Pues no es una mala obra, relata sobre cómo se origino el Imperio y porque la Iglesia de la Muerte rige en la nación.
Pero tal y como había pensado desde un inicio, todos en la sala estaban hablando sin parar entre susurros, todos menos el primer príncipe no paraba de hablar con un tono medio alto e irritante.
Dejando de prestar atención a la obra, Santiago se recostó y deslizo un poco hacia abajo, cerró sus ojos y puso sus manos sobre su abdomen, lentamente se concentro y dedico a entrenar su corazón puro ignorando a todos en la sala y la obra.
¿No hay alguna forma de bloquear el sonido?... ¿Qué es el sonido para empezar?... La vibración en el aire, eso significa que tiene que ver con el viento, ¿No?, Por transitiva, si uso magia de viento para detener toda vibración debería de bloquear el ruido.
Pero si yo hago vibrar el aire generaría sonido, ¿Podría hacer algo como eso?... No, necesitaría aprender más magia, para eso debería de estudiar, ¿estudiar?... Que coñaso, pero si puedo conseguirlo...
Si realmente existiese magia como esa yo debería de haber oído hablar de ella, eso significa que incluso debería de razonar la magia yo mismo porque nadie de la actualidad puede... ¿de la actualidad? ¡De la actualidad! ... ¡¿Y si son los antiguos?!
Abriendo sus ojos luego de casi 1 hora entera de un estado de concentración pura, la primera visión fue la del primer príncipe tirando algo hacia abajo, cuando vio esto se levanto y refregó los ojos.
Los abucheos eran fuertes y parecían estar lanzando tomates hacia el escenario, los 3 príncipes se estaban riendo mientras lo hacían.
"Ni siquiera llegaste a ver la primer obra y ya decidiste dormirte, ¿Puede que no sea un espectáculo interesante para usted?"(Alicia)
La emperatriz fue la primera en notar que Santiago se había movido, casi como si estuviese pendiente de él constantemente.
"Era interesante, pero comenzaron a hablar demasiado de cosas sin importancia y me aburrí"(Santiago)
"Una opinión interesante, coincido con usted"(Hernán)
"Pues a mí me gusto, no entiendo el aburrimiento"(Abigail)
"A mí también me gusto, las historias verídicas son sin duda las mejores"(Alicia)
El emperador que estaba sentado sin decir nada mientras observaba a sus 3 hijos abuchear y mientras se reían, no tenía cara de estar divirtiéndose sino que parecía aburrido y molesto.
"Por cierto, acabo de notar que tienes algunos objetos rúnico mágicos, impresionante"(Alicia)
¿Lo acaba de notar? Y una mierda, claramente los viste nada mas estar frente a frente
"Si, no son la gran cosa"(Santiago)
"Demasiado humilde, deberías de ser más expresivo y alardear un poco, eres joven y puedes hacerlo"(Alicia)
"No me gusta llamar la atención"(Santiago)
Siendo tajante, Santiago dejo claro que no explicaría la utilidad de esos objetos tan fácilmente, además, corto casi de raíz el tema de conversación.
"Siendo el elegido de la diosa, deberías de mostrarte e infundir respeto, ¿No crees?"(Alicia)
"No, ese no es mi deber"(Santiago)
"¿Tu deber? ¿Y cuál es tu deber?"(Alicia)
"Es secreto"(Santiago)
"Pf, ¿No crees que las personas aquí presentes puedan guardar un secreto? Yo sobre todo se casi todos los secretos del Imperio y nunca se han filtrado"(Alicia)
"Es secreto"(Santiago)
Repitiéndose sin interesarse en lo más mínimo en las palabras de la emperatriz, Santiago se desperezo estirando sus brazos hacia arriba y volvió a sentarse como era debido.
"¿No crees que es importante que sepamos tu deber?"(Juan)
Cuando el emperador hablo, lo hizo con un tono fuerte y directo, Santiago solo giro su cabeza para ver su expresión durante unos segundos y luego volvió a observar el escenario.
"Solo 4 personas dentro de esta sala pueden saberlo, ni una mas ni una menos, si no pueden garantizar cerrar la boca, entonces no merecen saberlo"(Santiago)
"¡El señorito nos dijo antes! Que solo el emperador y nosotros los supremos sacerdotes podemos saberlo y dijimos que puede que 6 personas terminen sabiéndolo"(Abigail)
Saltando al instante a resolver el malentendido, Abigail casi lloraba de la sorpresa y sentía que su corazón estaba en su boca del susto.
"¿Y no crees que yo como emperatriz debería de saberlo también?"(Alicia)
Viendo que la situación iba a terminar en que ella no supiese nada del asunto, la emperatriz salto al instante para presionar que ella también supiese.
"Lo acabo de decir, ellos 3 o nadie, no me interesa lo que elijan"(Santiago)
Y otra vez, siendo tajante e imperativo, Santiago rechazo cualquier negociación y solo dio 2 opciones.
"¿Y porque es así? ¿Qué es tan crítico como para que alguien de confianza del emperador como su esposa no pueda saber?"(Alicia)
"Irritante, ya lo deje claro, es un secreto que solo ellos pueden saber y si no lo pueden mantener, entonces no lo van a saber"(Santiago)
Ya cuando Santiago se rasco el oído del lado de la emperatriz y actuó como si estuviese viendo una niña hacer un berrinche, Alicia se dio cuenta de que era inútil intentar razonar con él, era casi como si solo estuviese siguiendo órdenes a ciegas.
"En ese caso es una pena, pero solo nosotros 3 le escucharemos"(Juan)
El emperador ni se inmuto, incluso luego de estar rozando la línea de burlarse de la emperatriz, no estaba particularmente molesto por ello, era como si le diese igual.
"Por cierto... Santiago, ¿Alguna vez oíste sobre maldiciones? Últimamente están apareciendo bastantes"(Evelyn)
Hablando desde abajo y con un tono curioso, la primera princesa se giro sobre su asiento para unirse a la conversación y sonriendo llena de confianza, parecía calmada.
"Se un poco, contrarrestar las maldiciones de bestias corruptas no es muy difícil, es posible si se cumplen ciertas condiciones"(Santiago)
"¿Hay otros tipos de maldiciones?"(Evelyn)
"Dos tipos más, las que los humanos se lanzan unos a otros, esas son extremadamente difíciles de quitar y luego los castigos de los dioses los cuales nadie puede quitar"(Santiago)
"¿No se pueden quitar?"(Alicia)
Con un tono calmado, la emperatriz estaba claramente nerviosa pero lo ocultaba, si fuesen imposibles de quitar entonces el primer príncipe...
"No, elegí mal mis palabras, nadie además del dios en cuestión las puede quitar, por ejemplo, ser maldecido por el dios de lo sagrado conlleva a tener que pagarle de alguna forma por la ofensa, de entre los 4 dioses es el más sencillo, normalmente solo debes disculparte de corazón y criar algo sagrado para luego otorgarlo al templo, pero... La diosa de la muerte se toma todo muy personal, ella podría ir a los extremos de demandar las cabezas de familiares o incluso extremidades de forma permanente, depende de crimen cometido"(Santiago)
Luego de que Santiago terminase de hablar, la cabeza de los sacerdotes estaban palpitando, en solo unos segundos habían recibido mucha información como si fuese un golpe, ¿Existen los 4 dioses? ¿3 tipos de maldiciones? ¿Pagar a los dioses? ¿El príncipe cometió un crimen?
Tantas preguntar de solo una respuesta, si se sigue dividiendo esto podría durar días en resolverse.
"A partir de ahora voy a preguntar yo, ¿Puedes saber el pago a dar por el crimen cometido?"(Juan)
El emperador por primera vez arrugo su entrecejo y con seriedad tomo las riendas del asunto quitando del medio a todos los presentes, al contrario del rey Augusto, este emperador Juan sabía en qué momento era necesario meter las manos en el fuego y tomar riesgos.
"No, la persona en cuestión debe de admitir sus crímenes y entonces yo podría decir que se debe de pagar, ¿A cuál de los 4 dioses ofendió? Siempre y cuando no haya sido el dios del Cielo todo podría solucionarse"(Santiago)
"La diosa de la muerte"(Juan)
La reacción de Santiago fue de asco y molestia, pero se mostro enojado por momentos, luego se trago todo el enojo y aunque tardo en tranquilizarse y respiro para alcanzar el ritmo de paz que había hasta ahora, volvió a hablar.
"Sera difícil, como dije antes, pero no imposible, pero deberá ser castigado por la diosa y la justicia del Imperio, sino será imposible solucionarlo"(Santiago)
"Será castigado por ambas bandas... La maldición es la prohibición al acceso de cualquier Iglesia de la Muerte"(Juan)
"No hay necesidad de preguntar el crimen, ya sé lo que hizo... No voy a ayudar"(Santiago)
Estaban hablando del primer príncipe, luego de darse cuenta, Santiago solo rechazo, pero la forma en la que lo hizo de total repulsión y asco.
"Es necesario, es alguien importante"(Alicia)
"Violar y matar a un sacerdote o sacerdotisa en un Templo, ese es el crimen, esa persona debe de ser ejecutada, me da igual quien sea, asunto cerrado"(Santiago)
Cuando Santiago hablo del crimen todos cerraron la boca, los ojos de Abigail y Hernán estaban ardiendo en fuego puro e intenso mirando hacia el primer príncipe y cuando Santiago les observo y siguió las miradas, hizo un gesto como –Oh, ahora comprendo-
"Mi mas pésame, pero no puedo ayudar, mi madre terminaría castigándome a mí por ayudar en esto"(Santiago)
"¡¿Madre?!"(Abigail)
La reacción fue instantánea, e incluso Santiago abrió sus ojos y se dio cuenta del error que había cometido.
(diosa) Idiota
"Aham, eso no importa, olvídalo, un desliz de mi lengua"(Santiago)
Sudando y tratando de cambiar de tema antes de que esos fanáticos comenzaran a llorar y alabarle como a un dios, Santiago trato de hacerlo ver como un error.
"Mencionaste a los otros 3 dioses, ¿Esos también existen?"(Juan)
"Lo hacen, pero si se dedican a servir a la diosa de la muerte no hay nada importante que saber de ellos más que su existencia"(Santiago)
"Hhhmmm, ¿Y si alguien del Imperio prefiriese servir al dios del cielo? ¿Sucedería algo malo?"(Juan)
"...Además de perder afecto de la Iglesia, no creo que haya problema, incluso los dioses odian a los extremistas que purgan otras religiones, los mortales somos libres de elegir a quien servir"(Santiago)
"Me alegro, pero sigo prefiriendo la diosa de la muerte"(Juan)
"La diosa te mencionó mientras yo estaba en el Reino, dijo que eras un buen emperador, supongo que ambos están a gusto"(Santiago)
Y así como si nada, ambos sacerdotes supremos sonrieron casi lagrimeando y el emperador esbozo una sonrisa incluso cuando intentaba ocultarla, de los que estaban sentados, solo la emperatriz tenía una mirada de amargura y descontento.
"¿Has encontrado y sabido del algo importante mientras estabas en el Reino?"(Juan)
"Más o menos, hay ciertas personas que no deben ser tocadas, Leónidas Bellian parece que a futuro será importante, Nicolás Nodra es por ahora la opción más viable a futuro rey, George Rivon es un monstruo en la magia, puede que dentro de 20 o 30 años sea un -Sabio-, Ariel Wulf no va a tardar más de 5 años en alcanzar el rango S y puede que dentro de 10 años sea –Artista Marcial- y sobre todo, al igual que yo soy el rey de la muerte, el rey de la vida apareció en alguna parte del mundo, no pongan una mano sobre él, podrían terminar siendo malditos por los 4 dioses"(Santiago)
Y con una patada de información nueva, el emperador se apoyo sobre los costados de su asiento e inclino su espalda hacia delante.
"Eso es muy útil de saber, invadir al reino en el futuro será difícil"(Juan)
"Sobre eso, si le explicase mi deber seria más sencillo de ver a futuro... Pero hacerlo aquí es imposible, si lo desea mañana antes del combate podríamos reunirnos en el Templo"(Santiago)
"Bien, bien dicho, eso sería lo mejor para hacer, hay que poner todo sobre la mesa o jamás podremos hablar de forma correcta"(Juan)
Contento con como todo estaba yendo, el emperador se recostó en su asiento y carro sus ojos, aunque el asunto del primer príncipe seguía sin resolverse, ese elegido estaba cargando con varias soluciones y buen augurio en general.
"La segunda obra está comenzando"(Abigail)
Esta obra era sobre un tal Arceus que era un general antiguo, al parecer es un libro de historia convertido en una obra, este fue descifrado por los –Sabios- y se volvió popular, eso conto Elizabeth que luego de un buen rato desaparecido tomo por sorpresa a Santiago por la espalda.
Santiago que había heredado el conocimiento sobre el idioma antiguo, sabía leerlo, escribirlo y hablarlo a la perfección, pero se callo y sin decir nada solo siguió viendo la obra.
El primer príncipe al volver a sentarse en su sitio antes de que la segunda obra iniciase, fue tomado por su madre la cual parecía estar explicándole la situación de forma muy general.
"¡Eso es falso! ¡Yo no hice tal cosa!"(Julio)
Levantándose y mirando a Santiago, el primer príncipe estaba con un aspecto agresivo, su cabello ceniza largo estaba despeinado luego de haber estado tirando cosas hacia abajo y de haberse levantado de golpe, además de que sus ojos estaban infundidos en ira y rabia.
"¿Me hablas a mi? Te advierto, si eso no es lo que cometiste, entonces hiciste algo incluso peor, te recomiendo solo decir que ese fue tu crimen"(Santiago)
Con un tono calmado, la mirada de Santiago era vacía, si no fuese porque el emperador y la emperatriz estuviesen de testigos, la cabeza de esa rata inmunda hubiese rodado al primer alarido que largo.
"¡Si, obvio que hablo contigo! ¡¿Quién más aquí mintió sobre mí?! ¡Solo tú!"(Julio)
"¿Ah sí? Bueno, ¿Alguien tiene hambre?"(Santiago)
Levantándose de su asiento y estirando, Santiago camino como si no sintiese que el príncipe existiese.
"¿Joven Santiago? Si tiene hambre puede pedirle a los sirvientes, ¿Ir usted mismo no sería muy tedioso?"(Alicia)
Usando las propias palabras de Santiago, la emperatriz casi que quería que Santiago fuese humillado por su hijo pero en cambio, Santiago dio una bofetada con clase y digna de recordar.
"Elizabeth, tal y como dije hace unos días, al primer incordio me iría a una habitación para mí solo ¿Verdad? Guíame, voy a comer allí sin que nadie chille y me irrite"(Santiago)
Abriendo la puerta, Santiago solo salió sin saludar a nadie, el emperador miro a la emperatriz y su hijo, suspiro decepcionado y miro hacia la obra, ambos supremos sacerdotes se callaron y no dieron ni un solo comentario.
"¡Eli! ¡Yo voy!"(Amelia)
Levantándose y corriendo hacia la puerta, la chica se giro y sacándole la lengua a sus hermanas como burla salió y se fue con Santiago.
"Perra..."(Cristina)
"¿En qué momento consiguió tanta ventaja?"(Diana)
Y aunque Diana y Cristina no estaban afectadas, la emperatriz, el emperador y los príncipes y princesas estaban de cara, ¿no acababa de ignorarlos a todos llamándoles irritantes? Incluso al emperador ni le saludo, incluso a los supremos sacerdotes que estaban con él les ignoro.
"¡¿Qué es esa actitud?! Actuar de esa forma frente al emperador"(Alicia)
"¿Quieres culparlo? Incluso yo estoy irritada de esos gritos inútiles de tu hijo, que aprenda a comportarse"(Abigail)
¿Luego de haber violado y/o matado a una sacerdotisa iba a tener tan poca cara de tratarle bien? ¡Y una mierda! Ese mocoso asqueroso y desagradable ya estaba contra la Iglesia y seria tratado como enemigo, la diosa había tomado la decisión más perfecta posible pero en lo profundo de su corazón, Abigail pensaba que el castigo seguía siendo suave.
"¿Co- ¡¿Cómo te atreves a usar ese tono y palabras?! ¿La Iglesia se está posicionando contra los Drakor acaso?"(Alicia)
"Mientras tu hijo no se disculpe y page por sus crímenes, si, lo estamos, al menos a nivel político por ahora, realmente considero exagerado ir a lo militar con tan poco"(Hernán)
Conservando la calma, Hernán se encargo de hacer que la emperatriz se quedase helada del miedo, ¿No era la Iglesia casi toda la fuerza política de los Drakor? Si perdían el apoyo de estos entonces incluso los príncipes podrían terminar intimidados por otros.
"¡¿Qué demonios les pasa?! ¡Ya lo dije! ¡No lo hice! ¡Ese bastardo está mintiendo sobre mi!"(Julio)
Pisando el suelo y rompiendo las baldosas, la agresividad del primer príncipe estaba por las nubes, y la sala estaba mostrando tanta tensión y movimiento que todos los nobles cercanos guardaban silencio esperando poder escucharles.
Lastimosamente para ellos, sería imposible ya que los muros eran de casi 30 centímetros de ladrillos y cemento puro, además habían telas y decorativos acolchonados por lo que el ruido allí estaba casi por completo aislado.
Luego de salir de la sala, Santiago termino en un balcón más lejano y menos alto, estando delante con solo 5 asientos, se sentó en el del medio, sin haber ni un solo ruido que le molestase, la paz reino por momentos.
"¿Qué desea de comer?"(Elizabeth)
Estando parada detrás de Santiago, Elizabeth pasó una carta con incluso dibujo de los platos que había.
Eligiendo algo sencillo, Santiago le enseño a Elizabeth el plato y luego dio la carta a Amelia que estaba sentada a su derecha, la chica le miro y emocionada tomo la carta eligiendo lo que más le gustaba.
"¿Debería traer vino para beber?"(Elizabeth)
¡¡¡VINO!!!... Pero tengo prohibido beber alcohol... Pero nadie se enteraría si bebía o no... Pero estaría desobedeciendo a sus abuelos...
"No, tengo prohibido beber alcohol"(Santiago)
Suspirando con pena, Santiago tuvo al menos la opción de elegir un jugo de manzana en vez de agua como en el Reino y Amelia también eligió el jugo de manzana, sin casi tardarse en llegar la comida, las sirvientas pusieron mesas delante de Santiago y Amelia y apoyaron los platos.
"Buen provecho"(Elizabeth)
"Gracias"(Santiago)
Agradeciendo, Santiago comió y miro la obra, ahora que si la podía apreciar se sentía entretenido.
"Hhhmmm, es mucho más divertido sin tanta gente"(Amelia)
Estirándose Amelia se rio un poco y Santiago asintió al instante.
"Más tranquilo, así si se puede ver una obra y que resulte entretenida"(Santiago)
"¿Es cierto lo del primer príncipe?"(Amelia)
Un poco nerviosa e impotente, la chica estaba preocupada de la situación, siendo astuta lo mejor era encontrar una forma tranquila de solucionar el problema, pero si ese príncipe seguía negando sus acciones entonces nunca habría solución.
"Lo es, además, no es tan fuerte y digno como dicen los rumores, ¿No es solo basura? Me siento estafado de tanta adulación"(Santiago)
Movimientos tan burdos y torpes, con solo verle moverse con normalidad puedo ver que es el típico que solo confía en su fuerza superior, si enfrentase a un verdadero luchador con la misma fuerza física sería totalmente destruido.
"¿Eso cree? Puedo dar palabra de que es alguien difícil de vencer"(Elizabeth)
"¿Hhmm? Sus movimientos son absurdamente torpes, ¿Alguna vez entreno correctamente? ¿O puede que sus maestros sean los ignorantes? Si lo que vi es correcto, Leónidas Bellian, Bruno Ward, George Rivon y otros podrían derrotarle sin demasiado esfuerzo"(Santiago)
"El príncipe tiene su habilidad única hereditaria –Corazón de Dragón- puede casi que duplicar sus resistencias y su fuerza en un instante"(Amelia)
Tratando de defender al mayor talento del Imperio, Amelia estaba nerviosa, ¿4 personas del Reino de edades menores capaces de derrotar al príncipe? Eso era absurdo
"Pfff, ¿Solo eso? Y se comporta tan arrogante, que simio... No lo dudes, el perdería contra ellos hahahah"(Santiago)
Riéndose y sonriendo de forma arrogante, Santiago se echo hacia atrás para reposar y tanto Elizabeth como Amelia estaban en un estado de sorpresa.
Aunque se sentían felices de que el príncipe no puede ser tan arrogante, que sea superado cuando es el mayor talento del Imperio era un golpe duro.
"OH, parece que los príncipes y princesas van a ir al baile, ¿desea ir?"(Elizabeth)
"No, no es de mi gusto, si desean ir vayan, puede que duerma ahora"(Santiago)
Cerrando sus ojos y entrenando su corazón puro, Santiago perdió de a poco sus sentidos pero se percato de que Amelia se fue, pero en cambio Elizabeth se quedo sentada a un lado de él, meditando y practicando su mana.
(diosa) Que linda niña
¿Linda niña? ¿Quién?
(diosa) ¿Quieres un golpe? Para mi todos los mortales son niños
Supongo que hablas de Elizabeth entonces, es talentosa, ¿Cuántos años tenía? Menos de 70 u 80 y a pesar de ellos es una –Sabia-, sabe guardar secretos y se comporta, es agradable y carismática a su manera
(diosa) ¿También te agrada? Bueno, lo harías saber si no lo hiciese, eres un quejicas después del todo
Que..jica? ... ¿A quién llamas quejica? Yo nunca me quejo...
(diosa) ... ... ... ... ...
Ahm, bueno, puede que me queje un poco, pero lo hago siempre de una forma objetiva y sincera
(diosa) ...
Buuuuuuueeeeeeeno, no tan objetiva
(diosa) Lo que digas paleto
"Pf hahahahaahah"(Santiago)
Mierda hhahaha, ¿Qué vocabulario es ese? Ni siquiera pareces una diosa hahahaahah
Sin poder evitar reírse, Santiago comenzó incluso a lagrimear, ¿Qué tipo de diosa usaba las palabras quejicas y paleto? Parecía una niña de primaria
(diosa) ¡No te rías de tu diosa! ¡Cerdo!
"AHAHAHAHA"(Santiago)
Rodando de la risa, Elizabeth se sorprendió y vio a Santiago ene l suelo llorando de la risa, estaba en blanco ya que nunca en todo el tiempo que le había visto pudo ver una risa suya además de la arrogante y altiva que uso para ridiculizar al primer príncipe.
"Se-Señorito ¿Se encuentra bien?"(Elizabeth)
Preocupada de la salud mental de Santiago, la sabia le puso la mano en su frente para medir la temperatura, quizás estaba delirando por la fiebre.
"Hahaha, no no, estoy perfecto, es solo que recordé algo"(Santiago)
"Hhmmm, si usted lo dice, ahora que despertó, ¿Desea asistir a la fiesta? Puede disfrutar allí"(Elizabeth)
"No puedo beber, lo tengo prohibido, ¿Cómo voy a disfrutar de una fiesta de esa forma? Olvídalo, no me interesan ese tipo de eventos"(Santiago)
Tomándose unos segundos, la sabia observo a Santiago que parecía entretenido y alegre como si fuese un niño y aunque se restringió, luego se atrevió a preguntar.
"¿Quién le prohibió beber?"(Elizabeth)
"Edgard y Alfonso, mis abuelos, me castigaron por haberme escapado y asistir a la guerra contra –Plaga- sin guardias conmigo"(Santiago)
En vez de dejar las cosas a medias, Santiago dio una justificación que haría empatizar a Elizabeth, si ella sacase esa prohibición y castigo estaría casi dándole paso libre a hacer sus travesuras y escapes.
"Eso fue hace bastante, ¿Desea que pregunte si el castigo termino?"(Elizabeth)
"Pues no estaría mal, pero de todas formas no me gustan este tipo de fiestas, odio la política y formalidades"(Santiago)
Rascándose la nuca Santiago relajo la expresión constante de cubito de hielo, y se mostro más calmado y relajado.
Elizabeth que vio de a poco el cambio estaba más que alegre, siendo minuciosa y detallista, la sabia estaba atenta a casi todo en su entorno y Santiago de a poco parecía estar abriéndose.
"Entonces ¿Hay algo que desee probar hacer? Hay varios entretenimientos"(Elizabeth)
"Estaba pensando en cosas que podría hacer, pero ahora mismo lo mejor sería estudiar, mi magia es pésima, necesito hechizos, además de que mi cuerpo físico también es desastroso, necesito entrenarme, estuve tanto tiempo enfocado en mi energía corporal y control de la misma que perdí mis bases"(Santiago)
Cuando Santiago comenzó con su autocritica, la sabia levanto las cejas con sorpresa, a pesar de ser tan poderoso y digno, no era complaciente consigo mismo y seguía aspirando a escalar a pesar de la diferencia de otros de su edad.
"Si el señorito desea aprender magia, esta sacerdotisa esta mas que dispuesta a ayudarle"(Elizabeth)
¿Una Sabia enseñándome magia? Desaprovechar la oferta seria necio, al contrario de los Artistas Marciales del Reino que eran burdos y sin técnicas, un sabio, sin importar de donde fuese, era alguien que tenia conocimientos inconmensurables.
"Si es el caso, supongo que debería llamarte maestra de ahora en adelante"(Santiago)
"Hahaha, tal cosa no es necesaria señorito, mi nombre es más que suficiente"(Elizabeth)
Con una risita hermosa, la sabia se tapo con su mano la boca y siguió el sarcasmo de Santiago, la mujer se sentó al lado derecho, recta y con una sonrisa esbozada en su rostro.
"Pero debo decirle, no soy una mujer blanda al enseñar"(Elizabeth)
"No te preocupes, no soy alguien que se tome su entrenamiento como un juego"(Santiago)
"Bien, bien, ¿Qué magia es su primordial? ¿Tiene una secundaria o desea alguna en especial?"(Elizabeth)
"Magia de viento y magia de rayo como secundaria"(Santiago)
"Magia de viento... No es que subestime la utilidad que esta da, pero ser vuestra magia principal, ¿En que estaba pensando el señorito?"(Elizabeth)
"No puedo responder eso, pero mi magia de rayo es para atar a mis contrincantes, el efecto de retardo del rayo sobre las personas lo vuelve de extrema utilidad en alguien que se centra en su velocidad como yo"(Santiago)
"De acuerdo, ¿Qué hechizos conoce de cada magia?"(Elizabeth)
Al oír la frase inicial de Santiago, la sabia no dudo en ignorar el tema de la magia de viento, en vez de molestarle con eso prefirió ignorarlo ya que incluso si lo deseara cambiar ya no podía.
"Y ahí es donde está el problema, solo conozco un hechizo y es de rayo que modifique, es de rango 6"(Santiago)
La sabia miro durante varios segundos a Santiago y entonces entendió, lo entendió... Pero aun así se sentía triste.
"¿El señorito no desea aprender magia teórica?"(Elizabeth)
Con una mirada triste la sabia que se había emocionado por poder enseñar con dedicación y cuidado a Santiago, acababa de sentir como su corazón se rompía en pedazos.
"Al contrario, al contrario, no eh podido aprenderla porque no tenía ni tiempo ni ganas, pero luego del combate considere que son mucho más útiles que el control elemental que poseo, dos golpes de mi hechizo de rayo fue mucho más efectivo que controlar el rayo levemente"(Santiago)
"Siiii"(Elizabeth)
Saltando del entusiasmo, la sabia abrazo a Santiago y este se quedo helado, sin saber que hacer pero en solo un segundo reacciono... dejándose abrazar sin más.
"Lo siento, es que hay varios roces entre los magos teóricos y los no teóricos, si el señorito se posiciona a favor de la teoría entonces habría bases más solidas al menos dentro de la Iglesia"(Elizabeth)
................................... ¿Conflicto? ¿Solucionar? ¿Posicionarme? ¿Qué putas acabo de hacer con mi vida?...................
Con una mirada vacía y sin comprensión, Santiago estaba llorando por dentro al llegar a un resultado extraño y que deseaba evitar desde que llego.
Es por eso que no quería expresarme y mostrarles emociones, yo del pasado... ¿Por qué no te hice caso y seguí el plan?