto de tiempo, solo para estar seguros de que su fachada de niño inocente aún se mantenga.
En el aspecto del cultivo, tampoco le fue mal, llegó a la 5to nivel de refinamiento del cuerpo durante ese mes, y en cuanto a su práctica con la espada, aprendió rápidamente el control y movimiento adecuado de su meca al blandir la espada con ambos brazos, sin embargo, tuvo problemas a la hora de coordinar ambos brazos a la vez.
"Estúpido cerebro, te pido un mínimo de coordinación, es como dibujar un cuadrado con tu mano derecha y con la izquierda un círculo, pero mil veces peor, en fin, la practica hace al maestro, además para relajarme puedo cultivar, así que, por el momento, aún no hay problemas."
Este tipo de rutina le recordaba mucho a su época de estudiante, donde en lo único que debería preocuparse era estudiar y sacar buenas calificaciones, por lo que, a pesar de estar solo en una mansión sin nadie con quien hablar y repitiendo lo mismo cada día, su estado mental no se había visto afectado.
"Me quedan maso menos 10 meses, si sigo con mi ritmo de mejora, no debería preocuparme al menos con mi nivel de cultivo, lo más probable es que consiga llegar a discípulo marcial para cuando me lleven, y con respecto a mi técnica de espada doble, debería poder llegar a éxito inicial."
Las técnicas marciales, dependiendo del nivel de comprensión que el cultivador tiene sobre ésta, se dividen en 4 niveles y dependiendo de cada reino, el poder de la técnica marcial varía, estos niveles son:
El nivel de entrada, al que se llega cuando se puede ejecutar la técnica marcial sin problemas, sacando el 40% del poder de la técnica marcial.
El nivel de éxito inicial, donde se extrae el 60% de la técnica marcial, debido a una mejor comprensión de ésta.
El nivel de logro tardío, una comprensión mucho mayor sobre la técnica marcial y con esta comprensión se logra extraer el 90% del poder original de la técnica.
Y por último el nivel de círculo de consumación, este nivel es de referencia ya que es llegar al nivel de comprensión que tuvo el creador de la técnica, en este nivel el porcentaje de poder varía hasta del 91% hasta llegar al 100%.
En el caso del niño, aún no había llegado al nivel de entrada, pero se encontraba cerca, por lo que estimó que debería llegar al nivel de éxito inicial para cuando lo vengan a recoger.
"Éstos últimos 10 meses serán definitivos, lástima que el bibliotecario aún no haya dado señales de aparecer, desde que le dejé los manuales tal y como acordamos, pero aún no aparece."
El niño fue a devolver las técnicas y el manual de cultivo al cumplirse el mes tal como acordaron, con respecto a esto, el niño no tuvo ningún reparo en hacerlo, después de todo tuvo suficiente tiempo para comprenderlos, además también tenía los recuerdos sobre ellos, por lo que, si olvidaba alguna parte, siempre podía volver a revisarlos.
El problema fue que el bibliotecario aún no aparecía, el día que el niño dejó los manuales sobre la mesa tal como le dijo el bibliotecario, solo los vio desaparecer, pero sin ningún rastro de éste, después de ese día, el niño se tomó su tiempo para ir a la biblioteca para ver si el bibliotecario regresaba, al final, el niño solo pudo marcharse cada vez.
"*suspiro*, ahora sé que definitivamente algo le pasó, pero tal como me dijo, no puedo hacer nada, así que seguiré el último consejo que me dio, cultivaré duro por ahora, solo espero que regrese antes que me vaya de la mansión."
A pesar que el niño no tuvo mucha conversación con el bibliotecario, para bien o para mal, fue la única "persona" con la que estuvo en contacto, sin mencionar qué, sin él, su futuro sería mucho más sombrío, por lo que era imposible que no sintiera ningún apego hacia el bibliotecario.
El niño no se quedó reflexionando sobre ello por mucho tiempo y decidió reanudar su entrenamiento, después de todo el tiempo no espera a nadie.
En abrir y cerrar de ojos pasaron 9 meses, quizá sea un tiempo relativamente corto para los cultivadores en Kunlun, pero para el niño, fue un gran punto de inflexión en su vida, después de todo, el niño había sufrido una gran transformación durante ese tiempo.
En este momento el niño se encontraba dentro de su habitación con los ojos cerrados y sentado de piernas cruzadas mientras absorbía ávidamente el qi espiritual, su absorción era tan rápida que se había formado un pequeño remolino por encima de su cabeza.
El niño se encontraba sumamente concentrado, y al parecer, estaba a punto de romper un cuello de botella.
"Solo un poco más, debo hacer girar un poco más el remolino para mejorar la tasa de absorción, y equilibrarlo con el que se encuentra a la altura de mi ombligo."
En este momento, el niño ya había comenzado a sudar frío, había subestimado la dificultad de atravesar el cuello de botella, apenas si podía mantener ambos remolinos circulando, por no hablar de aumentar la velocidad de uno."
"No me puedo rendir en este momento, estoy a un maldito paso de formar con éxito un remolino perfecto, maldición no me digas que tendré que arriesgarme."
Así, el niño decidió aumentar de golpe la velocidad en la que giraba el remolino sobre su cabeza, sabía que, al hacerlo, se arriesgaría a perder el control sobre el que estaba dentro de su cuerpo a la altura de su ombligo, que en este momento se encontraba reuniendo todo el qi espiritual y concentrándolo solo en esa zona, por lo que cualquier error que cometiera, lo convertiría en una bomba que explotaría junto con él.
"Diablos, ¿quién dijo que la formación del dantian era un asunto fácil?, olvídalo, mientras más me demore, menores mis posibilidades de éxito, *suspiro*, quien no arriesga no gana."
Habiendo tomado su decisión, el niño reunió lo último de fuerza mental que le quedaba, sabía que solo tenía un intento, y, además, desde el momento en el que aumentará la velocidad del remolino, solo tenía unos segundos para equilibrarlo con el de su ombligo, y reunir de golpe todo su qi espiritual en él, terminando así la formación de su dantian.
"Muy bien, es ahora o nunca, si tengo éxito, tendré un futuro en el cual pensar, de lo contrario, adiós mundo cruel."
Y diciendo esas palabras, el niño ejecutó su plan, en el instante que aumentó la velocidad del remolino sobre su cabeza, el que se encontraba en su dantian empezó a girar a toda potencia, atrayendo de un solo golpe todo el qi espiritual que ya se encontraba rodeando en la periferia de éste y reuniéndolo con éxito dentro de éste.
Lastimosamente, el niño no tuvo tiempo de celebrar su éxito, su fuerza mental se había gastado por completo y el niño no pudo evitar caer desmayado sobre el piso de su habitación.
Para cuando se despertó, su cabeza dolía y se sentía mareado, después de todo, recuperarse del desgaste mental era aún más complicado que del de un desgaste físico.
Sin saber cuánto tiempo había pasado, el niño inspeccionó su interior y soltando un suspiro profundo mientras en su rostro se veía una gran sonrisa.
"Por suerte lo conseguí al final, jajajaja, quien dijera que cultivar es lo máximo déjeme darle una patada en el trasero, solo estoy en las primeras etapas de cultivo y ya estuve al borde la muerte 2 veces, diablos mi suerte apesta"
A pesar de las palabras del niño, aún se sentía feliz y complacido por dentro, después de todo, ¿Quién no se sentiría feliz después de que todo su esfuerzo valió la pena?
"Bueno con esto oficialmente entré a la etapa de discípulo marcial, por lo que se puede decir que por fin me encuentro en el nivel mínimo requerido al que se debe llegar a los 5 años, además que aún me queda poco más de 1 mes antes de que me lleven…"
Efectivamente, el niño no perdió el tiempo durante estos 9 meses, llegando al borde del avance hacia la etapa de discípulo marcial el día de ayer, lo único que no esperó, o, mejor dicho, subestimó, fue la dificultad para subir y romper la barrera, y fue esta negligencia la que casi lo mata.
Recordando por un momento la fática experiencia a la que se enfrentó, el niño no pudo evitar negar con la cabeza con amargura.
"*suspiro*, que ésta sea una lección para mí de no subestimar ninguna etapa de cultivo y avanzar con pies de plomo en cada etapa, esta vez pude tener suerte, pero si no tengo cuidado, la próxima no la contaré"
El niño decidió guardar esta experiencia en su corazón y no olvidarla, mientras también recordaba su avance con respecto a su técnica de espadas dobles.
"Ahora que llegué al nivel de discípulo marcial, debería centrarme en mis técnicas de espada, después de todo, me encuentro a medio paso del logro tardío."
Aunque el niño no tenía con quien compararse, al menos supuso que su talento con la espada no era malo, ya que, una vez que logró la coordinación que tanto lo molestó, el resto de su práctica fue bastante fluida, casi inmediatamente que logró dicha coordinación llegó al nivel de entrada y solo 3 meses después llegó al éxito pequeño, meta que se había propuesto en un inicio, y durante ese tiempo hasta ahora había logrado progresar por sí mismo y sin que nadie lo guiara a estar al borde del logro tardío, sacando a relucir el 89% de la técnica.
"Aunque siento que perdí mucho tiempo debido al método de prueba y error, ya que sin nadie instruyéndome ni el ambiente adecuado, fue bastante difícil saber cuándo estaba realizando movimientos innecesarios o el giro con la muñeca no era el adecuado, eso y que realmente nunca me he enfrentado a nadie en combate, por lo que bien podría decir que mi técnica marcial por el momento es decorativa."
Sin nadie que lo guie y sin un lugar adecuado para practicar, el niño sintió que cruzar y llegar al logro tardío en el tiempo que le quedaba iba a ser muy difícil, pero no lo sintió completamente imposible, por lo que pensó sobre su siguiente curso de acción.
"Por el momento, debido a mi avance reciente, mi base en la etapa de discípulo marcial aún no es estable, por lo que me dedicaré tiempo a estabilizarla y una vez que lo logre me centraré de cabeza con la técnica marcial, además que seguro mi avance también me beneficia a la hora de ejecutarla."
Así el niño se dispuso a consolidar su base, sin saber que el tiempo que le quedaba para vivir pacíficamente era menor que el que creía.