Finalmente había llegado el día en que partirían a las tierras nevadas. David, Hanna, Alan y Clara se sentían emocionados, sería su primera misión y su primera vez saliendo de su pueblo para viajar a otro lugar poblado. Al amanecer se reunieron con Leo, Liena y Kyala para ir al cuartel a encontrarse con el teniente Sander quien los esperaba junto a un enorme vehículo.
-Veo que ya están todos -Dijo Sander al verlos llegar- ¿listos para partir? -Pregunto dándose la vuelta para ir a hacer los últimos preparativos.
-¡Oiga! -Lo llamo Kyala-. Se supone que cada escuadrón está integrado por cinco, nosotros somos siete, y cada VDAYE fue diseñado para que lo usaran un máximo de cinco personas. ¿Como vamos a entrar nosotros siete más usted y Abigail en ese vehículo? -Pregunto mientras miraba al VDAYE que estaba estacionado cerca del enorme portón del cuartel como si estuviera esperando que abrieran las puertas para acelerar.
-Asi es, nuestros Vehículos fueron diseñados para ser usado por cinco personas a la vez -Respondió el teniente-, cada persona se encarga de una función como conducir o controlar una de las Armas con las que cuenta el vehículo. Además, los vehículos cuentan con una cabina de carga en la cual se pueden transportar hasta diez personas extras -Dijo con cierto tono de obviedad. Kyala y los demás habían olvidado ese detalle por la emoción que les generaba saber que se les dejaría manipular un VDAYE-. Y por cierto... -Agregó acercándose al vehículo-, este es para mi y para mis subordinados, lo usaremos para transportar al Híbrido.
-¿Subordinados? -Pregunto David con confusión pues no les habían contado que más personas los acompañarían- ¿No que era una misión secreta y solo nosotros sabríamos de ella?
-A ver chico... Si no recuerdo mal Sara dijo "Ustedes no le deben contar a nadie" -Dijo mirándolo con severidad-, es decir que yo si lo puedo hacer pues ellos son mis mejores hombres y les tengo una gran confianza. Y por cierto... Su vehículo está por allá -Agrego señalando al taller en donde se guardaban y reparaban los vehículos.
Los chicos voltearon a la donde había señalado el teniente y vieron como las enormes puertas del taller se abrían para dejar salir un vehículo muy distinto que los VDAYE's que ya conocían. El vehículo aceleró y se les acerco permitiendo que lo contemplarán mucho mejor.
El vehículo era un poco más grande que un VDAYE pero a la vez conservaba ciertas semejanzas y la más notable era la enorme puerta de la zona de carga. La puerta comenzó a abrirse como si fuera un tipo de puente levadizo como los que aparecian en los libros que Clara leía cuando era pequeña y de los cuales se la pasaba contándoles a sus compañeros. A medida que la puerta metálica se abría se podía escuchar un sonido semejante a válvulas de vapor y cuando finalmente se abrió una persona salió del Vehículo.
-¿Que les parece mi nuevo bebé? -Preguntó Abigail mirando a los chicos quienes la miraron de una manera extraña debido a su forma de hablar y de referirse al vehiculo-. Es un prototipo. Esperamos que dentro de poco estos vehículos puedan reemplazar a los VDAYE's -Decia con orgullo. Abigail era la líder del Escuadrón de Defensa e Ingeniería (E.D.I), por lo tanto ella misma había diseñado gran parte del vehículo y supervisado construcción. Era normal que estuviera orgullosa por su trabajo.
A los chicos le costó creer que les estaban entregado ese vehículo. Era un vehículo superior a los VDAYE's, prácticamente una fortaleza rodante, y se lo estaban entregando a ellos, un grupo de novatos.
-¡Me encanta! -Exclamo Hanna con Alegría acercándose para tocarlo-. Es mucho mejor que un VDAYE, ¿Cuantas personas son capaces de entrar? ¿Tiene Armas? -Por cada pregunta que hacía se acercaba más y más a Abigail- ¿Cuantas Tiene? ¿De verdad es nuestro?
-Cálmate un poco niña... -Dijo Abigail alejando un poco a Hanna de su rostro, literalmente Hanna estaba a centímetros de su cara-. Ya se habrán dado cuenta que ustedes siete, el Teniente y yo no entraríamos en un VDAYE común ya que fueron diseñados para un escuadrón, o sea cinco personas como máximo para dejar espacio en la cabina para transportar Híbridos muertos o cualquier mercancía que queramos comerciar, también para llevar otras personas. Como verán este vehículo es dos veces más grande que un VDAYE y esto se debe a que lo Fabricamos para transportar al nuevo Híbrido ya que no entraba en un VDAYE común.
-¿Fabricaron? ¿Está diciendo que lo hicieron en estos quince días que pasaron desde La reunión que tuvimos? -Preguntó Alan confundido y a la vez asombrado.
Abigail esbozó una sonrisa leve y luego respondió.
-Obviamente no. Este es un vehículo en desarrollo, tenemos diez años desarrollándolo. Decidimos terminarlo antes de tiempo debido a lo que se va a transportar en él.
-¿Diez años? -Preguntó Kyala dudosa- ¿Por que no lo han terminado?
-No es fácil conseguir piezas extras para fabricar un nuevo vehículo ¿saben? -Volvió a responder Abigail mientras soltaba un suspiro-, en Edén solo hay 24 VDAYE's en total y las pocas piezas que podemos fabricar se usan principalmente para repararlos. Aunque poseen grandes diferencias sus fuentes de energía son las misma -agrego parándose al lado del nuevo vehículo-, usan baterías capaces de cargarse con el sol.
-Si, si, si deje eso de lado y díganos cuantas armas tiene -Volvió a intervenir Hanna aún emocionada por imaginarse con cuántas armas contaba el vehículo- ¿o que mas hay adentro de este enorme vehículo?
-Aun no está completamente equipado -Respondió está vez el teniente, aunque de forma cortante-. Terminen de prepararse, saldremos en breve -Ordeno y luego fue junto con Abigail a reunirse con sus subordinados.
Los subordinados de Sander eran un equipo de cuatro hombres y una mujer que vestían el uniforme del E.R.E, pero con muchas diferencias al uniforme común, ellos los habían modificado con distintas cosas que encontraban durante sus misiones fuera del pueblo o con adornos hecho con la piel, garras y colmillos de los Híbridos que mataban. Y eso no era todo, el que parecía ser el líder tenía lo que parecía ser un chaleco anti balas los cuales eran muy escasos y se encontraban principalmente en las ciudades antiguas, otro tenía su traje modificado con partes de metal que cubrían sus hombros y codos, y otro tenía su chaleco modificado con muchas fundas en las cuales llevaba municiones, cuchillos y sus armas pequeñas. La única similitud entre sus trajes eran que todos portaban fundas en su espalda y cadera donde guardaban sus espadas y armas de fuego.
Luego de hablar los soldados más expertos del E.R.E Sander y Abigail regresaron a donde estaban los chicos quienes ya habían cargado las pocas cosas que llevarían a la misión: sus armas, y provisiones para unas cuantas semanas.
-Eumm... usted dijo que el vehículo era nuestro ¿Verdad? -Clara preguntó tímidamente-. Por lo que sé cada vehículo pertenece a un escuadrón y nosotros somos casi dos escuadrones.
Sander respondió la pregunta con un leve moviendo de cabeza y luego Abigail hablo.
-Sara me dijo que les entregara este vehículo a ustedes, el primer escuadrón con más de cinco integrantes -Explico mirándolos de forma detallada, luego sonrió levemente-. Y eso no es todo, también son un escuadrón principiante por lo que si el vehículo tiene una falla y explota no estaríamos perdiendo grandes soldados -Agrego con un tono siniestro para asustar a los novatos ante ella pero parece que la única que escuchó eso último fue Hanna quien murmuró confundida "¿Eh?".
-Entonces somos un solo escuadrón... -Dijo David en voz baja pero suficientemente claro para que los demás lo escucharán.
-Así es. Nosotros iremos con ustedes en este vehículo -Volvio a Hablar el teniente junto a Abigail-. Bueno ya es momento de irnos -Ordenó aplaudiendo varias veces como señal-, dejen de hablar y suban a los vehículos.
-¡Pero aún no le hemos dado un nombre a nuestro vehículo! -Se quejó Hanna.
-¿Un nombre? -Le pregunto Abigail mirándola de forma extraña.
-Si, un nombre -Volvió a decir la joven rubia-. Este será el vehículo que nos llevará a nuestras misiones a partir de ahora. Se merece un nombre.
-Que extraña eres -Le dijo Abigail mientras subía.
-¡Eso lo harán después! -Exclamó el Teniente mientras empujaba a Hanna para que entrara al vehículo junto con los demás.
Cuando ambos equipos estuvieron preparados para salir el enorme portón metálico del cuartel se abrió para dejar salir a los dos vehículos que comenzaron a acelerar a medida que se acercaban a la salida del pueblo donde aumentaron aún más la velocidad y atravesaron el bosque hasta salir del valle de la esperanza y tomar rumbo a las tierras nevadas en donde se encontraba la ciudad a la que debían llevar el cuerpo del Híbrido para que lo analizarán.
El viaje a las tierras nevadas tenia muchos riesgos pues, de entre todos los aliados que tenia Edén el más lejano era Montaña Alta y, para llegar hasta allí primero tendrían que atravesar tierras plagas por amenazas como Híbridos agresivos y "los Raiders", un grupo conformado por criminales que habían sido exiliados de sus pueblos y sentenciados a morir en las garras de los Híbridos pero que de alguna manera habían logrado sobrevivir y formar una base en un lugar que solo ellos conocían, y lo peor era que contaban con un buen armamento y vehículos que usaban para atacar y robar a aquellos con los que se encontraban.
Desde que habían subido al nuevo vehículo Hanna se mostró impaciente y comenzó a explorar su interior. El vehículo era como una base móvil, una persona podría a quedarse a vivir ahí con tranquilidad. Una de las cosas que noto fue una escotilla en la parte superior del vehículo la cual se cerraba y abría por dentro. Cuando llegaron a un prado que se extendía por cientos de kilómetros Hanna decidió subir y abrir la escotilla para contemplar mejor el exterior.
-¡Hermano! -Grito con fuerza y alegría elevando sus brazos al cielo y disfrutando la sensación del viendo sobre su piel y removiendo su cabello-. Ojalá puedas ver esto.
Conforme avanzaban en su viaje pasaban por lugares asombrosos como un bosque con árboles gigantescos y robustos, hasta varios lugares que siglos atrás habían sido grandes ciudades o pequeños pueblos y que ahora estaban cubiertos por la vegetación y habitados por Híbridos. Cada vez que un Híbrido intentaba atacarlos era rápidamente asesinado por los hombres del teniente quienes le disparaban con una enorme ametralladora que estaba equipada en la parte superior de su vehículo.
Hanna, quien subía a la escotilla cada vez que no había peligro, fue la que mejor pudo contemplar todas que para ella, y los demás, eran totalmente nuevas y desconocidas.
-Deberian subir también. ¡Es increíble! -Les dijo a sus amigo. La única manera de ver lo que pasaba afuera estando en el interior del vehículo era desde la cabina del piloto o subiendo la escotilla. A diferencia de ella los demás no habían subido a ese lugar-. Incluso hay Híbridos que nunca había visto.
El viaje continuó por un par de semanas hasta que finalmente llegaron a Las Tierras Nevadas. Al llegar a ese lugar la temperatura cambio drásticamente y a medida que se adentraban en esas tierras el frío aumentaba más y más, aunque gracias a que los vehículos contaban con un dispositivo que recolectaba nieve y la calentaba el interior de los vehículos mantenía su calidez.
-Pónganse esto -Les dijo Sander pasándoles unos chalecos de piel gruesa a todos cuando el vehículo comenzó a detenerse-. A partir de aquí seguiremos a pie -Agrego oprimiendo un botón que comenzó a abrir la compuerta para dejarlos salir.
Ambos escuadrones bajaron de sus vehículos. Sander les ordenó a todos bajar al Híbrido y les pasó varias cuerdas para que lo ataran para llevarlo a rastras hasta la cima de la montaña pero cuando lo iban a bajar Abigail les pidió que no lo hicieran.
-No hace falta llevarlo completo -Dijo mientras se acercaba al Híbrido y sacaba unas herramientas de un bolso que colgaba de su cintura-. Es suficiente con una muestra de su sangre y un trozo de su piel -Agrego tomando las muestras.
-¿Y por qué lo trajimos entonces? -Le susurro Hanna a Clara en voz baja para que Abigail no la escuchará, sin embargo Abigail si escucho sus palabras y la miró de forma fulminante.
-En está ciudad hay equipo más sostificado que el de Edén, y ya que este es un nuevo Híbrido podría servir analizar detalladamente su cuerpo... Bueno lo que queda -Dijo mirando lo que quedaba de la bestia ya que le faltaba la cabeza la cual había explotado junto con Kent.
Sin más distracciones, todos se pusieron en marcha para llegar a la ciudad que se encontraba en la cima de la montaña. Al llegar ahí lo único que podían ver era un enorme muro metálico que rodeaba la ciudad y que tenía varias torres altas con potentes faros de luz que la iluminaban. Era una verdadera fortaleza.
Los faros no tardaron ni un minuto en enfocarse en el grupo de personas que se encontraba a fuera de su ciudad. Luego una enorme puerta comenzó a abrirse y varios soldados armados salieron apuntandolos con sus armas. Todos vestían uniformes completamente negros de tela gruesa, que los mantenía calientes y permitía una fácil movilidad en ese frío lugar, y cascos un tanto extraños que ni siquiera dejaba ver sus ojos.

-¡Sander! -Exclamó un hombre con alegría saliendo de entre los soldados. Se vía un poco más joven que el Teniente, de aproximadamente unos cuarenta años. Vestía el mismo uniforme que los soldados excepto que nada cubría su cabeza.
-Hola Troy. Mucho tiempo sin verte amigo -Saludo el teniendo extendiendo su mano.
-Lo mismo digo, ¿Qué hay de ti? Veo que la edad cada vez te golpea más fuerte -Bromeo-. ¿A que se deben que vinieran desde tan lejos?
Sander levantó su mano haciendo una señal de espera.
-¿Donde está tu Padre? -Pregunto serio.
-Mi padre murió hace un año en una misión en los bosques del Este -Respondió Troy con tranquilidad aunque la nostalgia era clara en su rostro.
-Mi gran amigo, que descanses en paz -Dijo Sander cabizbajo mientras soltaba un suspiro. Luego volvió a mirar a Troy- ¿Y tú madre?
-Debe de estar en los laboratorios..., últimamente no sale mucho de ahí.
-¡Bien! Porqué tengo unos asuntos de mucha importancia que tratar con ella -Informo Sander mientras miraba a Abigail.
-¿Puedo Saber de que se trata? -Pregunto Troy confundido.
-Mejor hablemos en un lugar más... caliente -Recomendó el Teniente ya que era de noche, estaba nevado y debido a la altura en que se encontraban el frío era mayor. Además la ropa con la que ellos contaban no los protegía del todo contra las bajas temperaturas.
Troy se dio la vuelta indicándoles a todos que lo siguieran.
Al entrar en la ciudad los chicos quedaron sorprendidos por lo que vieron. El lugar estaba repleto de edificios de pequeños tamaños, todos con electricidad a diferencia de Edén donde solo muy pocos la tienen. Solo con eso comprendieron que esta ciudad superaba por mucho a Edén. Las que estaban más maravillada eran Hanna, Clara y Kyala quienes no dejaban de mirar a su alrededor, parecían haber olvidado el frío.
-Aquí están los laboratorios -Informo Troy cuando llegaron al edificio más alto y que también eran los cuarteles de esa ciudad.
El cuartel de montaña alta era mucho más grande y contaba con mayor tecnología que el cuartel de Edén. Desde la entrada ya habían personas trabajando en diferentes cosas y caminando de un lado a otro cargando pequeños objetos en sus brazos. Y esto era solo el primer nivel del edificio.
Troy los guío através de los pasillos de la instalación hasta llegar a una pequeña puerta la cual era el ascensor que conectaba a los otros niveles del edificio.
Todos entraron en el ascensor junto a Troy y cuando las puertas se cerraron este hablo.
-Nivel superior -Dijo y el ascensor comenzó a subir.
Hanna, Clara y Kyala, quiénes eran las más impresionadas del grupo de novatos, se preguntaban como era posible que una ciudad así se formará y aún existiera en un mundo donde las bestias dominaban.
▅ ▆ ▇ █ Fin Del Capítulo █ ▇ ▆ ▅

Nota del Capítulo:
> M.A significa Montaña Alta.
>>>Capítulo Editado<<<
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Edición realizada el: 20-02-2021