Luego de una semana en el mundo marino decidí volver a casa y estar con mi familia, Juna había dejado algunos regalos como año nuevo y supe que debíamos compensarla por ello, así que fui con Paula a comprar unos regalos para ella más que todo dulces y vestidos coquetos, había un kimono que me había encantado así que lo pague y con una caja de bombones lo envolví y cuando la llamamos nos hizo un portal para hacerle llegar los regalos; todos les había gustado en especial un kimono de color crema con peces dorados.
Ya había pasado varios años y ya tenía 22, recuerdo que me levanté muy animada y al bajar a la cocina oí voces a pesar de que eran las 3:00 pm muchos aún estaban levantados, cuando me asomo y curiosa veo a un Orco adulto que me dice
Orco misterioso: no me digas que ya te volviste mal educada.
Asombrada por ese tono de voz corro a abrazarlo y digo: Franky dios mío que alto estas; has cambiado mucho sólo que tu voz es igual.
Reímos por ese comentario a lo que me llamó enana diciendo que no había cambiado nada, Franky supo de mis aventuras y como logré cada una de ellas, bromeó con lo de para ser humana era muy fuerte y valiente y yo por mi parte seguía negándolo.
Me contó de Elvia quien estaba en unas misiones y no podía venir, pero me dejó sus cartas y una manera de hacerle llegar mis cartas, me contó que se había prometido con una linda Orco y que Hansen se había casado y estaba de luna de miel, eso me puso tan feliz pero apenas me pregunto por Oráculo me puse triste y le conté lo que ha pasado ya que la diosa Bastest sabía la historia, así que se me ocurrió que podríamos verla y que nos contará con calma lo ocurrido, cosa que no tubo éxito ya que Anubis me explico que estaba en su mundo aceptando rezos y rituales, se lo agradecí y volvimos a la cocina donde preparo un rico almuerzo y comimos ambos.
Le pedí que se quedará unos días para enseñarle los mundos a lo que este alegremente acepto así veía a Manuel y hablaba con el también. Efectivamente hablo con Manuel y conoció a nuestros padres, conoció los mundos que conocí y todo le encantó, deje que pasará más rato con Manuel para yo poderle copiar a Elvia y saber cómo estaba ella.
Cada 4 días me llegaban cartas de ella, de como se encontraba y lo feliz que estaba de retomar contacto conmigo, me contó que un joven Guerrero la cortejaba y ella se sentía feliz con el pero no estaba segura de que fuera realmente un cortejo, mientras pedía mi ayuda a lo que suspiro y digo
Yo: "Elvia estamos igual las dos, yo tampoco se muy bien esto del amor, desearía ayudarte pero yo tampoco me he enamorado" -mientras me lanzaba en la cama Cedric vino a mi mente y no pude evitar sonreír-.
Estuvimos entrenando en un templo donde la familia de Manuel siempre se quedaba, era muy estilo japonés, en la temporada que fuimos estaba toda cubierta de nieve y yo congelada a horrores porque me había puesto ropa de ninja de época, trate de aguantar 2 horas entrenando con Manuel y Franky pero el frío me congelaba y no me dejaba concentrarme.
Decidí entrar a la casa y entrar en calor, un rico te caliente estaba listo para todos, así que aproveche de tomarlo con calma y dejar que calentara mi cuerpo; como la casa era grande tenía 2 baños, así que luego de tomar el te me fui a darme un baño caliente y vestirme con un hermoso kimono de color lila con flores de Cerezo.
Las dagas luego de la pelea en el mundo marino se quedaron conmigo, no sabía si el tatuaje también pero siempre olvidaba ver eso, así que decidí olvidarme de eso ya que no era importante si lo tenía aún o no. Estuvimos 3 meses en la posada de Manuel donde pudimos entrenar de todo, luego de recoger todo volvimos al castillo donde Franky decidido volver al mundo de los Orcos sin antes darnos un papel con un círculo mágico donde le llegaban las cartas, aunque Manuel y yo teníamos celular por petición de nuestros padres prácticamente el no lo usaba y yo sólo raras veces.