Llegó el día de año nuevo en Japón y todos habíamos sido invitados al templo más antiguo de Japón al Sensō-ji, ya en la tarde estábamos levantados y bueno yo más que bañada, con un hermoso kimono color agua y en los bordes un azul marino con estrellas de color azul cielo, Paula con un kimono negro con la parte final de kimono con rosas rojas y Jack una yukata de color gris con negro. Paula me contó que está era exclusiva de humanos y luego nos iríamos a la de la invitación donde estaría Juna, Clow y demás seres de otros mundos.
Efectivamente al llegar un lindo elfo con yukata azul cielo con lila me esperaba en toda en la entrada, creí que había llegado tarde así que al estar frente a el me disculpe y le presente a mis padres, donde muy seriamente me ve y decide callar ante una duda, la cual Paula imagino y mientras giñaba un ojo dijo
Paula: recuerda que si la quieres cortejar debes hacerlo a la antigua.
Claro que no dijo que época pero este sin pensarlo dos veces ofrece su brazo para ayudar a subir a mamá, se que mamá le notaba algo sólo que no sabía el que, subí con Jack poco a poco ya que subir escaleras con las Geta no son fáciles.
Lo primero que hice fue estar cerca de todos y ver como las personas se divertían, como papá y Cedric se peleaban por los peluches para regalarnos, Jack no se iba a dejar destronar tan fácilmente, puede que no sea mi padre biológico pero el siempre ha estado allí para mi, incluso en películas que me hicieron llorar y mucho.
Nos compraron algodón de azúcar, bollos rellenos, dulces de arroz, cuando Cedric vio oportunidad me alejo de mis padres y me guía hasta donde un señor que da peces dorados, me dejó intentarlo pero sin éxito y el lo logró a la primera, como logró 2 en la primera decidí que uno era para mamá y el otro para mi lo cual este riendo acepto.
Cerca de las 12:00 am vimos un hermoso baile y luego oímos el sonar de los tambores para luego ver los hermosos fuegos artificiales. Al ver ese hermoso espectáculo sabía que era hora de irnos al mundo de la invitación, así que fuimos a un lugar ocultó y mostramos nuestras entradas donde un gran círculo mágico de color blanco se hizo presente y entramos los 4 a la vez.
Al entrar allí ya Manuel estaba con su familia y al verme con Cedric se puso algo incomodó, iba a hablar con el pero la voz de Franky me retuvo así que fui en dirección de el y lo salude mientras me decía
Franky: cierra los ojos, que te tengo una mega sorpresa Zafiro.
Lo mire curiosa pero eso hice y cuando me pidió abrirlos estaba Elvia y Hansen al lado de Franky. No negaré que lloré de felicidad al ver a Elvia y Hansen, hice llorar a Elvia quien me contaba lo mucho que me extrañaba y lo feliz que le hacían mis cartas, cuando le reclame el porque no me avisó me comentó que una sorpresa sería un gesto más bonito y luego de allí me sorprendió Luisa, Lirio y Andina como pude corrí donde las 3 y volvimos a llorar de nuevo.
Escuché de todas lo que había pasado y como habían llegado a sus aldeas. Les presente a mis padres y en un gesto supieron que estaba bien, lo que Elvia si miraba mucho a Cedric ya que el decidió ver sin decir nada, la chica que había conocido donde las sirenas lo sorprendía más y más y no era para menos yo en su puesto estaría igual.
Manuel al rato de su 'enojo' saludo a los chicos y atras de el venía Juna y Clow, Juna vestía una hermosa yukata de color negra con franjas moradas y su cinta era muy parecida a las alas de una mariposa negra con amarillo, Clow por su parte vestía de azul con negro y con otra yukata abierta con el dibujo de un sol en su espalda, de allí aparecieron más orcos, hombres lobo, osos, tigres, zorros, gatos.
Los únicos humanos éramos Juna, Clow, Manuel y yo. Note que detrás de Clow había un león y un ángel llamados Rumi y Yue, sonreí al recordar que Yue en chino es luna así que ocultaba algo hermoso a lo que decidí sellar ese descubrimiento en mi corazón.
Nuestra celebración sería diferente, nos conoceríamos todos y luego de allí empezaría la celebración, comparada con la hora del otro mundo teníamos 4 horas de ventaja, cuando saludaba una hermosa Oso polar me distrajo un pequeño lobo que se había atorado en unos pinos y decidí quitarme las Geta y correr, el padre del cachorro al notar su llanto corrió pero fui más rápida que el y lo baje a tierra firme y le dije
Yo: listo pequeño ya estás a salvo
Este enojado me dice: no soy pequeño, yo soy un gran lobo y seré un líder.
Un lobo de pelaje blanco con ojos verdes carga al cachorro y dice: Tony esa no es forma de dar las gracias.
Este gran lobo de 4 metros y medio llamado Tank me mira fijo y dice
Tank: es raro ver una humana salvar un lobo, agradezco tu gesto humano.
Lo mire algo triste y le digo: no todos somos malos, mi nombre es Zafiro y entiendo que no me tenga confianza Jefe lobo.
Tank asombrado me mira detenidamente y dice: eres una mujer curiosa Zafiro, y sabes porque lo digo.
Entendí cuando también se puso algo triste y se fue, se que a pesar de lo que pasó en mi pasado alguien me ayudó y por eso no me arrepentí de lo que dije, luego la osa volvió a verme y se presentó su nombre era Perla y estaba embarazada.
Luego conocí a otras 2 osas una grizzli y una panda llamadas Lluvia y Verano, también embarazadas. Las osas eran agradables y por alguna razón estuve atenta a ellas, luego conocí la tribu de Lirio y Andina, lo cual me agradecían por ese lindo gesto de salvarlas y hacerlas guiar a casa; no me percaté de que Cedric miraba los amuletos de mis amigos y detalló los diseños tan iguales excepto las piedras, Paula también pero prefirió esperar el momento y luego preguntar.
Luego cenamos un aperitivo y luego oímos la hermosa voz de Laura quien luego de un hermoso canto hizo ir al escenario los que éramos del año del Dragón, yo me alce junto perla, Lirio y la madre de Tony llamada Nieve, junto con la madre de Andina.
Esta vez cada una cantaba una línea de una nueva canción y mientras los demás se ponían en círculo debíamos movernos como una ola pero el grupo era de cada signo, es decir tigre con tigres, perros con perros, serpientes con serpientes y así, un hermosa Tigresa de Bengala llegó de última con su pequeño ella se llamaba Rosa y se unió a nosotras.
Cada una escogía su punto de partida con un cesto de estrellas de varios colores debíamos repartirlo en el grupo como si le diéramos una bendición de buena suerte a cada signo chino.