"No me molesta que seas un poco arrogante y que te comportes como un niño dentro de la casa del clan o con tus amigos pero... ¡¡NO LO HAGAS FRENTE A LAS REINAS!!"(Olivia)
Agarrándolo de la oreja y dándole dos o tres cachetadas Olivia estaba roja como un diablo y solo le faltaban los cuernos, Edgard que estaba viendo todo no se atrevió a hablar.
"Ok ok ok ok, nunca más, no lo voy a volver a hacer jamás, lo juro, lo prometo, nunca de los nuncas"(Santiago)
Temiendo que su trasero terminase de nuevo como el de un babuino, Santiago ya estaba de rodillas implorando piedad hacia Olivia que seguía furiosa, podría haber seguido dándole unos cuantos golpes a esa descarada y arrogante segunda reina si tan solo Santiago se hubiese comportado correctamente.
"haaaaaaaa, ya es suficiente"(Olivia)
"Ahora hay que resolver el asunto con los Oust, eliminar sin dejar ver el poder de uno de sus talentos fue algo que los hizo enojar"(Esteban)
"¡¿JAAA?! ¡Ese desgraciado me miro hacia abajo y me pidió que rindiese!, ¡Es normal que le diese una paliza sin piedad!"(Santiago)
"Nunca dije que estuvieses mal en hacerlo, que alguien de una familia inferior se sintiese superior a nosotros es molesto, incluso yo le hubiese dado una paliza"(Edgard)
"¡¿Como pueden ser todos así?!, ¡¡Compórtense de manera adecuada y dejen la maldita violencia atrás!!"(Olivia)
Agarrando del cuello de la camisa a Santiago, Olivia ya estaba estresada de como todos se portaban y actuaban, incluso su padre parecía un salvaje estúpido.
"¡¡AAAHHH!! ¡¡NO ME PEGUES VIOLENTA!!"(Santiago)
Mientras tenía su puño en lo alto y estaba a punto de dárselo en la cabeza a Santiago, Olivia pestañeo varias veces luego de escuchar a Santiago, estaba entre la pena por su hipocresía y la irritación por echárselo en cara con tanta ironía.
Al final si le dio el golpe y se tranquilizó, Esteban estaba riéndose de cómo Santiago en solo unos segundos y de manera instintiva había hecho a Olivia ponerse roja por su actitud y palabras, que también se llevó un golpe.
"Lina y Emma ya se fueron en sus carruajes al palacio para hablar con los líderes de la familia Oust, tu solo me vas a dar problemas, vete a dormir"(Olivia)
Con una sonrisa sincera Santiago se paró de un salto y contesto con voz alegre.
"Gracias, al fin una orden que concuerda con mis deseos, hasta luego tía"(Santiago)
Sin darle tiempo a Olivia de agarrarlo, Santiago salió corriendo, pero en vez de correr detrás de él, Olivia levanto una de sus manos apuntándole y 5 guardias, 3 de los De Luxe y 2 de la guardia real, comenzaron a perseguirle.
Mientras corría Santiago cruzo por la zona de los nobles en la que aún había gente, de hecho, casi todas las familias estaban viendo como los guardias perseguían a Santiago.
Leo y Leónidas se reían a carcajadas, pero casi todos los hijos de los líderes de pilares estaban mirando con seriedad, aunque sabían que Santiago era alguien interesante por su relación con la décima princesa y ser equipo de Leo, eso vinculaba indirectamente su familia con los Nodra, pero ahora, tanto Lina como Emma eran sus primas y, sobre todo, es un individuo con un poder superior al de su futuro líder de clan y su mayor talento.
Con solo ese primer combate, ya nadie tenía expectativas de quedar primero, sería estúpido realmente intentar ganarle a alguien con la velocidad de Sebastián Haries, la fuerza de Bruno Ward, la experiencia de Leónidas y las técnicas de un –Luchador- de alto rango.
"Santiagoooo"(Leo)
Leo que estaba sentado junto a Leónidas y bastante lejos de su líder de clan, el cual estaba rodeado por los líderes de pilares, parecía querer hablar con Santiago.
Santiago que se había parado unos segundos sintió como los guardias ya casi estaban sobre él y agachándose y girando hacia atrás, paso justo por debajo de ellos y corrió hacia arriba para ir con Leo.
Ni siquiera había tenido que ver a los guardias para esquivarlos, solo lo hizo, como si supiese perfectamente donde estaban sin recurrir a su vista, el área de detección de esa habilidad era desconocida y su periodo de activación también, por lo que eso dejo aún más ansiosos a todas las familias.
Incluso si le negaban la visión con algún truco ese enano podría seguir luchando como si nada, por lo que apuntar a sus ojos sería inútil, entonces, ¿Dónde podrían apuntar para derrotarlo?
Con un gran salto Santiago trato de llegar hasta Leo pero los dos guardias reales parecían estar saltando tras de él y con más impulso y velocidad, rechistando Santiago solo giro en el aire y con un movimiento que dejo a todos los líderes de clan y familia con los nervios de punta.
Esquivo un ataque en el aire retorciéndose como un gusano y girando, los dos guardias reales siguieron de largo y el cayo grácil y casi perfectamente junto a Leo, su cara se dio contra una lámpara y su espalda contra el suelo.
Si esa espectacular muestra de movilidad y agilidad hubiese sido exitosa, entonces ya todos los líderes pedirían a los De Luxe que Santiago no fuese en serio durante los combates para evitar eclipsar a sus talentos, pero aun así, aquellos que no tenían mucha confianza en sus hijos, ya estaban planeando hacerlo.
"Eso no salió tan bien como esperaba..."(Santiago)
"Hahahahahahaha"(Leo/Leonidas)
Riéndose de Santiago ambos estaban casi llorando, por lo que parecían bastante cercanos, además en vez de enojarse Santiago camino hasta ellos como si no hubiese pasado nada y hablo sin problema.
"No vieron nada, ¿Qué querían?"(Santiago)
"haa, ¿Qué vas a hacer ahora?"(Leo)
"Me ordenaron irme a dormir"(Santiago)
"Pfff, ¿Quién te ordeno eso?"(Leo)
"Olivia, dijo que como soy molesto es mejor que me duerma y me quede tranquilo"(Santiago)
Levantando sus hombros con resignación Santiago sonrió conforme, era más que obvio que había hecho algo que no debía.
"¿Quieres salir a beber?"(Leónidas)
"Me prohibieron beber, pero no salir, así que si"(Santiago)
"¡¿Te lo prohibieron?!"(Leónidas)
Leónidas más que sorprendido parecía apenado e indignado, ¿Cómo podrían arruinarle la diversión de beber a alguien de solo 18 años?
"Supongo que pensaron que si estando sobrio me metí en una guerra sin un brazo estando ebrio sería peor que eso"(Santiago)
"HAHAHAHAHAHA"(Leo)
"Tiene sentido, no me gusta pero tiene sentido..."(Leónidas)
"Ahora todas las familias se van a reunir en el palacio a hablar sobre los combates, no creo que sea interesante, nosotros teníamos pensado ir a algún bar fuera de la parte de los nobles"(Leo)
"Yo no tengo problema algunioooo"(Santiago)
Mientras hablaba un guardia real le agarró del cuello a Santiago y como tenía guantes de malla de acero al agarrarle el cuello el frio acero le hizo dar un pequeño grito asustadizo de gatito chico.
"No vas a ir a ninguna parte sin guardia"(Guardia)
"¡¿Ehhhhhhh... ¿No está Edgard o Alfonso cerca?"(Santiago)
"El señor Alfonso esta aun en la zona de los Atlante"(Guardia)
"Voy a preguntarle a ver si me dejan en paz"(Santiago)
"Nos vemos en la salida de la arena"(Leo)
Saludando como si nada Leo y Leónidas siguieron hablando, el líder de los Bellian estaba viendo a su hijo con una sonrisa, claramente Leónidas no había perdido el tiempo durante la guerra y había hecho un acercamiento hacia Santiago incluso sin saber que tan poderoso era.
Mientras caminaba con los 5 guardias detrás, Santiago se encontró con Alfonso.
"¿Qué hiciste ahora?"(Alfonso)
"¿yooo? Nada importante, solo quería irme un rato con Leo y Leónidas"(Santiago)
¿Y con 5 guardias detrás de él era molesto? Comprensible, pero...
"Tienes prohibido beber, me imagino que lo recuerdas"(Alfonso)
"Si, si, si"(Santiago)
"Pueden ir con Edgard y avisarle"(Alfonso)
"Como ordene"(Guardia)
"Por cierto... En el próximo encuentro recuerda dejar a tu oponente jugar un poco alrededor tuyo, no hagas lo que acabas de hacer"(Alfonso)
Algunas que otras familias de alrededor que estaba escuchando parecía estar dándole la razón a Alfonso, incluso reprocharlo frente a todas las familias era mejor que hiciese ese tipo de actos.
"No tengo ningún problema con ello, de todos modos, nadie puede conmigo ni con ventaja"(Santiago)
"Si, y trata de no ponerte arrogante, hacerlo solo va a traerte problemas"(Alfonso)
"Eso es difícil, pero puedo intentar, hahaha"(Santiago)
Sin mostrar preocupación alguna Santiago se fue caminando, la forma en la que Alfonso le hablaba era casi como no el de un abuelo o líder, era como si estuviesen negociando.
¿Realmente los Atlante y De Luxe tenían a ese pequeño monstruo educado y entrenado? Si hacia lo que se le diese la gana, seria problemático no solo para ellos.
Imagínense que se deje llevar con alguien del Imperio durante, ¿Paz?, ese chico la arruinaría en un instante con sus ataques sin piedad alguna.
Saliendo de la arena Santiago no solo vio a Leo y Leónidas, estaba también George, Lorenzo, Luciano del pilar flexible, Diego del pilar justo y Linda del pilar recto.
"holaaaa, ¿todo bien?"(Santiago)
Dando un saludo general Santiago se metió en la ronda de conversación como si nada.
"Bastante bien, ¿Y tú? Acabas de dar un buen espectáculo"(Luciano)
"hahaha, Olivia me ordeno mostrar algo interesante, así que no tuve mucho mejor que eso"(Santiago)
"Si tuvieses algo mejor que eso, darías miedo"(Lorenzo)
"Hahahaha"(Santiago)
Aunque si lo hay, ni siquiera use mi quinto o sexto cielo, es obvio que de un golpe podría simplemente hacer explotar su cabeza con el casco y el escudo por el medio tratando de detener mi patada.
Mi poder destructivo es demasiado alto por lo que al centrarme solo en mi velocidad y movilidad me da la capacidad de evadir y contraatacar de manera perfecta.
Poniéndome a pensar, creo que nada de mi propio rango sería capaz de derrotarme, necesariamente tengo que pelear contra rangos superiores para sufrir.
"Hablando de eso, ¿Qué fue esa habilidad que usaste?"(Diego)
"¿hm?, estoy seguro de haber usado –Impulso-, -Cambio de Tempo-, -Cambio de habilidad repentina-, -Patada Horizontal- y –Patada Circular-"(Santiago)
Las clases teóricas sirven de algo... Dar excusas para mis movimientos libres, además de que leí algunos libros sobre escuelas específicas, ningún movimiento me llamo la atención, pero de vez en cuando uso alguno de ellos sin darme cuenta, por lo que sería útil recordar los nombres.
"¿No usaste la mejora de –Patada Horizontal-?"(Diego)
"¿Para qué lo haría? Era una distracción, es mejor guardarla para otro momento en caso de que esquive mi ataque"(Santiago)
¿En caso de que lo esquive? PFFFF, el cambio de tempo perfecto y aumento repentino de velocidad haría que incluso Leónidas no pudieses esquivar el ataque, pensar en que si lo hiciese era absurdo.
"Tiene sentido"(Leónidas)
Asintiendo con total acuerdo, Leónidas se separó un poco de la ronda y comenzó a caminar hacia el exterior, todos llevaban ropas comunes y sin el emblema de sus familias por lo que Santiago era el único que realmente se estaba mostrando como un noble.
"¿Vas a ir así?"(Linda)
"Linda tiene razón, si vas vestido así la gente no te va a dejar en paz ni un segundo"(Leo)
"...Como si tuviese más ropa que esta"(Santiago)
"¿Cómo te encontraron? No me digas que estabas caminando desnudo por la carretera"(Linda)
La cara de Linda era una mezcla de duda y repulsión, ¿Alguien podría tener el descaro y poca vergüenza de hacer eso?
"No, pero mis ropas quedaron destrozadas e inutilizables"(Santiago)
"Ya veo"(Linda)
Con un suspiro, la molestosa se tranquilizó un poco, al menos no era tan piel gruesa como para hacer tal acto desvergonzado.
"Solo una camisa es blanca de algodón y un pantalón también pero marrón"(Leónidas)
Esforzarse por parecer tan normal a veces te delata más que solo ir con el emblema cubierto de brillantina.
En cuanto unos sirvientes trajeron lo que pidió Leónidas, Santiago se alejó un poco y quitó la camisa de los De Luxe, poniéndose una blanca común el solo tacto ya hacía que Santiago se diese cuenta la diferencia entre ambas, una era lisa y cómoda mientras que esta otra era áspera y un poco molesta.
Y con el pantalón era más de lo mismo, todos cuando se giraron ya vieron a Santiago vestido como plebeyo y se sintieron estúpidos, el vestirlo no hizo diferencia alguna, de hecho, era el típico noble mal escondido entre la plebe incluso si en realidad era un plebeyo.
"Bueno ya que, solo vámonos"(Leónidas)
Mientras salían de la arena, las calles estaban llenas de gente y llena de puestos y tiendas con comida y objetos extraños.
Mientras el grupo paseaba y hablaban, Santiago estaba bastante atento a todo su alrededor, como si estuviese deseando encontrar algo o alguien y eso no pasó desapercibido.
Aunque en realidad, solo estaba atento a ver si algo interesante se cruzaba por su camino o alguien sospechoso se le acercaba.
Y en medio de su búsqueda, Santiago encontró a una pequeña tienda con abalorios de todo tipo y color, donde había pequeñas calaveras de bestias para la buena suerte y cosas supersticiosas a más no poder.
Dentro una mujer de la edad de Aria estaba vestida totalmente de negro con un velo cubriéndole el rostro, pero lo que más capto la atención de Santiago fue el olor de la tienda, era una mezcla de horror con sufrimiento.
Ni siquiera el mismo Santiago entendía cómo podía sentir emociones de los olores, pero el solo pasar le hizo sentirse mal y apenado, ¿Qué demonios había ahí dentro?
Aunque estaba a punto de decírselo a Leo, Santiago se quedó callado sin decir nada al momento de abrir la boca.
Al tragarse sus palabras Santiago había dado un segundo vistazo dentro de la tienda, como si estuviese verificando algo.
"Oigan, ¿Qué hay dentro de ese tipo de tiendas? Parece extraña"(Santiago)
"Puras tonterías"(Diego)
La respuesta de Diego fue casi automática, como si no tuviese que pensarlo dos veces antes de decirlo, y lo impresionante fue que incluso Leo, Leónidas, Linda y Luciano coincidieron, todos los pilares habían entrado en acuerdo en solo un segundo.
"Abalorios para la suerte o al menos eso dicen que venden, a algunos les sirven a otros no... Cuestión de suerte supongo"(George)
Con un comentario tan sarcástico y doloroso hacia quienes tenían ese tipo de tiendas, George no puso atención alguna y siguió junto con Leónidas hablando de la competencia y los rivales.
"Ya veo..."(Santiago)
Es una zona que pasa muy desapercibida y gente rara se reúne, no hay guardias cerca y ese olor... Ese apestoso y molesto olor... Algo obviamente no anda bien.
Puede que cuando todos se separen y vuelvan al palacio, tenga la oportunidad de entrar a escondidas.
El recorrido hasta el bar no fue muy largo, pero entre tanta multitud, el caminar era difícil y además cuando entraron al bar... estaba igual de lleno que el exterior, todas las mesas ocupadas excepto por una que parecía un poco privada y alejada del resto.
Leónidas hablo con el dueño y se fue a sentar en la única mesa que quedaba, todo el resto le siguió mientras que Santiago seguía medio perdido y sin rumbo alguno observando todo su alrededor.
Luego de sentarse todos, trajeron comida y bebida, todos tenían cerveza excepto por Santiago que miraba con ojos vacíos su vaso de agua y se giraba a ver las jarras de cerveza que tenían todos.
"Hey, Santiago, tengo una duda"(Lorenzo)
"Dímela"(Santiago)
Mientras comía todos comían sin parar, Santiago parecía un vegetariano comiendo ensalada, pan y muy poca carne, de hecho le estaba gustando un poco la pasta que habían traído.
"Nunca te eh visto entrenar, ¿Qué escuela aprendiste?"(Lorenzo)
"Uso el -Estilo de los 7 Cielos-"(Santiago)
Si dijese el nombre de la escuela todos entrarían en pánico, -Monarca Celestial- no suena de alguien común y corriente, además es un estilo que actualmente solo me eh visto a mí mismo usar.
De hecho, me estuve dando cuenta de que muchos estilos o todos son realmente precarios y simples comparados con el mío, debería de crear varias escuelas en vez de una sola para quedar como la mera verga... ¿Puede que los –Artistas Marciales- también sean tan poco habilidosos? Sería lamentable.
"Nunca antes había escuchado de él"(Lorenzo)
"¿Es hereditario?, ósea tu padre te lo enseño pero, ¿Lo creo tu familia?"(Leo)
Ósea lo cree a medias yo mismo, me ayudaron las voces del viento que vete a saber que mierda son, pero si básicamente lo hice yo lo hizo mi familia ¿no?
"Si, es bastante complejo ya que hasta que no llegas a determinado punto no puede combatir, por ejemplo, hasta mis 16 años yo no podía pelear contra nada ni nadie, solo podía esquivar y correr, más que nada es un estilo de esquivo, bloqueo contraataco, los ataques son muy básicos y normalmente los robo de algún otro estilo"(Santiago)
"Es cierto, al principio cuando llegaste apenas golpeabas de manera común, casi siempre contraatacabas o me dejabas atacar a mí, ¿Aprendiste los ataques en Gastora sin ir a clase de -Combate-?"(Leo)
"Me metí en la biblioteca a leer sobre los diferentes estilos y por mi cuenta los aprendí, algunos eran fáciles y otros más o menos, nunca llegue a ver alguno que no pudiese hacer por mi propia cuenta"(Santiago)
Son todos movimientos de simios después del todo, ataques directos, ataques directos rápidos y ataques directos fuertes, dan pena ajena los que dicen haberlos creado...
"Ya veo, ¿Y de que se trata tu estilo?"(Leónidas)
El estilo de batalla de los Bellian ya era conocido y si Santiago había investigado, el debe de haber encontrado, por lo que básicamente darles un poco de información no sería malo, en especial si no eran enemigos.
"Sobre todo es la implementación de la magia de viento para aumentar mi velocidad y darme más movilidad para esquivar, el primer Cielo me permite moverme de manera fluida y segundo me permite hacer cambios abruptos en movimientos fluidos, el tercero y cuarto cielo me permite cambiar de tempo al atacar y esquivar, luego el quinto y sexto cielo me dan un control mayor de mi energía corporal y magia de viento para usarse en batalla"(Santiago)
"Eso es impresionante, es un estilo de batalla impresionante"(Diego)
"Me molesta decirlo, pero... Es impresionante"(Linda)
"¿Y el séptimo? Dijiste que eran 7"(George)
"Ah, ese es casi imposible de adquirir, pero es básicamente la fusión de los 6 cielos en uno, -Cielo del Monarca- te permite usar los 6 cielos a la vez, es complicado de explicar, tendrían que aprenderlo para entenderlo"(Santiago)
"hmmm, ya veo, una pena"(Leónidas)
Cuando Santiago había terminado de comer, George también lo había hecho, pero todos los Bellian parecían barriles sin fondo e incluso Lorenzo también lo era, cada uno de ellos ya iba por el cuarto plato.
Y además ya iban como 8 jarras de cerveza, solo Leónidas todavía estaba sobrio pero el resto se les veía un poco colorados de rostro y con miradas un poco desviadas de toda atención.
George que había dejado de tomar luego de la segunda jarra estaba sano al igual que Santiago y Leónidas, pero lastimosamente, Lorenzo estaba sobre la mesa dormido como un tronco.
"Este imbécil... Su combate es mañana y quedo inconsciente tan tarde"(George)
"¿Quieres que lo lleve al palacio?"(Santiago)
"No, ya tengo practica"(George)
¿No es la primera vez? Hahaha, que tipo
Mientras Leo y el resto seguían compitiendo, Santiago volvió a comer un poco, les observo caer uno por uno y reírse de sus caras de muertos.
"¿Ya quedaron todos fuera?"(Leónidas)
"Eso parece"(Santiago)
George ya se había ido arrastrando a Lorenzo y todos los Bellian estaban durmiendo plácidamente sobre las mesas, Leónidas también parecía tocado por lo que se levantó un poco lento y llamo al dueño.
"AH, hey, Leónidas"(Santiago)
"¿Hm? ¿Paso algo?"(Leónidas)
"¿Necesitas el segundo lugar?"(Santiago)
La pregunta era clara, ¿Quieres que te deje pasar sin problemas?, con una sonrisa Leónidas parecía agradecido y bastante tranquilo, más que antes.
"Pues, no niego que sería mejor que la señorita Trista me deba una por dejarla pasar"(Leónidas)
"Realmente lo único que me importa de las batallas de primera era darle una buena paliza a Haries y lo voy a conseguir antes de llegar a la final así que no necesito subir más que eso"(Santiago)
"HAHAHAHAHAHAHAHA, eso me encantaría verlo, debe de estar llorando y lamentándose, ese idiota HAHAHA"(Leónidas)
Cuando uno es más débil debe de callarse y obedecer, ¿Desafiar y difamar a alguien 100 veces más fuerte que tú? Que estupidez.
"Espero que no se haya acobardado y falte al encuentro, seria patético y decepcionante..."(Santiago)
"Yo tengo que llevar a estos hasta la casa del clan, si quieres puedes venir"(Leónidas)
"Seguro que Alfonso está esperándome para darme un discurso emocionante de porque debería de haber llegado más temprano, perdérmelo sería una pena"(Santiago)
"PF HAHAHAHA"(Leónidas)
Luego de despedirse, Leónidas cargo sobre su espalda a Leo, Luciano, Diego y Linda, parecían no pesar nada para el por lo que Santiago quedo más tranquilo.
Sería malo que no llegasen a su destino y todos quedasen en medio de la calle, podrían robarles... Aunque el que más riesgos corría sin duda era George con Lorenzo.
Mientras caminaba por las calles, Santiago vio como los faroles se prendían e iluminaban las calles principales de la ciudad, las tiendas habían cerrado y los estantes y personas con manteles en el suelo se habían ido por lo que había mucho más espacio para caminar.
Entonces... Ya iba siendo hora de escabullirse.
Con una mirada un poco seria Santiago freno justo frente a la tienda de abalorios cerrada y sin esperar mucho, cuando la gente estaba a cierta distancia, Santiago rompió el pestillo con cuidado de no hacerlo vistoso para no dejar muchas pruebas de su entrada y que la gente que pasaba por los alrededores no se diese cuenta.
Con un pequeño golpe hundió un poco el pestillo y empujo la puerta, luego empujo con un poco de cuidado el pestillo a su posición original y cerró la puerta dejando una pequeña estantería detrás.
Revisando todos los objetos y cajones, y sin dejar nada más por ver, Santiago parecía decepcionado, 4 objetos que había agarrado los tenía aun en las manos y mientras seguía buscando algo en alguna parte escucho una puerta.
Al instante salto hacia el techo y se dedicó a observar todo su alrededor, ¿Una puerta? ¿Por qué escucharía una puerta si no había ninguna? Obviamente había un sitio oculto como él pensaba, solo debía esperara a la persona que estaba en el saliese y emboscarlo rápidamente.
Saciar su sed de curiosidad era muy importante, en especial con ese tipo de mala sensación al respecto, era casi como si supiese que algo malo estuviese sucediendo allí.
En cuanto escucho otra puerta abrirse, Santiago dejo de respirar y observo una de las paredes, se acababa de literalmente desplazar hacia delante haciendo un chirrido peculiar y bastante fuerte.
Mientras el hombre salía se dio cuenta de que algo no estaba bien, había varios abalorios tirados por el suelo y además la puerta estaba sostenida con un estante detrás.
Mientras revisaba todo, Santiago usando magia de viento para mantenerse pegado al techo, la uso para moverse boca bajo y lentamente se escabullo dentro de la puerta.
"OIGAN CHICOS, VENGAN ACA"(Hombre)
La voz del hombre no sonó muy fuerte, era más bien como si estuviese tratando de usar un tono suficiente para no llamar la atención de nadie del exterior, pero a la vez hacer que sus compañeros le escuchasen.
La puerta secreta que estaba abierta era un pasillo largo hacia atrás y luego se cortaba y había una única sala, desde esa sala dos hombres salieron, uno de cada lado y vieron a Santiago en el techo.
Con un impulso sobrehumano, Santiago uso su sexto cielo para crear cadenas de energía y magia de viento y ato las bocas de ambos mientras se acercaba y cuando llego a ellos, les dio un golpe a los dos en la boca del estómago que los dejo inconscientes.
Dándose la vuelta al instante, Santiago corrió hacia donde estaba el otro hombre y le dio otro golpe, pero en la nuca desde el sigilo, con 3 hombres inconscientes y sospechosos, lo único que se le ocurrió a Santiago fue atarlos.
Ninguno de los 3 tuvo tiempo de verle el rostro por lo que tuvo suerte, lo mejor sería taparse y evitar este tipo de situaciones, por lo que luego de usar cuerdas que había por la tienda, Santiago robo un abalorio parecido a una máscara de madera con plumas en la parte de arriba y otra vez creando cadenas se la ato en la cabeza.
Solo la parte inferior de su mandíbula estaba a la vista mientras que el resto estaba tapándole perfectamente la nariz ojos y frente, obviamente en solo unos segundos luego de colocarla Santiago se la quito e hizo un par de agujeros en la máscara para poder ver.
Era molesto y vistoso, pero al menos ahora no podrían reconocerlo y sería un ladrón común y corriente... Bueno... Un ladrón poco común y muy fuerte.
Al caminar hasta la habitación arrastrando a los 3 hombres atados e inconscientes, Santiago los metió en el baño y los dejo allí con sus bocas tapadas por si despertaban.
"Al final, parece que esto va a ser más grande de lo que incluso pensaba"(Santiago)
Una segunda puerta mal escondida detrás de un mueble y con varias alarmas del tipo cascabel, cortando lentamente las cuerdas y dejándolas caer despacio, Santiago hizo el mínimo ruido posible.
Luego de todo, en vez de arrastrar el mueble se fijó levantándolo un poco para observar si había algo debajo y encontró muchos más hilos los cuales cortar, cuando termino levanto el mueble hacia delante para ver si tenía algo detrás.
Sin encontrar nada, Santiago solo movió el mueble levantándolo para evitar el ruido del arrastre, lo dejo a un costado y con muchísimo cuidado abrió un poco la puerta y observo si había algo.
Todo estaba a oscuras y a los lejos un pequeño farol estaba colgado, de no ser por el mismo entonces la sala sería tan oscura que no se podría saber si había suelo.
Sin dudar mucho más Santiago abrió del todo la puerta iluminando la sala, había cientos de celdas en donde había bestias con bósales y atadas, todas parecían agotadas por lo que no se movían un centímetro de sus lugares y con sus cuerpos llenos de heridas cicatrizadas parecían no haber estado pasándola bien.
"¿Traficantes de bestias?... Poco interesante, ¿Por qué olí es cantidad de dolor y sufrimiento de esto?, no tiene sentido"(Santiago)
Decepcionado de lo que había encontrado Santiago solo recorrió los pasillos y observo a las diferentes bestias que tenían, liberarlas no serviría de nada, no tienen fuerzas para caminar y las que la tengan, van a salir a matar civiles.
Lo mejor era esperar y avisar a Olivia de la situación, ella sabría qué hacer, podría enviar guardias reales a explorar este sitio y entonces el podría concentrarse en los combates del torneo.
"¿Y tú quién eres?" Una voz oscura y gruesa de un hombre se escuchó a la distancia, Santiago que estaba sorprendido de que su habilidad de detección no fuese capaz de localizar a esa persona estaba descolocado y en vez de depender de sus sentidos y habilidades, creo una esfera de energía corporal alrededor de él y se dedicó a prestar atención a sus reflejos.
Si no podía verlo o detectarlo, entonces podría sentirlo cuando lo atáquese, su energía corporal estaba formando un pequeño cascaron débil para sentir cualquier tipo de movimiento en un radio de 3 metros
"¿En serio? Me acabas de decir que eres un enemigo solo con eso, niño, deberías de ser más astuto"(Hombre)
"...No parecía que fueses a esperar para saber si era amigo o enemigo, ¿me equivoco?"(Santiago)
¿Qué rango era su enemigo? ¿Qué tan fuerte y veloz era? ¿Qué habilidades tenía?, sin saber ni la forma de su oponente Santiago no podía hacer movimientos riesgosos.
Si era un experto entonces cualquier error podría ser gravemente castigado, además, siendo un asesino y uno que de verdad buscaba asesinar, no sería raro que sus armas estén envenenadas.
"Hmmm... Hubiese preferido hacer esto fácil, caes inconsciente y te arrastro a lo más profundo para saber cómo carajo llegaste hasta aquí pero parece que voy a tener que hacer un pequeño esfuerzo"(Hombre)
"¿Eh? Perdón, ¿En serio piensas que puedes ganarme?"(Santiago)
Como si de verdad Santiago nunca hubiese pensado la posibilidad de derrota, se giró con cara de idiota engreído y levanto sus hombros como si estuviese escuchando a un idiota más grande que el mismo.
"......Estas muerto, mocoso"(Hombre)
Con una voz llena de ansia de matar, el hombre dejo de hablar y solo desapareció, totalmente lo opuesto a lo que Santiago buscaba al provocarlo, cuanto más hablase más oportunidades de detectar de donde venia mientras que si se mantenía callado pues, detectarlo era prácticamente imposible.
Mientras Santiago se preparaba para contraatacar cualquier golpe, el asesino paso totalmente de él y se fue hacia la puerta.
"Hijo de..."(Santiago)
Parado al lado de la puerta el asesino la cerro lentamente para hacer que Santiago se arrepintiese aún más de haberse puesto arrogante, en un solo movimiento, Santiago había quedado totalmente cegado
"Bienvenido al infierno, espero que entretengas a nuestros demonios"(Hombre)
"¿No ves que tan hermoso soy? Claramente soy un ángel que te viene a purgar maldito demente"(Santiago)
Haciendo enojar aún más al asesino Santiago solo podía sentirse orgulloso de poder seguir humillando a su oponente con palabras, aunque no podía hacerlo con decisiones de batalla.